eran las doce de la noche, la fiesta era un caos. no me sorprende mucho ya que asi son las típicas fiestas de adolescentes cuando sus padres se van a x lugar y dejan a su hijo a cargo de la casa creyendo que va a ser un "niño bueno".
pero cambiando de tema, dipper ya estaba borracho. el nivel de alcohol de dipper es bajo porque ya cuando tomo la mitad de la lata, este ya se encontraba ebrio.
en mi caso tanto no me gusta pero me aguantaría solo por dipper, si, sonó cursi a decir verdad.
me encontraba en el sillón al lado de dipper, quien estaba durmiendo, hasta que una pelirroja se acerca. llevaba un vestido negro, muy ajustado que se le hacían que sus pechos se le notaran.
— hey rubio, ¿quieres ir a las habitaciones de arriba? prometo ser chica buena— dijo relamiendo los labios.
qué asco pensé.
— no porque él ya tiene a alguien con quien hacer esas cosas— contestó dipper con tono frío y frunciendo el ceño mientras se levabantaba del sillón, sinceramente no parecía estar ebrio.
— ¿ya tienes a alguien? ugh. me voy— habló la pelirroja poniendo cara de asco mientras se iba a coquetear con otro.
a todo esto yo estaba como qué mierda pasó acá con cara de poker.
dipper se paró en frente mía y se sentó en mis piernas. y ahi pasó.
me besó.
dipper pines, el chico que me gusta, me estaba besando. sentía que mi corazón en cualquier momento iba a explotar.
cuando dipper se separó de mí, apoyó su cabeza en mi hombro y se quedó dormido. lo levanté y nos fuimos de la fiesta.
por suerte sabía conducir así que no habría problema. lo lleve a mi casa aprovechando que no estaban mis padres.
deposité a dipper en mi cama, se veía muy tierno y obviamente no pude perder esta oportunidad: le saque una foto.
nuevo fondo de pantalla pensé.
me acosté al lado de dipper cayendo en un profundo sueño. hoy fue la mejor noche de mi vida sin duda.
