CAP. 4 LA CONCHA ESCONDIDA

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“Annïe, Annïe” Oí que decían.

  -¡Annïe, despierta!-Me dijo Arhur.

  -¿Qué?-

  -La concha, he encontrado una.-

  -¿Qué? ¿Cómo?-

  -Estaba debajo de esta roca.-Dijo señalando una de las rocas sobre las que estábamos sentados.

  -¡Genial!, podemos salir.-

  -¿Podemos?, acuérdate de que es una concha cada uno.

  -Etonces…-

  -Entonces puedes quedartela tu.-

  -Pero...¿Y tu que arás?

conseguiré otra.-

  -No.-

  -¿No?-

  -Necesito quedarme para encontrar a mi hermana, asi que ve tu.

  -¿Estás segura?

Yo asentí con la cabeza y seguido me tomé una de las pastillas que nos habían dado a cada uno para poder respirar bajo el agua.

Entonces comenzó a alejarse.

Seguí caminando durante horas hasta que no pude más, oí que anunciaban otros dos ganadores ; ya iban siete en total. ¿Estará Sofía entre ellos? Pensé, solo esperaba que estubiese a salvo.

Me levante al día siguiente, seguía cansada y empezaba a faltarme el aire. Fui a tomarme una de las pastillas para respirar pero no estaban; seguí buscandolas por todos sitios cada vez más desesperada. Noté que se me acababa el oxígeno.Me caí al suelo y sentí que me iba a desmayar, sin embargo me impedí a mi misma hacerlo; por Sofí.

Entonces me pareció ver algo brillar,a unos metros de distancia, en ese momento no sabía si eran imaginaciones mías, pero valía la pena provar.Me arrastré como pude y lo coji. Y si, no eran imaginaciones, acababa de encontrar una concha.

Asi que recordé que antes de entrar me había atado con una cuerda que llevaba al esterior; así que comenzé a trepar y a trepar...

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