1.3

9 1 0
                                    

Han pasado días y asta hoy que la vuelvo a ver por la calle, iba acompañada de un señor con apariencia de militar asimile que era su padre, y al entre lazar nuestras miradas sólo hemos sonreído, y mientras pasábamos frente a unos matorrales sale corriendo un pequeño y diminuto gato.

A lo que ella con una expresión de alegría dijo.

-Papá!! Mira ahí esta Milk, lo agarraré

* Dejalo hija, ya llegara a casa

-Pero, papá hace días que ha desaparecido

Milk ven acá, el gato haciendo caso omiso del llamado cruzo velozmente la calle introduciéndose al otro lado en un tragante.

Al ver esa escena solo Sonreí y continúe mi camino sin voltear a ver en que había finalizado aquel acontecimiento.

Cuando regresaba a casa por la tarde me di cuenta que aquella escena de la mañana no había terminado en algo bueno ya que a lo lejos pude ver que Milk aun se encuentra en el mismo lugar, y que la chica misteriosa no pudo llevárselo.

Queriendo entrar en confianza con el gato empese a llamarlo por su nombre.

Milk Milk lo llamaba una y otra vez, pero era obvio el gato al no conocerme ni siquiera me volteaba a ver, viendo ahí se me prendió una brillante idea, y fui corriendo lo mas rápido que pude a casa, habriendo la nevera lo mas rápido que pude, y ya venía para la calle de nuevo.

Traigo conmigo un jugoso filete, se que con esto me lo ganare, dije con una gran sonrisa en mi rostro.

He llegado

Milk Milk, Milk han pasado ya varios minutos y no lo encuentro, pinche gato ojala no te allás ido, y seguí buscando asta que lo encontré, todo este tiempo que lo llevo buscando ha estado durmiendo en una cuneta, si me acerco a agarrarlo no se dejara.

Así que plan maestro bienvenido, saque el filete de carne de la bolsa en que lo llevaba y con filete de carne en la mano trato de acercarme de modo que sienta el olor, ha abierto los ojos.

Ven Milk, ven acá te espera este pedazo de carne.

Aaaaa este gato esta mal de la vista o no tiene buen sentido del olfato ya que ni se da cuenta que este pedazo de carne es para el.

Lo seguí llamando y poco a poco fue reaccionando al olor del filete y se fue acercando poco y justo cuando tenía el pedazo de carne enfrente lo arrebato con tanta furia, imagino que su hambre a de ser demasiada.

Bueno Milk ahora iremos a mi casa lo cargue y no soltaba el pedazo de carne, iba más concentrado en comer que ni cuenta se había dado a donde lo llevaba.

Hemos llegado a casa, bueno Milk bienvenido pueda que vivas acá provisionalmente o que esta sea tu casa para el resto de tu vida.

EJMACGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora