Capitulo 4

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Allí estaba yo, dejando que mi estrés se fuera en conjunto con el humo de mi cigarrillo mientras todos disfrutaban la fiesta a su manera.

-¿Tienes Fuego?- Escuche la voz de una chica detrás de mí, no tenía acento para nada española, su acento latino le brotaba por los poros.

-Claro, toma- Respondí mientras Volteaba a mirar quien era.

No más alta que yo pero con una buena estatura, cabello rojizo natural y suelto un poco más abajo de los glúteos, pecas y un estilo de vestir sub-urbano.

-Hola, mi nombre es Víctor... ¿no eres de por aquí verdad?-

-Estas en lo correcto, me llamo Madeleine... Gracias por el encendedor- devolviéndolo así,   seguido de un guiño.


Cordialidad un acto de educación muy importante, pero a su vez un arma de doble filo; no se puede negar que era una chica muy hermosa con un excelente porte, pero yo estaba enamorado de Chloe.


Ya estábamos a unos poco minutos más de las 5:00 am y quedaban solo familiares en el club excluyendo a Romina y a mi, yo me encontraba algo estropeado y ronco. Sentado en el piso un poco a la derecha de la pista de baile con mi hermana tratando seriamente de no morir, sentía que al pegar los ojos iba a caer dormido durante 5 días para luego despertar con la resaca del año.


Poco después de estar sentados por varios minutos se acerca Chloe y se sienta a mi lado justo detrás de Romina.

-Vic, ¿estás bien? te noto algo cansado- Me pregunta Chloe.

-Si, no te preocupes... Solo estoy un poco mareado y cansado-

Nos miramos directamente a los ojos y acto seguido nos dimos nuestro primer beso.


Después de tanto tiempo conociéndonos, pensando que sería algo pasajero, nada más allá de un juego de niños, ahí estábamos sentados uno al lado de otro dándonos nuestro primer beso. Sentí miles de emociones diferentes en 1 segundo, mi mundo quedaba de cabezas y así mismo como me hacía perder mis sentidos también los traía de regreso a mi.


Ya eran las 6:00 am  y había llegado la hora de irnos a su casa, al subir al auto me sentía satisfecho, pase la noche entera con la persona que amo en su fiesta de cumpleaños y ahora nos dirigimos directo a su casa, yo sentado en el asiento de la puerta izquierda trasera, y ella acostada en mi regazo, pedíamos llegar en un chasquido puesto que estábamos demasiado cansados.


Al llegar nos tocó quedarnos solos alrededor de unos 20 minutos, nunca me paso por la mente en algún momento una mala intención, puesto que la respetaba más de lo que llegue  respetarme a mí mismo.

-Estoy cansado, deberías decirme donde dormiré- Dije bostezando con la mejor cara de ebrio.

-Se quedará mucha gente acá en la casa, en mi cuarto dormirán tu hermana, dos amigos de Kat, Kat, Gabriel, tu y yo- Gabriel, un chico de mi estatura totalmente pálido una personalidad estándar y hasta ahora se había portado bien conmigo, es el novio de kat.

-Será divertido-


Quedarme viendo directamente a los ojos de Chloe y sentir su profunda mirada tocarme el alma, no dude en rodearla con mis brazos por la espalda y darle un beso, sentir como mi piel se erizaba con cada segundo que mis labios besaban los suyos, podía sentir su fuerte respiración en mi rostro y como sus manos apretaban mi trasero con ganas de querer arrancar mis glúteos. Era un momento horny entre nosotros, pero en ese preciso momento se cortó nuestra privacidad y empezaron a llegar todos uno por uno, cortando de raíz la ocasión.

¿De dónde amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora