Vente para aca
que te voy contar las veintiún maneras en las que te pienso bes(foll)ar
hacer de tu pelo un nido
de tu espalda mi lienzo
de tu boca santuario
de tus manos mi sábana
de tu saliva el agua
de tu cuerpo el pan.
No me mires de esa forma,
como león que con cautela y penuria vigila su presa
La única diferencia está, en que yo si quiero que me comas.
completa, sin dejar migajas,
sin piedad.
Si amarte de esta forma es pecado
estoy condenada a morir lapidada.