La noche anterior habíamos dejado todo listo y ordenado, junto con mi mamá, para recibir a mis tíos y primos. Me acosté a eso de las 2 am y me dormí a las 3 de la mañana.
Estaba agotada, lo que menos quería era que llegara la mañana y tuviera que levantarme... Y eso fue exactamente lo que pasó.
-¡BROOKE!, levántate hijaaa!!- gritó mamá desde el primer piso de la casa.
-aaaahg -me quejé bajito.
-Zack, ve a despertar a tu hermana -dijo en voz baja, pero igualmente escuché.
En cosa de 30 segundos se abrió la puerta de mi habitación, la reconocible voz de Zack dijo:
-Brooke, levántate ya hermanita. Son las 11, los tíos llegarán a las 11:30. APÚRATE.
- Está bien -dije sin mucho ánimo -pido el baño.
- Si es que llegas primero -dijo con voz de desafío y sentí que cerraba la puerta.
Me levanté rápido de mi cama, tomé mi toalla y corrí lo más rápido que pude hacia el baño, que se encontraba al otro lado del corredor.
Cuando llegué allá, me encontré con la sorpresa de que Zack no estaba ahí, me di la vuelta para intentar divisarlo. Estaba en la puerta de su habitación con una risa malévola. Lo miré de pies a cabeza y noté que ya se había bañado, me engañó, otra vez.-La manera más rápida de levantarte, pequeña- dijo entre risas de maldad.
Rodé los ojos en son de molestia, luego sonreí y caminé hacia él. Le bese la mejilla.
-Buenos días hermanito-dije con una risa sarcástica y caminé hacia al baño pensando en una buena venganza.
Cerré la puerta y entre a bañarme.
***¡Toc Toc!, habían pasado 20 minutos que llevaba bañándome y entró Zack luego de tocar la puerta.
-Ya llegaron, apresúrate Brooke.- Ya voy.
Me saque el acondicionador rápidamente y me salí de la ducha. Me puse una toalla en el pelo y me envolví en otra. Salí del baño y caminé hacia mi habitación para vestirme rápido.
Escuche que Ema, mi prima de España, venía subiendo las escaleras.- ¿Donde está Brooke? -preguntó Ema a mi mamá en un susurro, para que yo no escuchara.
Apenas oí eso, corrí fuera de mi habitación, sin importar cómo estaba vertida, aún no terminaba de vestirme, estaba exactamente con jeans y sostenes.
Corrí y llegue hasta ella, salté sobre Ema y la abrace de la manera más fuerte que podría hacerlo, no quería soltarla, amaba tenerla así, junto a mi. No podía parar de llorar, desde que la vi en el corredor al lado de las escaleras que brotaron de mi lágrimas, lagrimas de alegría y emoción, al saber de qué al fin estaremos juntas y por mucho tiempo.
Una vez que nos separamos, caminé a mi habitación a ponerme una blusa y así poder bajar y saludar a mis tíos que están en el piso de abajo. Cuando salí de mi habitación, miré al frente y vi a mi primo Aaron, venía saliendo de la habitación de mi hermano junto con él. Corrí hacia él y lo abrace muy fuerte.
-Estas muy grande, Bu -dijo mientras me abrazaba con mucha fuerza.
- Y tu muy guapo A -dije bromeando, me dio un beso en la mejilla y nos separamos.
Abrace a mi prima por el cuello y bajamos las escaleras de esa manera. Abrace muy fuerte a mi tía una vez que la vi y de la misma manera a mi tío.
Pasamos un desayuno inolvidable, las conversaciones iban y venían sobre la mesa. Conversaciones entre mis tíos y papás, sobre trabajo, el viaje, la escuela de mis primos y temas financieros. Mientras que Aaron y Zack conversaban cosas de hombres, la verdad no tengo idea de que clase de cosas hablaban, pero debe ser cualquier conversación entre amigos.
Yo y Ema nos poníamos al día, nos comentábamos todo, para actualizarnos y saber las cosas que han pasado en la vida de la otra.
-Hijos, ¿Ya terminaron de desayunar? - preguntó papá, refiriéndose a mí y mis primos
-Si -respondimos los 4 al unísono y luego nos reímos por lo mismo.
-Entonces Zack y Brooke, lleven a sus primos arriba, para que dejen sus maletas en sus respectivas habitaciones.
-Okey papi -dije y nos levantamos de la mesa.
Subimos juntos y Aarón que venía atrás mío me puso las manos en la cintura y me llevo todo el camino así, cuando llegamos arriba me abrazó por la espalda, puso sus brazos en mis hombros y sus manos las apoyó en mi pecho. Me di la vuelta y lo abrace por la cintura. No lo recordaba tan delgado, ha cambiado mucho de la última vez que lo vi, me entristece saber ha crecido tanto, que hemos crecido tanto, que hemos perdido tanto tiempo y las cosas entre nosotros, como primos, han cambiado. Fue difícil separarnos, sobre todo al principio, después de un tiempo nos acostumbramos a estar lejos, pero aún así nos necesitamos mucho, sobre todo en momentos difíciles,como en la pérdida de mi hermana. Éramos mejores amigos. Ema, Miley (mi hermana) y yo, mejores amigas. Aaron y Zack, mejores amigos y nuestro grupo de amigos éramos nosotros, nos teníamos los unos a los otros, SIEMPRE...Como me gustaría volver a esos tiempo donde todo era simple y hermoso.
***
Una vez que Ema ordenó las cosas en su habitación, fuimos a la habitación que sería de Aaron, allí estaba él y mi hermano. Nos coordinamos y corrimos al mismo tiempo y saltamos en la cama de Aaron. Estallamos en risas, Ema y yo, cuando notamos que los habíamos asustado.
Se acostaron junto a nosotras, conversamos unos minutos sobre cómo sería la escuela para ellos y nos quedamos dormidos, al parecer estábamos muy cansados.
***
Cuando desperté, sentí un que me acariciaban el cabello. Di vuelta la cabeza lentamente y me encontré con Aaron, quien dejó de acariciarme el cabello.
-Lo siento, te desperté Bu?
-No, no te preocupes Aaron... ¿Que hora es?
Sacó su celular y miró la hora.
-Las 1:26 de la tarde...¿Debes hacer algo hoy?
-Si, vamos a tomar un helado, yo invito.
Me paré rápido de la cama y metí dinero y mi celular a la cartera. Me cepille el cabello, ya que estaba algo despeinada.
-Ayúdame a despertarlos -dije mientras miraba a Ema y Zack que aún dormían.
-Déjalos, deben estar agotados, vamos nosotros no más.
-Mmm...tienes razón, deben estar cansados...¡¡Ya vamos!!
***
- A donde van chicos? - dijo mi tía Sarah una vez que bajamos.
-Iremos por unos helados, tía
-Que les vaya bien, cuídense.
-Si, gracias.
-Adiós familia -dijo Aaron y cerró la puerta principal de la casa.
-Y bueno, ¿Como estuvo el viaje, A?
-Largo y agotador, pero con lo que dormimos recién, ya descanse algo.
-Si, dormimos arto rato... ¿y estás feliz con venirte a vivir a Londres?
-Si, extraño a mis amigos, pero tendré que hacerme unos nuevos, ¿no?
-Claro que si, hay chicos muy sociables y otros muy estupidos en la escuela.
-Como en todos lados, pero...ese estupido me suena a ex novio.
Solo me quede callada, él se dio vuelta y me puso frente a él para mirarme a los ojos.
-¿Estoy en lo correcto, Brooke?
-No, dijiste ex y la verdad no...no es ex, es novio.- Me di la media vuelta y seguí caminando hacia la heladería.
-¿ Y por qué tú novio es un estupido?, ¿te ha hecho algo?, ¿Ese estupido te ha hecho sufrir?. Te juro que estando en la misma escuela lo estaré vigilando todo el tiempo. Por ser tu novio no tiene derecho a hacerte sufrir o tratarte mal.- Dijo en un tono algo más alterado de lo normal y preocupado.
-No, no. Aaron, no te preocupes, no me ha hecho nada malo, es solo que ahora estamos algo distantes.
-¿Por qué?, ósea, si quieres hablarlo conmigo sabes que aquí estoy-Dijo ya más calmado.
-Prefiero no hablar de eso, gracias A.
-De nada y no te preocupes Bu, entiendo que no quieras hablar de eso...lo siento, creo que me altere mucho.
Llegamos a la heladería y había una fila larga, así que decidimos tomar una mesa. Sobre la mesa había un pequeño cartel con todos los sabores de helado. Comenzamos a verlos para decidir que helado pedir.
-Elige dos sabores.
-Okey Bu.
***
-¿Y que hay sobre ti? ¿Tú novia está triste por la mudanza?- Él lanzó una gran carcajada
-No, Bu, no tengo novia y tampoco tenía. Tuve una, duramos 2 años y medio. Pero eso acabo hace unos meses ya.
-Aah, ¿Te acuerdas de Connie?
-Jajaja, como olvidarme de ella, fue mi primera novia, aún recuerdo cuando se cayó a la piscina y yo me lancé a "salvarla" -hizo con sus manos las comillas- pero como yo tampoco sabía nadar, Miley no ayudó... realmente le debo la vida a tu hermana.
-Tranquilo, no le debes nada, su vida ya la perdió.
-Lo siento Brooke, no quise...
-No, Aaron lo siento, ignora mi comentario sin simpatía, lo siento de verdad. No me gusta ser así respecto a Miley pero, es cierto, ella falleció y no podemos hacer nada al respecto.
-Lo sé, no hay nada que podamos hacer, pero si podemos recordarla con mucha felicidad. Cuesta, pero debes aprender a hacerlo. Tu hermana fue una de tus mejores amigas y estoy seguro de que ella te quiere ver feliz y no triste o disgustada cada vez que escuches su nombre.
-Tienes razón...
Hubo un silencio incómodo hasta que llegó la camarera.
-Hola, buenas tardes. ¿Ya eligieron sus helados?
-Hola, sí, queremos dos conos dobles por favor.
-¿Los sabores ya los eligieron?
-Si, queremos uno de chocolate con chirimoya alegre y el otro de mentachips y chocolate -Dijo Aaron a la camarera.
-Okey-dijo mientras anotaba en una libreta -¿Desean algo más?
-No, gracias -dije yo y la camarera se fue.
-¿Como sabías que pediría helado de mentachips y chocolate?
-Ay Bu, sabes que te conozco demasiado. Amas el helado y esos son tu sabores favoritos, desde pequeña nuestros padres nos acostumbraron a venir a esta heladería y siempre, desde que tengo memoria, pides los mismos sabores de helado. De hecho recuerdo que una vez te propusiste probar todos los sabores de helado, porque siempre pedías los mismos. Vinimos todos los días en la tarde para que tú probarás diferentes sabores cada día. Una vez que los probaste todos, en una cena familiar le pediste disculpas a tus padres, recuerdo perfectamente tus palabras: "Madre, padre, lo siento mucho, sé que han gastado dinero extra en mis helados. Quiero que sepan que yo hice esto con el fin de cambiar de sabor de helado favorito... pero, no lo logré" Luego gritaste "¡¡Los sabores más ricos del mundo son el de chocolate y mentachips!!". Y toda la familia estalló en risas. Recuerdo con mucho amor los momentos que he vivido junto a tu familia. Son una familia hermosa y quiero que sepas que lamento mucho que estén pasando por momentos difíciles. Con mi familia haremos lo posible para ayudarlos de la manera en que podamos. De verdad les tengo demasiado cariño y me encanta saber que las cosas podría volver a ser como antes-Suspiró-Como los viejos tiempos Bu.
-Gracias A. Sí, me encantaría que las cosas fueran como los viejos tiempos.
*SILENCIO INCOMODO*
-¿Como esos viejos tiempos donde tú y yo andábamos de novios y nos dábamos besitos y nos escondíamos de nuestros padres? -y wooow puso una cara demasiado sexy.
-¡Que dices!? N...no, ósea, no...no...-Maldita sea, mi maldito primo sexy me puso nerviosa- Yo me refería a los viejos tiempo donde nuestras familias eran súper unidas y nos veíamos todos los días.
-Si Bu, cuando nos veíamos todos los días y nos escondíamos en tu habitación, ¿recuerdas? -Mierda, Aaron es jodidamente sexy.
-Ya...ya te explique a lo que me referías. Tú ...tu...tu -¿por qué me pongo tan estupida?- Tu sabes que éramos pequeños y no sabíamos lo que hacíamos.
-Lo sé Brooke. Estoy molestándote, no pensé que aún te ponía tan nerviosa. Cálmate, estás muy roja.
-Si, me pongo roja cuando estoy nerviosa, lo sabes
-¿Y porque te pusiste tan nerviosa? -este chico sabe jugar muy bien con su sexy voz.
-Por que no me gustaría que dijeras eso enserio. Sabes que eso JAMÁS-recalque mucho esa palabra- volvería a suceder, primito.
Él solo se cayó, creo que remate con lo que dije. Si, destruí todo lo que dijo con solo una frase ¡BOOM! Eres genial Brooke. Así se hace, a ganarle a tu primo sexy.
-Jamás -volví a recalcar para romper en silencio, ya que lo había dejado calladito.
-Obvio que jamás volvería a pasar, prima. Y tienes razón no sabíamos en que pensábamos. La verdad no sé en qué carajos pensaba cuando me enamoré de ti, sé que fue algo de niños, pero aún así sufrí mucho por ti, por saber que era algo imposible y lo seguirá siendo- bajo su vista muy notoriamente hacia mis labios - por el resto de nuestras vidas, primita.
Ooh rayos, por qué debe ser tan lindo y sexy. Definitivamente este tiempo que vivan junto a nosotros, será difícil. Espero que no volvamos a tocar este tema. Ya no tenía nada más que decirle. ¡No sabía que carajos responderle!
-Sus helados -llegó la camarera a salvarme, dejó los helados sobre la mesa, el mío frente a mí y el de Aaron frente su lamentablemente atractivo cuerpo y su estupido subconsciente - ¿Todo bien?
-Si gracias -le respondí
-Gracias - dijo Aaron y la camarera se fue.
-¿Quieres servírtelo aquí, o vamos al parque de en frente?
-Como tú quieras, Brooke.
-Eem...-dije pensativa - vamos, espérame aquí si quieres. Iré a pagar los helados y luego vamos al parque, para hacerte un recorrido por las que serán tus futuras calles. Ya viviste aquí, pero las cosas han cambiado demasiado. -me paré de la mesa y fui a la fila de la caja de la heladería.
Luego de que pagué los helados, salí junto con Aaron de la heladería. Íbamos caminando por la acera y cuando llegamos a la esquina donde cruzaríamos al parque, vi a mi mejor amiga en la esquina de enfrente, noté que ella me vio y se dio la vuelta, no entendía lo que estaba pasando. Mientras esperábamos con Aaron qué diera la luz verde del semáforo para cruzar al parque, seguí observándola y noté que le pego con el codo al chico que tenía al lado y le dijo algo que hizo que el se volteara a vernos a mí y a Aaron.
-¿Quienes son? ¿Los conoces, verdad?
-Sí, pero da lo mismo. Después te explico.-Él solo asintió con la cabeza.
Dieron la luz verde, Aaron y yo cruzamos y Alice no cruzó.
-Hola -dije y bese su mejilla una vez que llegue a su lado.
-Hola Brooke, qué sorpresa verte por aquí ¿Que haces aquí?
-Nada, solo vine por unos helados. Pero, ¿Y tu? ¿Con quien estabas?
-¿Yo? Con nadie Brooke, mucha imaginación. He estado sola paseando por el parque, necesitaba tomar aire y pensar un rato. ¿Por qué dices que estaba con alguien?
-No me mientas Alice, te vi con un chico y luego cuando crucé, él ya no estaba. No quieres que lo vea, ¿cierto?
-No se de qué hablas.
-Si, sabes perfectamente de lo que Brooke está hablando. Y créeme, si eso fue mucha imaginación, pues yo también la tengo.
-Pero que grosero cariño. Aún no se tu nombre.-dijo en un tono muy coqueto para mi gusto.
-Es Max, no cariño. -Dijo Aaron.
-Si, yo y este cariño, ya no vamos. Adiós.-Agarre a Aaron de la mano para que me siguiera.
-¿Son enemigas en la escuela?, ¿verdad? -preguntó Aaron una vez que estuvimos solos.
-JAJAJAJAJ, no, no podrás creerlo.
-¿Que?
-Es mi "mejor amiga"-hice comillas con los dedos.
-¿Y porque actuaba tan rara contigo?
-No lo sé, lleva días así. Sé que algo me oculta.
-Sí, es obvio que no quiere que sepas con quien sale. Se le notaba demasiado que mentía.
-Lo sé, pero, ¿Por que me defendiste así?
-Brooke, te iba a dejar como una tonta si es que le creías o no sabías que responderle, y para eso estaba yo allí.
- Gracias, ¿Y por qué le dijiste que te llamabas Max?
-Ya lo verás.
****
Estuvimos toda la tarde paseando por el parque, hablando sobre recuerdos y momentos de los viejos tiempos. Sin duda no hay nada más hermoso que recordar los bellos momentos que hemos vivido. Fue una tarde muy buena, la pase muy bien junto a mi primo, no recordaba que tuviera tan buen sentido del humor, me hizo reír demasiado y disfrutar este día.
Una vez que oscureció tomamos camino a casa. Cuando llegamos, estaban todos sentados en la mesa, así que no sumamos. Tome un vaso de jugo, ya que no tenía mucha hambre y una vez que termino la cena, subimos mis primos y yo a dormir.
Zack y Aaron se despidieron de mí y de Ema y nos dieron las buenas noches antes de irse cada uno a su habitación. Entramos en mi habitación, la cual compartiría con Ema.
Conversamos sobre cómo serían las cosas en la nueva escuela y también aprovechó de hacerme preguntas sobre mi noviazgo. Como a las 4 am aproximadamente nos logramos dormir. Teníamos muchas cosas que conversar...
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Our Secret
RandomCorrí hasta mi habitación y cerré la puerta de golpe, sentí que ésta se abría lentamente. No quise voltearme, en ese momento no deseaba ver a nadie. -Vete-dije con los ojos cerrados y llenos de lágrimas, sin darle importancia a quien fuera. -Tranqui...