Tears Of Blood

El nuevo amigo de tommy

Habían pasado dos semanas desde la llegada a su nueva casa. Lamentablemente las cosas no mejoraron como había prometido su madre, camila creia que al llegar a su nuevo "hogar" el infierno acabaría... pero se equivocó. Su padre llegaba borracho cada noche y las discusiones iban en aumento, habían escapado de un infierno para entrar a otro mucho peor, pensaba cami mientras preparaba el desayuno.

- ¿En que tanto piensas?- pregunto tommy con su tierna voz, haciéndola salir de sus tristes pensamientos.

- Nada importante ¿por qué no vas a jugar al patio trasero? es bastante grande y muy bonito... Así te distraes un poco - dijo al ver tan desanimado a tommy que simplemente asintió llevando unos de sus soldaditos para luego salir de la cocina sin siquiera tomar antes su desayuno.

Angela entró en la cocina dándole una sonrisa fingida a su hija, camila lo notó pero no dijo nada al respecto ya que sabía que la situación con su padre la tenia muy angustiada.

- Cariño, ¿me acompañas al supermercado? Necesito hacer algunas compras - dijo su madre para luego dar una vuelta sobre si misma -¿ me veo bien? - preguntó haciendo referencia a su vestido blanco floreado y sus tacones bajos, bastante simple la verdad, pero angela era muy guapa y todo lo que se pusiera le quedaba perfecto.

- Bellísima como siempre mamita, iré contigo ...pero ¿y tomás?¿con quién se quedará? ¿por qué no lo llevamos? - preguntó algo preocupada.

- Gracias, no podemos ir con tomás de compras..sabes que va a querer que le compre todo lo que vea - dijo con gracia angela - además se quedará con jess, tu hermana es la mayor y debe actuar como tal - agregó ella con seriedad.

- No me fío de ella - soltó camila en un murmuro, al que su madre no prestó atención.

- ¡ Jessica! ¡ yo saldré con camila! ¡te quedas con tu hermano! - gritó angela para que Jessica la escuchara.

- ¡¡pero mamá!! - se quejó la joven desde el segundo piso- ¡no quiero cuidar a ese mocoso! - gritó bajando las escaleras apurada. Camila rodó los ojos, era obvio que jess no quería que la molestaran y mucho menos cuidar de su hermanito.

- lástima cariño, ya que no quisiste ayudarme con las compras deberás hacerte cargo de tu hermano ... bueno ¡chao! ..y ¡suerte!. - exclamó su madre saliendo de la casa para que Jessica no pudiera oponerse.

- sólo serán unas horas, supongo - dijo camila con una sonrisa burlona en los labios.

- púdrete - respondió Jessica dando vuelta para subir las escaleras corriendo. Camila esbozó una pequeña sonrisa y salió de la casa para ir con su madre que la esperaba en el auto.

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30 minutos después cuando ya estaban formando la fila para pagar las cosas.

- ¡Se me olvidó la sal! ¡ espérame un poquito, ya vuelvo ! - exclamó su madre cuando ya era su turno de pagar .

- ¡No! ¡mamá no me dejes ahora!- dijo camila nerviosa.

- hija, no es para tanto drama - respondió divertida la madre al ver la cara de horror de su hija, le guiñó un ojo antes de salir de la fila - aprovecha el tiempo - dijo mirando al chico que atendía la caja.

Camila miró hacia la caja sin entender las palabras de su madre, el chico la miraba fijamente con una radiante sonrisa, cami se sonrojo y le respondió con una tímida sonrisa al apuesto joven.

- Hola... - dijo él algo nervioso pero sin borrar la sonrisa de sus labios -

- eh .. mm...ho-hola - respondió avergonzada y con las mejillas ardiendo, sacando las cosas del carrito -