Es invierno, todo se pone frío, se vacían las esperanzas de volver a tener la misma vida de antes, solo deseando a que vuelvas a hablar con todos, sin problemas, sin discusiones, todos unidos, y con el gran amor de tu vida sentado al lado.
La vida es cruel, triste, feliz, y todas las emociones que puedas encontrar.
Cuando era pequeña, me preguntaba.
-¿Por qué hay personas que no sonríen?
Ahora entiendo todo.
Todos tenemos problemas, algunos menores que otros, pero esos pequeños problemas son los que a veces nos ponen límites.
Yo tengo demasiados límites, y lo peor, lo peor es no saber qué hacer.
Ésta Navidad, quiero quitar todos esos límites, y decirle a todos, lo que pienso.
