capitulo 27

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Narrador universal.

Se dirigieron apresurados al bosque, donde había sucedido el ataque. Al llegar vieron a los guardias de la manada investigando en conjunto con algunos vampiros y brujas que se les habían unido. Isabella estaba conmovida, le alegraba ver que a los demás les importaba su padre y hermano, màs allá de su posición en la manada. Le alegro saber que contaba con un apoyo incondicional.

Se empeñaron en buscar alguna pista, algún indicio que les ayudara a encontrar a los atacantes. Pero además de sangre y señales de lucha, no había nada. Eso desilusiono de sobre manera a Isabella. Intentaron animarla pero no les fue posible, al parecer las malas noticias hoy eran gratis.

A Angelo se le ocurrió una idea, màs no quiso compartirla hasta que estuviera seguro. Cuando estaba siendo entrenado, les habían exigido dejar una firma. Se donde sea, un símbolo, una palabra, un número, o hasta aveces, figuras. Su firma era una pequeña calavera con una sonrisa, era para el como decir que no importa lo que pase sonríe. Con esa idea en su cabeza tuvo un pequeño patronus en toda esta oscuridad.

Pasaron todo el día buscando, màs no encontraron nada. Decepcionados abandonaron el bosque a las 10:45 p.m. pero la determinación de Angelo era tanta, que a media noche (cuando se aseguro de que todos dormían salio en dirección al bosque) màs se llevo una sorpresa al encontrar a Isabella esperándolo.

"Estuviste muy pensativo. Cuando te escuche salir me adelante." Le dijo.

Èl sonrio "Cómo siempre nada se fe escapa. Creo que se còmo daremos con ellos. Cuando nos entrenaban exijian que tuviéramos una firma, el punto es que si fueron enviados por David tiene que haber alguna firma por aquí." Concluyo su relato.

"¿Qué es exactamente lo que buscamos?."

"Cualquier cosa: un sìmbolo, un nùmero, una palabra, figuras o incluso algo que este acòmodado de otra forma."

Ella asintió y juntos empezaron a buscar. Angelo en los alrededores e Isabella en dònde fue el ataque.

No fue hasta las 3 de la mañana que a Isabella se le habìa ocurrido buscar arriba en los àrboles, que encontro una marca nùmerica inusual cerca de una rama vieja.

"Creo que la encontré." Susurro a si misma. Llamo a Angelo y este después le dijo que posiblemente fuera un còdigo. Isabella despuès de detallarlo, se dio cuenta de que reconocía esa secuencia nùmerica y que significaba. Pues el numero 801 en japòn significaba yaoi, así que quien fue tenìa que ser fugoshi. Le tomaron una foto y un poco màs animados volvieron a la casa.

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Holis he vuelto!!!!! Les gusta como esta narrado? La verdad es que tenìa tiempo pensando en que serìa divertido variar un poco de el pundo de vista de nuestra protagonista. Comente di quieren que sigua narrando asì o prefieren la habitual. Voten. Los quiero bola de desconocidos. Besos.💋💋💋💋💋💋💋

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