Porque los hombres no escribimos???
Te haz dado cuenta de que el 99% de las historias de esta aplicación son escritas por mujeres???
La primera razón es que no sé si es escrito o escritas
Pero bueno, aquí tratare de escribir una historia desde la p...
Oliver y Elizabeth siguieron caminando mientras el sol caía, hasta que por fin llegaron a vislumbrar el castillo
-Elizabeth el castillo no parece tan abandonado como lo decías.
-Oliver, te juro que la última ves que estuve aquí, esto estaba más que abandonado; tampoco es que sea un lugar muy acogedor a mi parecer
-Viste eso...!
-Ver que???
-La luz... La luz del último pizo
- Ya lo veo! Mira la del pizo inferior ta,bien se a entendido
-Al parecer se han dado cuenta que llegamos Mira están bajando el puerto y abriendo el rastrillo
-Que demonios es eso???
En ese momento una gran creatura de piedra salió corriendo a través del puente en dirección a donde estaban nuestros jóvenes héroes
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La bestia corría a una velocidad asombrososa, destruyendo toda cosa que se interpusiera en su camino, la bestia tenía cuatro brazos, y al correr se apolloba sólo en los 2 delanteras y sus piernas; en partes de su cuerpo tenía símbolos que Oliver no pudo comprender, pero con un brillo que se hacía notar aún con toda la distancia. En ese momento Oliver sintió un tirón que casi lo hace tropezar -Oliver corre!!!! Elizabeth ya llevaba unos metro de ventaja cuando empecé a correr.
Subimos una colina metiendonos a través de arbustos, raíces, troncos y rocas en ocasiones; pero nada parecía poder detener a aquella creatura.
-Elizabeth nada lo detiene!!! Que demonios hicimos!!!
-Tu solo corre, ya se nos ocurrirá algo
En una pequeña saliente perdi a Elizabeth. Al saltar oí un grito que decía
-Entra!!! Aquí niño ven!!!
Los dos nos quedamos apretados en una pequeña grieta, se podía escuchar nuestra respiración entrecortada, habían sido una carrera larga, seguro más de un kilómetro y medio. Y nada... Ni un silbido de viento, ni la pequeña caída de una roca, todo se quedó en silencio.
-Seguro lo hemos perdido en algún sitio Elizabeth se asomo para estar seguros cuando una gran masa de piedra salto, alzando una gran nube de polvo y roca. Rugio con una fuerza que nos hizo tambalear a Elizabeth y a mi. La creatura nos vio, y justo cuando estaba a punto de atacarnos se oyó
