Capítulo 7. - Problema solucionado

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- Slash -balbuceó una chica, de menor estatura que Stev... bueno, la misma que se mencionó capítulos atrás, cuando Slash y Duff habían ido al bar por toda la tarde-, ya te dije que no me gusta esto.

- Uy, lo siento -tomó las flores que le había llevado el rizado.

- No, no, están bonitas, pero... sabes muy bien que...

- Lo sé -suspiró con una sonrisa-, a ti te llevo a un concierto o un paseo en motocicleta -decía, la muchachita sólo asentía-... o a un tabledance.

- A eso no -dijo la chica con una risita, haciéndole morir de amor al rizado-, ¿pero sabes a dónde sí? -lo tomó del cuello, enrollando sus brazos en el.

- ¿Dónde? -cuestionó este, haciéndose el desubicado.

La chica solamente soltó una risitas coquetas, y metió a Slash a casa.

Mientras que Slash estaba acostándose con la chica nueva, en casa sucedían cosas, en resumen: Steven y Axl encerrados en sus cuartos, el primero pensando y el segundo recordando. Izzy y Duff quienes habían salido un rato, vuelven a la casa y se sientan de mala gana en la sala, cada quién con sus propios problemas.

Steven, un poco harto del asunto, se levantó de la cama para ir con Axl un rato, puesto que iba a ir con Izzy pero sabiendo que el pelinegro estaba con el que le rompió el corazón, mejor se fue a con el pelirrojo.

Mientras tanto, en la sala:

- Oye, Izz... -le llamaba la atención el bajista.

- ¿Dime...? -dijo el nombrado, sin levantar la vista.

- Pongamos que... a una persona le gusta otra, pero sin que lo sepa... entonces...

- No te enredes así, ya sé que hablas de ti y Steven, los vi ayer y ahora vengo a notar que no era precisamente una chica con quién estabas.

- Uff, bueno, me haces más sencillas las cosas -dice, algo avergonzado-. Pues, ayer cuando llegaste con Axl... Steven me había dicho que me quiere, y yo le dije que también, pero en el otro sentido, ya sabes -suspiró-. Y nos estábamos besando, pero luego de que abrieran mi puerta... no supe cómo seguir, y le dije que se fuera a dormir, maldita sea -apoyó su cabeza entre las manos.

- Oh... todo es nuestra culpa, entonces. En serio que lo siento. ¿Le explicaste todo a Steven?

- Lo hice  hoy, me dijo que todo estaba bien por lo que... ¡quise besarlo y me rechazó y me fui! -entró en desesperación.

- Actúas demasiado rápido. En primer lugar, debiste explicarle bien anoche, no hoy; segundo, no tenías que lanzartele de inmediato... puede pensar que tu interés es solo por eso.

- Ya, pero, ¿entonces qué hago? Si ya cometí esos errores.

- Tan sólo vuelve a hablar con él, pero con más calma... pídele disculpas de forma apropiada y luego dale su tiempo que ya volverá.

- Muchas gracias, Izz. En serio.

- No ha sido nada... ¿Podrías ayudarme tú también? De todos modos ya sabes lo que siento por Axl... fue más que obvio anoche.

- Te escucho -le sonrió el bajista.

- Pues ayer como estábamos tan borrachos, le dije lo que sentía y me correspondió asegurándome que no era por el alcohol, y nos besamos mucho... no hicimos nada más, solo dormimos.

- Vale, vale... y ya escuché el resto en la mañana.

- Exacto. Al parecer sí que me correspondió solo por estar ebrio, no sabes cuánto me duele... no solo el hecho de que no sienta lo mismo, sino que aproveché que estábamos borrachos para besarlo y todo, maldita sea... agradezco que supe detenerme.

- ¿Sabes algo, Izzy? No creo que Axl te haya correspondido solo por el alcohol. Se nota que siente algo por ti, no podría decir si tan fuerte como lo tuyo, pero sus sentimientos están allí.

- Me dejas mucho más tranquilo, supongo que también tendré que darle tiempo a las cosas -sonrió.

Mientras aquellos tenían esa conversación tan profunda, Axl y Steven estaban en algo similar en el cuarto del primero:

- Oye, Axl -rompió el silencio el de menor estatura, penoso.

- Dime -dijo el mencionado, bastante pensativo.

- ¿Qué pasó entre Izzy y tú? -cuestionó apenas audible-. Digo, si no quieres decir nada está bien...

- Pues... pues, salimos a beber ¡y ya! Cosas de mach... -se le iba a salir la frase por la que tanto se habían burlado de Stev.

- ¿Seguro? -dudó-. ¿Por qué estaban juntos en la habitación entonces?

- Ah... -se sonrojó demasiado-, eso mismo me gustaría saber a mí. No recuerdo lo que pasó -mintió. Su memoria en ese punto ya se estaba refrescando.

Steven soltó una pequeña risa y comentó:

- Qué loco, esa noche sucedieron muchas cosas.

- Sí... Parece que Duff estaba con una puta -dijo la última palabra con rabia al recordar que Izzy había llamado a esta supuesta chica "preciosa nena".

- Ah, ¿sí? -cuestionó queriendo ocultar que él era la "puta".

- Sí, cuando nos estábamos bes... cuando llegamos con Izzy, nos equivocamos de puerta y los vimos, era una chica rubia y bajita... como de tu tamaño, más o menos, la contextura similar... -empezó a analizar frunciendo el seño.

- Ah, vaya, qué cosas -colocó sus dedos sobre su barbilla, frotándolos haciéndose el pensante-. ¡Maldita sea! -exclamó de la nada.

- Sí, maldita sea... -dijo el otro a la vez que se cubre el rostro.

- Iré por mis popcorns abajo, ¿quieres ir?

- Vale, vamos.

Y en lo que estos bajaban, los otros se demostraban el agradecimiento por la charla que habían tenido con un caluroso abrazo.

- ¿QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ? -gritó Axl apenas los miró, poniéndose las manos en la cadera.

Steven miró a Duff, de una manera en que este quisiera pararse y explicarlo todo. ¿Una vez más desilusionado por el bajista?

Los que antes estaban abrazados se acercan a los de menor estatura rápidamente.

- No es lo que parece -respondieron al unísono.

Steven siguió callado, yendo a la cocina, verdaderamente quería unas popcorns así que se fue a conseguir su objetivo.

Duff de inmediato fue tras él. Y la escena se repitió con los otros dos, con la diferencia de que Axl volvió a encerrarse en su cuarto.

- Steven, en serio no es lo que piensas -le dijo el bajista preocupado, apoyándose en la mesa de la cocina.

- Pero yo no dije nada -soltó esa risita nerviosa, concentrado en preparar las popcorns.

- Oye... -dice tratando de captar su atención.

- Ahora no, Duff -decía tratando de evadirlo. Abrió una de las puertitas de la cocineta para sacar las popcorns. "Mierda, no hay..." pensó.

- Está bien -dijo en desilusión, recordando el consejo de Izzy de darle tiempo-, cuando te parezca mejor hablamos... -comentó tratando de sonar firme pero sin poder ocultar la tristeza que sentía.

"Nu...no te vayas..." decía arrepentido en sus adentros. Para luego voltear a con Duff quien estaba a punto de salir de la cocina, rápidamente lo tomó del antebrazo, jalarlo hacia él y abrazarlo. Ocultándose en él.

El más alto correspondió de inmediato el abrazo, tratando de buscar las palabras correctas para dejar de hacerle daño a la que era la persona más importante para él.

LOVE OF VODKA... LOVE OF POPCORNS [Duffen] [Izzaxl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora