🌸 Winterwitch 🌸
Aclaraciones: En esta historia Wanda y Bucky son adolescentes, nada relacionado con los Vengadores existe.
Dedicada a Gabriela_Maximoff, espero que te guste bonita ❤️
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WANDA
Otro maldito día en esta escuela, hace dos meses que entré como nueva, desde un principio me llevé bien con todos, hasta que una rubia se entrometió en mi camino y decidió hacerme la vida imposible.
Siempre que entro a la escuela me esperan ella y sus dos amigas para decirme o hacerme cualquier cosa que me hagas sentir mal, últimamente estoy distanciada de todo el mundo, me hacían sentir mal, a veces he querido hasta dañarme a mí misma.
Agarré mi mochila y salí de mi casa, indignada como todas las mañanas esperé en la parada de autobuses. Cuando el autobús llegó cruce los dedos para no encontrarme con Sharon y sus amigas dentro del autobús. Subí los tres escalones y saludé al conductor, recorrí todo el pasillo sintiendo las miradas de mis compañeros sobre mí, sin darme cuenta me tropecé con un pie y caí de boca al suelo, todo el mundo comenzó a reírse descaradamente. Dirigí mis manos al frío suelo para poder levantarme pero antes de hacer un esfuerzo unas finas manos me cogieron de las axilas levantándome.
-¿Estas bien?- me preguntó, el chico era un poco más bajo que yo, delgado, y tenía el pelo castaño.
-Si, muchas gracias- sonreí levemente.
-Soy Peter- me extendió la mano.
-Wanda- le correspondí.
-¿Te sientas conmigo?- me preguntó señalando los asientos del fondo.
-Vale- él comenzó a andar y yo le seguí no sin antes mirar hacia tras para ver quién ocasionó mi caída, fue Beck el novio de Sharon.
El trayecto fue corto, Peter era un agradable chico, muy simpático y divertido. Él se quedó en la puerta con su amigo Harry, yo entré a la escuela, como siempre Sharon y sus amigas me esperaban apoyadas en las taquillas. Las ignoré y seguí hacia delante, llegué a mi taquilla y la abrí, todos los libros cayeron al suelo, tímidamente me agaché y los recogí, mientras lo hacía un chico pelirrojo me empujó disimuladamente con su pierna.
-Patosa- se rió y volvió a andar, no hice caso y dejé los libros en la taquilla, miré el horario y me tocaba gimnasia, perfecto primera hora y con las tres pesadas.
Llegué al gimnasio y me senté en los bancos apartada de los demás, pasaron unos eternos segundos y apareció la profesora por la puerta, todo el mundo se sentó en los bancos y se callaron para poder escucharla.
-Hoy correremos tres minutos ya que tenemos que hacer un campeonato de baloncesto- nos levantamos y empezamos a correr por todo el gimnasio, no iba la última pero tampoco la primera, solo quedaban dos minutos para terminar pero todo empeoró, Sharon pasó por mi lado y me empujó para que yo cayera de rodillas haciendo que mi rodilla sangrara.
-¡Sharon te odio!- grité y cojeando salí del gimnasio frustrada y con un enorme dolor en mi rodilla.
NARRADOR UNIVERSAL
-Sharon te has pasado- dijo un moreno el cual no solía hablar mucho en clase.
-No te metas Bucky- la rubia siguió corriendo, el chico no lo dudó y le dijo a la profesora que saldría a ver si la chica necesitaba ayuda.
WANDA
Abrí el grifo y agua comenzó a salir de él, dirigí mis dedos, índice y corazón al leve chorro de agua, cuando ya sentí mis dedos mojados los pase con cuidado por la profunda herida, gruñí de dolor.
-¿Te ayudo?- levanté la mirada y observé en el espejo, un chico de pelo moreno y un enorme cuerpo bien trabajado estaba apoyado en la puerta.
-No hace falta- ahora volviste a mirar tu rodilla y esta sangraba más.
-Deberías ir a la enfermería, te sangra mucho- el no se movió de su sitio.
-No creo que pueda llegar andando- reí secamente y volví a mojar mis dedos para limpiar la sangre de alrededor de la herida pero sin tocar a esta.
-Tengo una solución- ahora él se movió y entró al baño, se acercó a mí, yo me puse tensa, no me dijo nada y acercó su mano a mi trasero lo tocó con ganas pero después bajo lentamente para poder agarrarme como una princesa, -vamos a la enfermería- dijo él y comenzó a andar conmigo en sus brazos, no podía dejar de observarle, era tan guapo.
Llegamos a la enfermería y me dejo delicadamente en la camilla, la enfermera no tardaría en venir.
-Gracias- le dije.
-No hay de qué, ¿Wanda verdad?
-Si, ¿y tú eres?
-James pero me puedes decir Bucky- sonrió.
-Muchas gracias por traerme Bucky- volví a decir.
-Ha sido todo un placer Wanda- se acercó a mi y depositó un leve beso en mi mejilla, -esperaré fuera- se dirigió a la puerta y salió, yo no pude evitar sonreír como una adolescente enamorada.
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Me gustó escribir este One-Shot espero que a vosotros también os haya gustado.
Gracias por leer :)
