Casada con un extraño (James Maslow y tu)

Capítulo 26: Casada con un extraño

-Por fin puedo conocerte me han hablado tanto de ti
-Lo mismo digo , oye ¿cómo vas con tu embarazo?

-Excelente, no me han dado muchas nauseas ni nada de eso solo que mi bebe es muy antojado - ella rió  divertida

-Me alegro, sabes que el doctor me dijo que los antojos son cosa de la madre que el bebe no tiene nada que ver en eso-

-No lo sabía, pero créeme mi bebe es un glotón- ella era una mujer muy gentil y sumamente simpática

-Solo nosotras lo sabemos cuñada, los doctores podrán decir misa pero nosotras somos las que lo sentimos

-¡Exacto! - Dijo riendo

-Se los dije, apenas se conocen y no paran de hablar- Dijo Kevin

-Me tienes tan abandonada haya en Italia que casi no conozco a nadie-

-Por eso decidí comprar una casa aquí en la ciudad- 

-Vaya, hasta que me haces caso hermano. No tiene caso que Daniella este sola

-¡Por fin alguien que me comprende! -todos soltamos una carcajada ante su comentario.
La velada transcurrió y los invitados seguían llegando las mujeres de la mesa estábamos inmersas en nuestra conversación y los caballeros en sus pláticas de negocios, cuando estábamos de los mas entretenidas en la conversación Denis se quedó en silencio y con la mirada fija en la puerta de entrada

-¿Denis te sucede algo? -ella no respondía

-¿Qué pasa mamá? –Dijo James - Daniella enfoco su mirada en la dirección en que lo hacía Denis

-Pero ¿qué hace esa mujer aquí?

-¡¿Me podrían explicar que es lo que pasa?! -todos se dirigieron algunas miradas, yo era la única en esa mesa que no sabía lo que ocurría

-¡Ay cuñada! Tienes que controlarte, esa mujer es la ex esposa de James - ¿Qué Pero que hace aquí, que ni se le acerque a mi esposo porque no respondo de mi. 

-Espero que a menos tenga la decencia de no acercarse a nosotros- James tomó de mi mano y la apretó con suavidad. La desvergonzada de Katia se acercó a nuestra mesa pero no venía sola
-¡Hola familia! ¿cuánto tiempo sin vernos?

-Exacto y estábamos tan bien sin tu presencia así que... ¡Largo! – Dijo Daniella

-Ay Daniella sigues tan...Gentil como siempre, James ¿cómo has estado querido?...dijo pasando su mano por el hombro de James.

-Felizmente casado y a punto de ser padre por segunda vez

-¡Ay que buena broma!

-No es broma, mira te presento a mi esposa ____

-Un gusto querida -respondió de lo más hipócrita y yo también.-Querido tus gustos han decaído bastante-

-Ya termina de irte Katia que no comprendes que arruinas la cena- bien dicho Kevin

-Ok me voy, un gusto volver a verlos familia

-Lástima que no pueda decir lo mismo ahora vete porque si no la cena me hara indigestión- tenía tanta rabia al verla ahí parada sin ningún pudor era una desvergonzada, lo peor era que era mucho más bonita de lo que pensé, parecía una modelo, cabello rojizo ojos color miel piel blanca y tenía unas curvas que cualquier hombre notaría a simple vista ahora entendía porque James se había enamorado de ella. Cuando por fin se retiró James me abrazo como si supiera todo lo que estaba sintiendo

-Te ves hermosa esta noche pequeña -después me susurro al oído-Quisiera haberme quedado en la casa para disfrutar de ti -Él sí que sabía cómo levantar mi autoestima, el saber que él me deseaba me elevaba hasta el cielo

-Cuñada que esa mujer no eche a perder esta noche, no le des importancia

-No te preocupes no lo hará -dije con una sonrisa, Romina venía del brazo de David, estaban muy sonrientes y se sentaron con nosotros, saludaron a todos pero también note que mi amiga venía un tanto molesta. 

-Le dije claramente que no trajera a esa mujer- Mencionó molesta

-¿De qué mujer hablas?

-Pues de esa tipa que se cree tocada por dios- dirigió la mirada hacia en donde estaba Katia

-¿Hablas de Katia?-  Dijo Daniella

-¡Ajá, ash hace que se me revuelva el estómago!

-A todos amiga, a todos

-Encontré a esa tipa en la cama con mi novio, no perdón ex novio
-No me extraña- vaya esa tal Katia era una fichita.

-Hey David, yo los veo muy contentos- Daniella se refirió a Romina y a David

-Romina me dio una oportunidad- mencionó con una enorme sonrisa

-Espero que estén disfrutando de la noche- dijo Romina

-Claro que si cuñada- mi amiga se sonrojo -Espero que pronto te unas a la familia -El resto de la cena siguió de lo mejor, David se guardó sus comentarios sobre mi y podría jurar que hasta me dedicó una sonrisa.