Capitulo 12: Plan B

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El lunes había llegado pronto y a pesar de todo lo que había sucedido con Gideon cuando fui a encontrarme con mi madrina todo estaba normal, ahora ambos nos dirigimos al colegio y aunque nunca hablábamos en el trascurso del camino al menos el silencio ya no era tan incomodo.
-Gracias James- dije bajando del auto, James ya les había dicho que era algo así como la mano derecha de mi abuelo, siempre lo acompañaba a todos lados y era el único que podía decirle cosas sin que se enojara, eran algo así como mejores amigos, al menos eso es lo que yo e notado, pero últimamente James me acompaña a todos lados supongo que el rey cascarrabias quiere estar segura de que no me vea con Luke.
-Gideon te e estado esperando- la voz chillona de Jade hizo a mis oídos resentirse, sin tomarle importancia me pase de largo, lo menos que quería era ver a Jade tratando de que Gideon le preste atención.
-hola Elena- dije abriendo mi casillero.
-buenos días Izzy- respondió, la notaba mas animada que otros días.
-vaya alguien se a despertado de buen humor- dije sonriendo, desde que sucedió lo del baile Elena a estado un poco triste y aunque ya me disculpe muchas veces yo no dejaba de sentirme culpable y triste por eso.
-toma- dijo extendiendo una tarjeta- no espero que vayas, es decir que haría un miembro de la realeza en una fiesta de pueblo pero es muy importante y tu eres mi única amiga en el colegio y pensé porque no y probablemente sea una locura pensar que iras.
-Elena- dije para detenerla ya que hablaba muy rapido.
-si- dijo deteniéndose.
-crees que me perdería la fiesta de cumpleaños de mi amiga, ni lo sueñes- dije abrazándola, así es, era el cumpleaños de Elena y sus padres habían organizado una pequeña cena y ella me estaba invitando, era obvio que tendría que ir, ella era la única amiga que tenia aquí y no sabia como le iba a hacer, pero iría a la fiesta.
-es en serio- dijo sonriendo- solo estará mi familia y un par de amigos, puedes traer a quien quieras, en la tarjeta esta la dirección, pero también puedes llamarme y alguno de mis hermanos o yo iremos a recogerte- dijo sonriendo aun mas y claro que llevaría acompañantes a dos para ser exactos y creo que el que uno de ellos este allí puede ser el mejor regalo de todos.
-no te preocupes estaré bien- dije sonriendo...
Después de clases de historia, fui directo al gimnasio, necesitaba hablar con Luke y llegando antes que todos era la única forma.
-quieres ir a una fiesta esta noche- le pregunte sentándome junto a él.
-Izzy ya hablamos de esto, no puedo asistir a ninguna fiesta del castillo- respondió atando los cordones de sus zapatos.
-y quien dice que es del castillo- respondí divertida.
-aja y según tu, el rey te dejara salir
-vamos Lucas, no me subestimes sabes que siempre me salgo con la mía y ya tengo todo planeado para que el rey cascarrabias me de permiso y si el plan a no funciona tengo un plan b de todas formas- respondí
-no puedes escaparte- dijo susurrando, ya que los demás comenzaban a llegar.
-tu no te preocupes, solo dime, iras o no- pregunte de igual forma.
-esta bien, a donde es la fiesta- pregunto, sabia que Luke no se resistiría a una fiesta
-esperame en la entrada del pueblo a las seis- dije sonriendo- ah y lleva un obsequio, algo para una chica
-espera, de quien es la fiesta- pregunto.
-ya te dije, de una chica- respondí, antes de ser interrumpida por el profesor.
-formence en una linea- dijo el profesor de física, y entre quejas y bufidos hicimos una fila. El primer paso de la operación cupido había funcionado, solo esperaba que lo demás fueran así de fácil...
Cuando llegue al castillo fui directo a ver si se encontraba mi abuelo.
- buenas tardes- dije después de entrar a su despacho.
-Isabella que quieres, estoy muy ocupado en este momento dijo mientras revisaba unos papeles.
-puedo salir esta tarde, necesitó ir a comprar unas cosas y no, no puede ir nadie a comprarlas por mi- respondí sabiendo lo que diría.
-sabes las reglas, sólo puedes salir si te acompañan James o Gideon- respondió sin dejar de ver los papeles
-por que no permites que me acompañe Lía o Bia, las pusiste a ellas para que me cuidaran, o no?- pregunte tratando de que las cosas se me hagan mas fáciles
-ellos son los únicos que pueden evitar que te veas con ese muchachito-
-pero que tiene de malo, sabes que Luke y yo somos amigos desde pequeños- respondí tratando de no exaltarme.
-y tu ya sabes cuales son las reglas- dijo viéndome por primera ves desde que entre a hablar con él- ahora si me permites- completo señalando la puerta.
Perfecto, esto era estúpido, pero no estaba tan mal, solo tenia que ir y buscar a James, el problema era a donde, baje las escaleras, fui a la cocina, al patio, al salón rojo y a muchos otros lugares y justo cuando estaba por darme por vencida, lo vi en el estacionamiento.
-James, espera por favor- grite, mientras corría.
-princesa Isabella, que sucede- pregunto con preocupación
-no te preocupes- dije cansada por correr- tu me harías el favor de acompañarme a comprar unas cosas, es que el abuelo me dijo que podía ir solo si tu me acompañabas- dije cruzando los dedos para que aceptara.
-lo siento princesa, pero debo de ir a Londres, pero si gusta puedo acompañarla mañana- dijo acomodando sus lentes.
-no te preocupes, creo que tendré que recurrir a la segunda persona en mi lista, pero gracias de todas formas y que tenga buen viaje- me despedí, pensando en lo difícil que seria convencer a Gideon...
-Lia- dije alcanzándola.
-si princesa- pregunto deteniéndose.
-tu de casualidad has visto a Gideon.
-vi al príncipe Gideon en el jardín hace un momento- respondió
-gracias- dije yendo al jardín, cuando llegue Gideon estaba allí, estaba sentado a la orilla de la fuente leyendo un libro, estaba de traje como siempre aunque no llevaba puesta el saco, me preguntaba si alguna vez a utilizado algo mucho mas cómodo que eso.
-que lees- pregunte sentándome a su lado.
-un libro- respondió sin importancia y sin quitar la vista de él, con su estúpida respuesta me dieron ganas de gritarle e irme, pero eso no era una opción si quería ir a la fiesta de Elena, así que respire hondo antes de responder.
-me refiero a cual es el titulo del libro- pregunte tratando de guardar la calma.
-que quieres, estoy ocupado- respondió de igual forma, volví a respirar hondo y continúe.
-quieres ir a una fiesta esta noche- dije sin rodeos, que podía perder, sus respuestas solo podían ser un feliz si o un humillante no y conociendo a Gideon ya estaba preparada para ambas.
-ya te e dicho que estoy ocupado- respondió con pesadez.
-vamos, solo iremos un momento, prometí que iría y no puedo ir si tu no vas- dije tratando de convencerle.
- no te confundas- dijo dejando el libro a un lado- si fui con tigo la otra ves y no dije nada fue porque tenia ganas de divertirme, no porque quería ayudarte, no volveré a incumplir las reglas por ti y mucho menos voy a mentirle de nuevo al rey sólo por cubrir los caprichos de una mocosa malcriada como tu, entiende de una ves por todas que como miembros de la realeza lo único que podemos hacer es lo que nos dicen que hagamos dijo con arrogancia.
-y convertirme en un títere de mi abuelo- dije mirándolo despectiva- ahora entiendo porque tu tampoco tienes sentimientos, solo eres un cobarde que no puede tomar sus propias decisiones, acaso eres feliz haciendo lo que te dicen que hagas todo el tiempo- pregunte haciendo una pausa- sabes que, no me respondas probablemente no puedas hacerlo aunque alguien te diga como- dije molesta, sin esperar una respuesta me levante y fui a mi habitación, no sabia como pero iría a la fiesta de Elena, le había dado mi palabra y eso era mas importante que cualquier regla absurda y si Gideon no iba con migo, iría yo sola...

♦♦♦

D

espués de terminar con las clases de mis Claris había ido directo a cambiarme, no me había puesto nada elegante ni sofisticado, de echo había ignorado el armario de princesa y me había dirigido a mi maleta donde aun estaba guardada mi verdadera ropa y no es que la otra no fuese mía, simplemente no me sentía cómoda con ella. Debían de ser como las cinco treinta o un poco mas tarde, apenas comenzaba a obscurecer y mientras tanto solo me quedaba esperar a que obscureciera por completo ya luego vería como me escapaba, así es mi plan B era escaparme creo que después de todo Luke si me conocía bien y pese a sus advertencias no tenia otra opción... Cuando ya había oscurecido tome un suéter y salí de la habitación, salir de la primera puerta del castillo seria fácil, lo difícil seria pasar el portón y los guardias de la entrada principal. Había llegado a la parte mas difícil, para mi suerte era hora de cenar para los empleados y solo un guardia se encontraba vigilando.
-pienza Isabella- dije para mi misma. Me acerque al guardia y puse mi plan en marcha.
-disculpe, estaba dando un paseo y se me callo mi pulsera usted me podría ayudar a buscarla- pregunte fingiendo preocupación.
-claro princesa- el hombre se pudo de pie y después de hacer una reverencia comenzó a busca.
-esta segura que la perdió aqui- pregunto.
-si, estaba caminando por el camino de piedras- dije señalando el lugar, el hombre se alejo mas de la entrada y sin que lo notara comencé a caminar.
Ya casi iba llegando a la entrada del pueblo, no quedaba tan lejos del castillo, calculando lo que había caminado unos veinte minutos a pie.
-que sucede contigo- Gideon me tomo del hombro pegandome tremendo susto, a decir verdad las calles estaban un poco solas, según Bia en el pueblo y en el centro de Canterbury son los únicos lugares donde son alegres las calles en días de semana.
-que haces aqui- dije un tanto asustada.
-no crees que el que debería preguntar eso soy yo, que tienes en la cabeza, acaso eres tonta y no escuchaste lo que te dije- Gideon dijo con indiferencia.
-acaso tu eres el tonto y no escuchastes lo que te dije, no me importa incumplir las reglas, ahora vete- dije de la misma forma, Gideon me tomo de la muñeca y comenzó a caminar con migo en dirección al castillo.
-que haces, sueltame o gritare-dije tratando de sacarme
-claro aslo y en primera plana saldrá mañana que la princesa de Canterbury se escapo, al menos me quitara el trabajo de decirle a tu abuelo.
-espera no puedes hacer eso, el va a encerrarme para toda la vida, en todo caso es tu culpa por no querer venir con migo- dije tratando de persuadirlo.
-salir con tigo no es mi responsabilidad, no soy tu niñero- respondió.
-perfecto, entonces deja que me vaya, ya se cuidarme sola- respondí tratando de verme segura de mi misma.
-no voy a ser tu cómplice, así que o caminas o haré que lo hagas- respondió, recordando que la otra ves me había cargado para subirme al auto, me apresure a hablar.
-entonces ven con migo, si lo haces no estarás mintiendo, técnicamente si tu vienes con migo yo no me habré escapado y tu no estarás cubriendome- dije tratando de convencerle.
-por que te importa tanto ir, es solo una estúpida fiesta- dijo con disgusto.
-creí que los príncipes no decían malas palabras- dije levantando mis cejas, Gideon me miro mal así que continúe hablando- esta bien, es el cumpleaños de Elena y le prometí que iria y ahora te preguntarás porque prometí algo así sabiendo que era difícil, pero tu que harías en mi caso es la única amiga que tengo aquí, ella me hablo antes de saber que yo era una princesa, ahora no se si los demas quieren hablarme por mi personalidad o porque quieren ser amigos de alguien de la realeza, solo ayudame a cumplir mi promesa y te prometo que no te vuelvo a molestar- dije cruzando los dedos para que aceptara...

Operación princesaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora