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Conociendonos

Aries:

Son las 6:24 P.M

Fuí el primero en llegar a esa mansión. Siendo sincero tengo miedo de lo que me puedan hacer ahí.

Durante aproximadamente un mes, me habían llegado amenazas diciendo que si no me presentaba podría lamentar las consecuencias.

Yo no le daba mucha importancia hasta que comenzaron a actuar.

Primero comenzaron con quitarle las llantas a mi auto. Después, asaltaron la casa donde vivimos mi hermana menor, mi mamá y yo. Por último trataron de asesinarlas.

No puedo permitir que algo les pase, y si necesito estar aquí por ellas lo haré.

En la carta decía que viviría con más personas bajo las órdenes de un líder, no especificaron el número. Pero si eso me hicieron a mi. No quiero saber lo que harán con los demás.

Pasaron aproximadamente 20 minutos hasta que de un taxi bajó un chico. Él era alto, cabello negro y con rasgos asiáticos.

- Hola, Tú eres Aries ¿Cierto?

- ¿Cómo sabes mi nombre? Yo no te conozco.

- Hibamos juntos en la escuela primaria. Sii, lo recuerdo muy bien. Te metias en problemas cada cinco minutos.

- Yo no te recuerdo, de hecho creo que nunca te ví.

- Era muy tímido, No me gusta mucho socializar.- Dicho esto agarró su mochila y se sentó en la cera.

Poco tiempo después seguía llegando gente. Éramos 12 personas en total. Todos con una mirada preocupada y con miedo.

Después de aquel chico Asiático, llegó una chica llamada Géminis. Chaparra, tez blanca y con lentes de sol. Lo que no tenía sentido ya que estaba nublado. El siguiente fue otra chica. Morena, con cabello lacio y largo, con pecas y ojos café. De ahí le siguió una chica, la cual me parecía muy conocida, pero no recuerdo quién es. Alta, rubia y ojos verdes. Se veía muy preocupada y ansiosa, debieron haberle hecho algo muy malo. El siguiente era un chico, al parecer venía con la tal Géminis, supongo que son hermanos, tenía el cabello obscuro y los ojos azules. Parecía el guarda espaldas de la chica. También estaba una chica Castaña, estaba muy delgada y su cabello era chino y delgado. Sus ojos reflejaban tanta tristeza y miedo, ella se encontraba hablando con una chica de ojos café, cabello castaño y muy bajita lo que hacía resaltar sus caderas. A la derecha estaba un chico acostado en la cera, con unos audífonos y ropa muy veraniega, lo cual de nuevo no tiene sentido porque estamos en invierno. ¿Acaso aqui todos son raros? El siguiente era un chico, el estaba recargado en un árbol, con los ojos cerrados, se veía delgado pero se notaba el ejercicio que hacía. Y por último un chico y una chica, el chico era algo bajo, tenía el cabello rubio y pecas en sus mejillas a diferencia de la chica que tenía el cabello castaño claro y los ojos color café.

Todo era una incomodidad muy extraña, todos sabíamos que estábamos aquí pero no sabíamos el porque. Nesecitamos respuestas.

Una hora después, se escuchó un auto a largas distancias de aquí lo cual alarmó a todos ya que la hora de llegada había acabado. Todos habíamos Sido puntuales exceptuando a la chica de cabellos castaños y seño fruncido.

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⏰ Última actualización: Jul 10, 2019 ⏰

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