Ángeles y Caídos

Capítulo 1. Sólo es un atajo

La música estaba tan fuerte que cualquiera que estuviese unos pocos metros cerca de aquellas abismales cornetas sería capaz de quedar sordo por el resto de su vida, ¿pero eso qué importaba? era una noche única e irrepetible y unos cuantos decibeles de más no harían la gran diferencia. Entre el malestar y la borrachera a penas y se oía algo.

- ¡Súbele a la música!- gritaba Libra en medio de euforia con dirección hacia Acuario, chica que leyó los labios de libra y aumentó el volumen en medio de risas y gritos.

Podría no tener gota de alcohol en su cuerpo, pero eso no significaría que se sintiera totalmente influenciada por este.

Cerca de Virgo, Cáncer suspiraba por quizás su mala suerte - Todas están con alguien ¿A caso estoy muy fea? me gustaría que alguien me sacara a bailar ...- - Pues ¡Bailemos!- Respondió Virgo sin perder ni un minuto.

Bailaron juntas. Cáncer, aquella chica podía ser muy hóstil, incluso "llorona", pero sonrisas tan sinceras como la de ella, pocas se encontrarían en el mundo.

¿Bailamos?- Un chico moreno tocó la espalda de Virgo con aquella proposición-

La verdad no soy muy buena en eso - rió- mejor baila con ella - empujó levemente a su amiga Cáncer para que hubiese contacto- esto originó un leve contacto visual entre ambos con un toque de complicidad.

Y quizás, tan sólo quizás un aire de decepción en sus ojos buscando una sensación tal vez intocable y que ninguno conocía aun.

Bueno será mejor que busque a Piscis -pensó Virgo para sí misma, antes de embarcarse a la dificultad que le daría la tarea . Cuando en medio de una multitud estaba aquella alta chica con otra unos centímetros más alta-

Piscis, Tauro -Medio gritó Virgo para que pudiesen escucharla- ¿Quieren salir un rato a tomar aire fresco?-Preguntó sosteniendo las muñecas de ambas -

Claro -Respondió Piscis, llevándose a Tauro que no entendía muy bien la situación y sólo quería seguir disfrutando de su bebida-

La realidad es que Virgo quería algo más que tomar un poco de aire, se sentía atrapada, como si todos la mirasen intimidándola, criticándola, haciendo que se sintiese insegura. Le encantaba explorar y descubrir, vivir sensaciones nuevas mientras esto no estuviese ligado con personas tóxicas y superficiales que destruyesen la poca autoestima que años y sobretodo algunas personas habían forjado. Aunque se supone que todo esto era un secreto, y aquellos que lo sabían no terminaban de creerlo por completo.

"Superficiales, malditas plastas de mierda" -Ella sabía cómo eran, pero no terminaba de darse cuenta lo que aquello significaba y lo muy poco que eso debía importarle-

¿Se dieron cuenta de lo hermosas que están las estrellas hoy? - Hablo Piscis, enamorada del cielo, de su propio mundo. Respirando profundo, inhalando como si fuese la última sensación que experimentara-

"Tienes razón, están muy hermosas"

¿Por qué hablan así? Pareciese que estuviésemos en medio de un campo cuando en realidad sólo estamos respirando toneladas de cigarro, alcohol y posiblemente sexo. Así que si me disculpan voy a entrar de nuevo a esa fiesta a servirme otro vaso de ese delicioso vodka con naranja. Bye -Lanzó un beso en señal de despedida-

Tauro, tauro, tauro... siempre despertando a ambas de su sueños y bajándolas a tierra.

Después de todo tiene razón -río- Vamos Piscis, entremos -Virgo estiró su mano para ayudar a levantarla, aunque la otra fuese mucho más alta-

Si te soy sincera, quiero irme, ya estoy cansada. Me parece mucho más divertido quedarme hablando con alguien a estar oliendo esa mezcla apestosa -Respondió Piscis, causando que Virgo se carcajeara por la espontaneidad de su amiga- Estoy de acuerdo, reunamos a las otras y vayámonos- Esta vez la chica alta si aceptó, después de todo era fácil de convencer-

Tan fácil de convencer que ella misma lo sabía, y muchos se aprovechaban de ello haciéndola sentir muy mal. Cuestionándose si en verdad debía ser tan cuidadosa, sincera y sobretodo tan compasiva con aquellos que la herían.

-Libra ¿Te vienes o te quedas?- gritaba Virgo, tratando con todas sus fuerzas de no llamar la atención- ¿¡QUÉ DIJISTE!?- preguntaba Libra a todo pulmón mientras bailaba en medio de dos chicos- ¡Que si te vienes o te quedas! - Gritó Virgo llamando la atención de muchas personas y avergonzándose- ¿Que si te entretienes no te sobreexcedas? ¡Eso es imposible cariño! - Gritó con toda su fuerza Libra para terminar riendo al ritmo en que movía sus caderas-

"Mámalo Libra"

Piscis se quedó ahí tratando de explicarle a través de algún lenguaje extraño lo que quería decir Virgo.

Bien, Acuario... -Volteó y vió a esta tratando de imitar lo que podría "decir" una canción de dubstep- Ni siquiera lo intentaré -Prosiguió su búsqueda hacia Tauro para encontrarla besándose con algún chico sin prestarle mucha atención- Sólo nos queda Cáncer. se supone que a la tercera es la vencida.

Caminó unos cuantos metros y si, allí estaba Cáncer, pero no era la misma chica de un rato atrás que se sentí triste y sola. Esta bailaba con un chico que no era el mismo moreno regordete de antes, y vaya que lo hacía muy bien. Las manos traviesas de ese nuevo apretaban el trasero de la chica, disminuyendo a unos pocos milímetros la distancia de sus cuerpos. Virgo no pudo evitar reírse ante aquella panorámica que involucraba un drástico cambio de personalidad.

¡Esa es mi niña! -Gritó para que Cáncer la escuchara y esta le devolviese una sonrisa llena de satisfacción-

Virgo, no logré que Libra me entendiera, siento que está muy borracha -Llegó preocupada Piscis, sacando a Virgo de sus pensamientos llenos de orgullo -

Siento que estamos tú y yo solas -Rió- Vámonos antes de que se haga más tarde.

Sin pensar mucho ambas salieron y utilizando una de las raras aplicaciones que Piscis guardaba en su teléfono llamaron a un taxi. Al cabo de un rato este llegó. Pasaron mitad del viaje en silencio, Piscis acurrucada en Virgo, como aquella alta disfrutaba estar.

No conozco este camino ¿Tú si? -Preguntó Piscis a su amiga en medio de susurros -

- Virgo se acercó a la oreja de su acompañante- La verdad es que no, pero no te preocupes. Sigue durmiendo.

"Seguramente sólo sea un atajo".