Lucy Heartfilia murió hace un año en un accidente, dejando a Natsu solo con su pequeño hijo, Nash.
Fairy Tail a cambiado mucho desde la muerte de aquella hada, ya nada es como antes.
Muchos ya tuvieron hijos.
pero lo mas grande que a cambiado fue l...
Desperté tranquilamente en mi casa, me puse a revisar uno que otro documento, luego salí a pasear por el bosque y por último fui al gremio, en cuanto llegue me acerque a las chicas.
—Hola—las salude al acercarme, a lo que ellas contestaron con un simple "Hola"
—Mia que bueno que llegas!—dijo Levy al acecharse a mi
—Mia vamos de misión!—dijo Wendy—es una sencilla y es solo de un día—dijo con una sonrisa
—Está bien—les dije-pero de qué consiste?
—Es muy fácil, vamos a ayudar en un restaurante de la ciudad de Oak —dijo Erza
—A Juvia le parece divertido!—dijo alegre
—Está bien—cuando salimos?
—Ahora!—dijo Levy y Erza me cargo.
Erza me llevo cargando hasta la estación de trenes, al llegar me bajo y yo les dije—Saben? Están locas—dije riendo
—Lo sabemos, pero aun así nos amas—dijo Erza riendo
—Jaja si—dije
—Bueno el tren llego—dijo Wendy
Todas subimos al tren y después de unas horas llegamos a la cuidad Oak. Al llegar caminamos hasta el restaurante.
—Hora de comer—dije mientras leía el nombre del restaurante—que nombre más ¿extraño?
—Supongo—dijo Erza
Al entrar Erza hablo con el encargado y a los minutos él nos dio unos trajes de maid... ellas esperan que yo me ponga esto?
—A Juvia le gustan muchos los trajes!—dijo Juvia feliz—Juvia apuesta de que Gray-sama se va a enamorar más de ella si uso esto todos los día!
—Me gustan los trajes—dijo Erza
—A mi igual—dijo Levy
—Y a mí!—dijo Wendy
—Ni loca me pongo esto!—dije viendo el traje
—Tranquila Mia, no va a pasar nada—dijo Erza
—Y si alguien me ve así? Sería mi fin! Ya nadie me respetaría! Se supone que soy una maga santa! No una maid!—dije
—Espera! Eres una maga santa?—me pregunto Levy
—Quien dijo eso?—dije confundida
—Lo has dicho tu Mia, cuando dijiste "Se supone que soy una maga santa! No una maid!"—dijo Juvia
—N-No habrán escuchado mal?—intente engañarlas, como pude ser tan tonta como para decir eso al frente de ellas!
—Mia dile a las chicas la verdad, toda la verdad—me aconsejo Erza—Puedes confiar en ellas
—Está bien...--suspire
Les conté a las chicas sobre quien soy, sobre lo que soy y de más, en si es conté lo mismo que a Erza. Les respondí una que otra duda y al final me convencieron de que me ponga el traje de maid.
—Ahora que me veo con el traje, no me queda para nada mal—dije mientras que me veía a un espejo
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—Ves, te queda perfecto—dijo Erza, a lo que yo le sonreí
—Todo me queda perfecto—dije haciendo una pose
—Jaja ya deja de lucirte y vamos a trabajar—me dijo Erza con un poco de sarcasmo
—Está bien! Vamos!—dije y todas salimos y empezamos a trabajar
Narra Narrador
Mientras que Mia, Erza y las demás, hacían la misión. En el gremio se veía la llegada de una pareja, formada por un pelinegro y una rubia.
—Hemos vuelto!!—grito la rubia abriendo las puertas, al hacerlo vio que su amado gremio, ahora se encontraba más animado que antes.
—Bienvenidos!—saludaron los del gremio
—Mavis iré a ver a Natsu—le dijo el pelinegro a la rubia
—Claro! Nos vemos Zeref! Iré a ver a Makarov—dijo y la rubia se fue a buscar al maestro del gremio
Mientras tanto el pelinegro fue a la casa de un peli rosa, al llegar se encontró con el peli rosa dormido abrazado de su pequeño hijo, a Zeref le pareció tierno así que empezó a tomarles fotos.
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(Dormían así, pero sin Lucy)
Después de un rato de haberle tomado fotos, despertó a Natsu.
—Hermano volviste—dijo un peli rosa adormilado mientras que miraba a su hermano mayor
—Me parece o el gremio está más alegre—dijo el pelinegro
—No te equivocas, desde que llego Mia la mayoría ha vuelto a sonreír
—Mia?
—Una chica que se unió hace poco al gremio, es muy fría, cortante y desconfiada
"-Mia... ese nombre me suena, aunque no recuerdo donde-"—pensó Zeref—bueno vamos al gremio o vas a seguir durmiendo?—le pregunto a su hermano menor
En la ciudad de Oak, se veía a un grupo de chicas trabajando de forma muy alegre.
—Chicas muchas gracias por su ayuda—les dijo el dueño del restaurante, este era un hombre alto, canoso y con bigote, iba vestido con un traje negro—bueno les voy a dar su recompensa—les entrego una bolsa con 30 000 jewels y una llave celestial de color plateado con un dragón en el medio y dos pequeñas incrustaciones de diamante azul. (Multimedia)
Erza agarro la recompensa y la repartió entre todas, luego juntas decidieron que la llave celestial se la darían a Mia.
