-Un nuevo día genial! -dijo con sarcasmo luego de ver que a través de la ventana pasaban los rayos del sol- Qué hora son? mm...- vió la pantalla de su celular que se encontraba en la mesita de noche- Mierda!- exclamó y salió corriendo al baño.
Se puso unos jeans ajustados de color azul gastado, unas converse y una camisa mangas tres cuarto de color marrón. Se peinó y arregló como pudo, así, sin desayunar salió corriendo de su departamento.
NARRA ___
-No puedo creer que me haya quedado dormida, genial ___, eres una genia! más te vale que consiga el trabajo- tenía la respiración agitada de tanto correr. -Disculpe...vengo por la entrevista de trabajo- Le dije a un muchacho que estaba recogiendo los platos sucios de las mesas.
-Oh! Hola- dijo efusivo- puedes pasar y tocar aquella puerta, ahi te atenderá el dueño- dijo señalando una puerta marrón que estaba cerca de otra que era mucho más grande, pero de color blanco.
-ok - Le contesté seca y fuí hasta la puerta que me había indicado anteriormente el muchacho.
-Se dice ¨gracias¨- dijo con un tono burlón.
-Ajam, si gracias- dije sin prestarle atención y disponiéndome a tocar la puerta.
-Por cierto, me llamo Ho Seok, Jung Ho Seok. Pero si obtienes el trabajo solo llamame Hobi - y me sonrió para luego entrar por la puerta grande que supongo que es la cocina.
-¿Pero qué le pasa a este?- dije. Era raro ver a una persona exageradamente sonriente como él. Sin dudarlo más toco la puerta. -Pase- dijo alguien del otro lado de la puerta así que pasé.
-Hola, me llamo ___ y vengo por el empleo de mesera que están ofreciendo.
-ahh si, ¿y tienes alguna experiencia laboral?- me preguntó mientras me señalaba con la mano para que tomara asiento. - Pues no he trabajado nunca, pero tengo iniciativa y aprendo muy rápido - ya empezaban las preguntas difíciles.Me senté y analicé al sujeto.
Era un hombre joven de unos 24 años aproximadamente, alto aparentemente ya que estaba sentado, con el pelo castaño claro. se veía buena persona.
-¿Vas al colegio?- volvió a contraatacar
-Terminé el colegio este año, y pensaba trabajar ya que cumplo mayoría de edad la próxima semana para así mantenerme.
- Así que eres independiente eh?- dijo y solo me limité a asentir - solo...contestame algo- hizo una pausa- ¿te gusta la comida?- preguntó al fin.
- eh si?- dije no muy convencida ya que su pregunta me resultaba extraña.
Pero osea... estas pidiendo trabajo en un restaurante y te parece extraña su pregunta? tú eres la rara- decía mi voz interior.
- Sí!- dije con más ánimo al reflexionar la pregunta.
-Ok estás contratada!- dijo ofreciéndome una sonrisa.
Qué?! en serio, así de fácil fue?
-Que fácil- dije sin percatarme que lo había dicho en voz alta
-¿qué?- preguntó el Joven, por suerte no había escuchado.
-Nada, nada ¿cuando empiezo?
- Si quieres puedes comenzar desde ya! es Lunes y tenemos muchos clientes los lunes- me dijo guiñandome un ojo.
Me levanté del lugar para salir y antes de tocar el pomo de la puerta me acordé que no le había preguntado su nombre.
-¿Podría decirme su nombre?- el me miro y me dijo- Jin, Seok Jin- sonrió.
Hice una reverencia y al estirar la puerta para salir lo encontré a él. Estaba espiando mi conversación con el Sr. Jin. Notó que lo descubrí...
-ooh mi lente de contacto- dijo llevando su mirada al piso buscando algo que estaba segura que era inexistente.
-tss... ya sé que me estabas espiando, deja de fingir le dije en un tono molesto pero no alto para que el dueño no nos escuchara.
Se reincorporó rápidamente y simplemente se tapo el rostro avergonzado y caminó hacia la puerta grande.
-hey! te estoy hablando
-Solo queria saber si pasaste
-Pues fijate que si pasé- le dije levantando la frente en alto, sintiéndome orgullosa
-Genial! ahora serás mi compañera de trabajo niña gruñona- me dijo sonriendo abriendo sus brazos para abrazarme. Rápidamente lo detuve y lo miré enfadada
-No soy gruñona!
Enarcó una ceja y se cruzó de brazos mirándome fijamente. Eso me ponía incómoda, me enojaba y pensaba patearlo, pero antes de cometer cualquier crimen hacia mi ¨compañero de trabajo¨ el Sr. Jin se hizo presente en la cocina.
-Hobi!- el nombrado se puso firme y llevo una de sus manos a la frente como si de un militar se tratara- Te encargo a ___, le enseñaras el funcionamiento del lugar y cualquier queja que tengas informame- me miro al decir estas últimas palabras.
-Señor, si, Señor!- dijo serio
Sin decir nada más, el jefe se marchó del lugar dejándome sola con este loco. Sí, lo había conocido hace menos de media hora, pero con su actitud me daba a entender que era un loco, un loco risueño y entrometido.
-Muy bien... ehm...?
-___-terminé la oración.
-sí, ____. Comencemos!- sonrió y me extendió un delantal de camarera. Rodé mis ojos y lo tomé.
No sé en qué me metí, con un¨compañero de trabajo¨ así no sé qué pueda pasar.
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Por verte sonreír
Любовные романыSer positiva es un don o al menos eso creía ___. Para ella todo su mundo era gris, no había un solo día en el que ella se sintiera acompañada o apoyada por alguien. Era una chica que no valoraba nada, ni su propia vida, pero, todo tiene una explicac...