Lo que siento, cuando lo siento...

2. Constantemente...

Constantemente paso por muchísimas desilusiones, pero lo que lo hace aún más desilusionante, es que viene de personas que yo jamás esperé una desilusión. Personas que aparentan ser tus compañeras y estar cuando vos necesites de su ayuda. Pero no. No es así. No podés confiar en nadie.
En tu grupo de amigas/os, todo va a estar perfecto, hasta que se crucen intereses. Cuando vos tengas un logro y ellas/os no, van a hacer hasta lo imposible para derrumbarte, pisarte y hacer que no te sientas bien, que te sientas miserable y veas que tu logro no fue tan impresionante, te van a querer hacer sentir del modo en que vos sin intención los hiciste sentir a ella/os a través de tu victoria. 
Los secretos. Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que dice. Las cosas salen mejor cuando te las guardas para vos y trabajas vos por abajo, sigilosamente, sin dejar que la gente se entere. La gente no puede aguantarse no decir un secreto, en especial si es algo que puede llegar a causar polémica. Simplemente por el hecho de que al tener una determinada clase de información, saben que podrían llegar a llamar la atención si ELLOS tienen la "nueva noticia". Todo gira en torno a su propia satisfacción.
Con esto no digo que hay que encerrarse en una habitación de cuatro paredes y no socializar. Lo que intento decir es que, hay que tener una buena relación con diferentes personas hasta un cierto límite.
Tampoco digo que absolutamente TODAS las personas llevan y traen chismes de acá para allá. Seguramente, aún quedan personas con consideración. Pero ante la duda, es mejor guardarselo.
Personalmente, siempre que conté algo personal, se terminaron enterando todos.