Ladron de Corazones

prologo

¡que dios salve a la reyna!

la pluma era,mas poderosa que la espada.sus dedos podrian trabajar sobre una maquina de escrubir,pero el sentimiento era el mismo.Giles Brandon sentia su poder mientras trabajaba en medio de un recogido silencio.y gracias a dios estaba llegando a su final.Por dios ,que bueno era.Giles saco el borador definitivo de su articulo de la maquina de escribir con una sonrisa satisfecha en los labios,podía decirse que sonreía con jactancia,pensó,pero aquel era sin lugar a duda el mejor articulo que había escrito...y el mas incendiario.

dejo el papel sobre la mesa,se recosto sobre la silla y cruzo sus manos sobre el pecho un momento mientras disfrutaba de su logro y de aquel instante de silencio que le permitía paladear su propio talento.su casa de londres era una de las pocas que se encontraba apartada del bullicio de la ciudad,así que no tenia que soportar los ruidos d la gente que iba y venia,ocupada en sus quehaceres,el repiqueteo de los cascos sobre el pavimento o el rugido,el traqueteo y los odiosos bosinasos de los automóviles,cada ves mas populares entre las clases adineradas...e incluso entre las no tan adineradas.Gruesas cortinas de damascos cubrian las ventanas para que la sensacion de aislamiento fuera mayor.en efecto no oia ni un solo ruido de la calle.

Levanto la mano capriñosamente.-si-dijo en vos alta-la pluma,es ,efectivamente un arma mas letal que la espada.-por san jorge soy...-apesar del dominio del idioma no se le ocurrio otra palabra-¡brillante!.

Oyo de pronto unas palmadas a su espalda y se llevo tal sobresalto que le dio un vuelto a corazon .se volvio bruscamente ,lleno de asombro .llebava horas solo asi que ¿quien?.

-¿usted?-exclamo Giles y la ira entorno sus ojos.miro la puesta de su despacho.permanecia cerrada,como la habia dejado.la casa estaba cerrada a cal y a canto ,de eso estaba seguro.el ama de llave sabia que la despediria si se le ocurria salir sin echar llave.Asi que ..-brillante,Giles,oh si ,sencillamente brillante-dijo el intruso.

-¿que hace usted aqui? ¿como demonios a entrado?-....el visitante se encogio dehombros y se acerco a la luz que proyectava la lampara del escritorio.Aunque Giles podia verlo claramente (y comprobo que no llevaba ningun arma a la vista) , sintio una sibita punzada de terror.era imposible que alguien hubiera entrado a la casa.imposible que estubieran a solas en un vasto mundo de sombras.Giles no podia oir al mundo en su refugio .ni el mundo podia oirlo a el.-Yo sirvo a este país, y lo hago bien-replico Giles.-Usted se sirve a si mismo y es un egolatra-contesto la figura. Una lenta y irónica sonrisa se dibujo en sus labios crueles-. Pero esta apunto de realizar un servicio mas importante.a fin de cuentas,como usteds mismo a escrito todos devemos estar dispuestos al sacrificio.

Giles brandon abrio mucho los ojos.habia visto el arma.

-¡no!-grito.

-va a servir a su pais y le prometo que su necrologica sera...brillante.*¡pelea!*.se dijo Giles.era un hombre corpulente,pero por desgracia,no era agil.ni siquiera sintio el dolor .oyo sin embargo su grito.echo mano sobre el papel en la mesa su articulo.la pluma era mas poderosa que la espada ,pero un cullido bien afilado en manos de un loca..sintio el calor de su propia sangre derramada,la oscurridad que sircundava la luz,que como un pequeño refugiorodeava su escritorio comenzo a cerrarseinundo sus ojos de gris y de sombra.sintio que su grito se devilitava, se desvanecia..*grita*,ordeno su boca a su garganta pero su cuerpo le desovedecia .un horrible gemido escapo de su garganta.pero aquel sodido tampoco se oyo mas alla de las puertas de su despacho,aislado para que el molesto bullisio de la humanidad no turbara una mente como la suya.la sangre de Giles Brandon mancho la fina alfonbra oriental.Giles mirava con ojos ciegos oyo como se iva asiendo mas lento el latido de su corazon.bumm...bumm..bumm... y luego nada.

murio en medio del silencio que tanto anhelaba y lo ultimo que penso fue que, a pesar de todo era muy poderoso.la pluma tenia mas poder que la espada.pero la carne era devil el cuchillo afilado.