Mi propia forma de Amar

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Nyan! Otra vez me ha ignorado... no importa cuanto maúlle, el nunca me hace caso...Mi nombre

es Gumi, soy una gata callejera que bueno, por alguna razón, tiene a un humano como presa. Lo

persigo en las mañanas cuando va al colegio y en las tardes cuando va a su casa. Le maúllo los

buenos días, las buenas tardes y las buenas noches, y nunca contesta... ¿Me estará ignorando? ¿O no puede escucharme?

Mis amigos felinos me dicen que ya lo deje, me dicen que ni sabe de mi existencia y no vale la

pena pero ¿Cómo no enamorarse de su extrema humildad, de sus ojos brillantes como su

hermoso cabello castaño, de su voz tan angelical? Simplemente no veo por qué esta mal pero

tampoco veo por qué no puedo estar junto a él.

Hoy es otra vez de mañana, y desde el árbol puedo ver que se alista para ir al colegio. Siempre

me gusto su uniforme; pantalones azules, camisa gris clara con corbata roja y chaqueta azul

escolar. Pasaron unos minutos y salió muy rápido que esta vez no pude alcanzarlo, pero desde

la entrada del colegio puedo ver donde se sienta....3 piso junto a la ventana... Encantador... el

ángulo perfecto para verlo durante clases pero nunca puedo hablar con él, ni pasar tiempo con

él, solo puedo observarlo, creo que este sueño de amor no se hará nunca realidad.

Me sentía tan triste que empecé a caminar sobre los tejados sin rumbo fijo mientras que

esperaba que Zac termine sus clases, fue así hasta que llegue a un santuario muy grande y

recordé que muchos humanos suelen llegar allí a pedir un favor a Dios...si ellos lo hacen

¿porque yo no?... Acaso mi deseo de amar tan imposible es que no se hará real.

Porque debe ser así, lo quiero junto a mí, tan cerca de mí, Dios te lo pido por favor...Tu magia

préstame... al pronunciar esas palabras sentí que pequeñas lagrimas salían de mis cerrados

seguidamente caí al suelo.

¿Que paso? Parece que algo cambio... me siento más alta, siento mis patas débiles...

¿¡Y mis patas!?

-Kyaaaa!-exclame mientras me caía de sentón al suelo. Al caer pude ver frente a mí que mis

patas traseras se habían alargado y habían perdido su pelaje. Llevaba zapatos escolares, unas

calcetas muy largas que bueno... abarcaban toda mi pata. Llevaba la falda escolar del colegio de

Zac, y... ¡¡Tenia pulgares!! Espera... ¡Son manos! ¿Que había pasado? aquellas manos las lleve

lentamente a mi cabeza solo para comprobar dos cosas:

1. Mis orejas ya no estaban

2. Tenía pelaje en la cabeza, así como Zac o como los demás humanos

Espera... si me lo pensaba un poco mejor, era como Zac, así que podría acercarme a él!

Trate de ponerme de pie como pude, y corrí torpemente hacia el colegio.

Me pare justo a una distancia prudente de la ventana de Zac y le grite:

-¡Buenos días!-y sonreí

Mi propia forma de amar ♡ -[Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora