Mis muñecas sangraban lentamente.
Iba perdiendo la noción del tiempo y espacio.
Sentía que mi alma salía por aquellas cortadas, y poco a poco, mi dolor mental, fue desapareciendo.
Iba a morir, jamás había estado tan feliz como antes, sabía que ya no iba a llorar mas, ya no iva a sufrir, ya no iba a sentir... dormiría... para siempre...