Capítulo 4

1.1K 71 36
                                    

Después de saludar a todos los presentes, junto con sus hijos, Akashi salió de esa casa. Delante de sus amigos se había comportado de manera impecable, no había hecho ningún escándalo, aunque en realidad hubiera querido dar mas de una bofetada en la cara al peli-negro, y al peli-morado.

Ya era noche cuando salieron de casa de Kise, y su hijos no habían hecho nada mas que comer dulces por todo el día, así que pensó no seria nada mal cenar afuera en un restaurante.

- Les gustaría ir a comer afuera? - pregunto Akashi mientras se encontraban en el auto que los estaba llevando ya a casa

- Si!! Ya paso un tiempo desde que salimos a cenar! - dijo Seiji muy animado

- Que quieren comer? - dijo el pelirrojo mayor a sus hijos

- CARNE!! - dijeron juntos Seiichi y Seiji, les gustaba comer la carne a la parrilla se podría decir que era uno de sus platos preferidos, claro excluyendo los dulces.

- Vale esta bien, pero por favor coman también la ensalada que nos darán de acompañamiento - dijo Akashi mirando con un poco de seriedad a sus hijos, los cuales respondieron de inmediato a su madre

- Umm esta bien... - dijo Seiji

- Si pero... podemos dejar por lo menos las zanahorias...? - dijo Seiichi, pues podían soportar todo tipo de verdura menos esa

- Lo pensaré - afirmó Akashi, el pelirrojo conocía muy bien los gustos de sus hijos y sabia seria algo imposible hacerles comer esa verdura sin que le hagan un espectáculo como los que le hacían en casa, la mejor decisión por esta vez seria no hacerles comer esa verdura, al menos por hoy.

El chofer los levo hasta su casa, pues era noche y sus hijos iban a tener de seguro frío así que decidió que antes de ir al restaurante seria mucho mejor pasar por su departamento para recoger los pequeños abrigos de sus hijos y después ir a comer. De esa manera cuando saldrían del restaurante podrían regresar a casa a pie, ya que el lugar donde irían no era tan lejos así que después que su chofer los llevara al restaurante le podría decir de retirarse por hoy.

Akashi bajo del auto y dijo a sus hijos que se quedaran ahí. Cuando llego a la puerta de su departamento, que se encontraba al octavo piso de ese pequeño rascacielos lujoso donde vivía, pudo ver que había una persona ahí parada que lo esperaba. Su asombro creció aun mas cuando vio la cara de esa persona.

- Que haces aquí Nash? - le pregunto de inmediato Akashi

- Parece propio que ya no sabes saludar Seijuro - afirmo Nash con una sonrisa mas que divertida

- Creo que muchas personas antes de saludar reaccionarían de la misma manera cuando encuentra una persona delante de la puerta de su propia casa y esta persona no es bienvenida! - replico Akashi

- Vale, ya tranquilo! No te enojes conmigo, estoy aquí porque quería verte, ademas que dijiste que un día habría podido conocer a tus hijos, creo que el tiempo ya llego...- la voz del rubio sonaba algo divertida y un poco arrogante para los gusto del pelirrojo

- Mis hijos...? Pues no pensé que ibas a venir hasta aquí para conocerlos, ademas no creo que sea apropiado, ahora con permiso necesito que te vayas y que me dejes en paz! - dijo el pelirrojo mientras abría la puerta de su departamento para cerrarla de inmediato.

Los pensamientos del pelirrojo en este ultimo periodo estaban solo hecho un lió, un montón de cosas estaban pasando y no eran de los mejores, no solo era acosado por el rubio sino también por el peli-morado y su familia, que donde iba lo encontraba, quería regresar a ese periodo de paz y soledad en el cual había vivido hasta ahora, donde no tenia que ver a sus hijos ser rechazados por su propio padre, quería regresar a ser el centro de los pensamientos de sus hijos, solo el podía darles la felicidad que merecían, solo el como madre quería llevar el dolor de esa triste verdad, sobre el porque no tenían un padre, ... quería que Seiji y Seiichi solo sintieran felicidad y amor!

Tu familia  (Yaoi/MuraAka)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora