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Tenia 10 y él 13.
Fue para aquel entonces que se empezó a interesar en las chicas.
Y con ello empezaron mis celos.

Muy seguido venia a la casa una chica de pelo azul recogido en dos coletas. No me agradaba nada.

Él dejo de jugar conmigo, tanto así que cuando se lo pedía me tiraba los juguetes.
No tome rencor por eso, estaba pasando una edad complicada.
Tenia algunas discusiones con mamá para aquel tiempo.

Pero en las noches, sin falta me contaba las historias que tanto me impresionaban de las estrellas. Hasta que me quedaba dormido.

Yo... No era ningún tonto.
Sabía que esa chica "Bombón" era la novia de mi hermano, lo estaba llevando por mal camino.
Sus notas habían bajado desde que ella vino por primera vez a la casa.

Cuando estaba presente, intentaba por todos los medios que Fred me prestara más atención a mi.

-Oye Fred... -Decía ella.

-¡Hey Hermano! ¿Me ayudas con la tarea?

- ¿No puede hacerlo mamá?

-Mamá no esta, zopenco. -No me animaba a decir otro insultó más ofensivo, no sabía de lo que Fred era capaz.

Él rodó los ojos y me hizo un ademán con la mano para que me siente en una silla al lado suyo.

-¿Qué no entiendes, enano? -Murmuro mientras veía el cuaderno que había traído y que tenía entre mis manos.

-Es que no encuentro España. -Dije señalando un mapa.

Ojeo un momento el mapa y finalmente suspiró y me lo señalo.

-Aquí. -su voz tomo un tono de superación .

-Gracias. -Me dirigí a mi habitación, necesitaba otra excusa. Me fije en mi mochila,tire un cuaderno tras otro hasta encontrar el de matemáticas.

Las cuentas eran muy sencillas... Pero necesitaba, por todos los medios, la atención de él.
No podía dejar que esa zorra lo separé de mi.

Salí de nuevo de mi habitación... Se estaban besando. Algo se rompió en mi.

Me aclaré la garganta y hable.

-Ajam... Hermano ¿Me ayudas? -Se separaron al escuchar mi voz.
Él fastidiado y ella sorprendida.

-Dijiste que él ya no interrumpiría... -Murmuro por lo bajo... Aún así la escuché, solo era eso... Un estorbo.

-¿Qué más quieres Freddy?

Su tono me rompió más aún, trataba de forma sobrehumana de que las lágrimas no cayeran.

-Amm... P-pues...

-¡Vamos pedazo de idiota, habla! - grito mientras me sacudía.

-N-nada...

-¡Eres un idiota! ¿¡Acaso lo haces a propósito!? Deja de interrumpir pequeña basura.

Adiós... {Frereddy} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora