Capitulo 3: Lara Blake

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PROV. EDWARD

-¿la han encontrado? –pregunte ansioso.

-no señor. –respondió. –pero encontramos algo que es para usted. –dijo tendiéndome un objeto, lo mire extrañado y luego dirigí mi mirada a lo que tenía entre mis manos, era un pequeño cuaderno antiguo por lo que podía ver, lo abrí y en la primera página distinguí la letra de Kate. “Espero que este detalle sea tan especial como lo fue para mí. Aquí podrás desahogarte y escribir tus pensamientos y secretos cuando no lo puedas hacer conmigo por x situación. Te amo, tu Katherine.”   Volví a dirigir mi vista al hombre que tenía frente a mí, mis ojos se llenaron de lágrimas, lleve el cuaderno a mi pecho y lo abrace con fuerza, como si de ella se tratase, eso significaba tanto para los dos, así había comenzado nuestra historia de amor, sin darme cuenta, comencé a llorar pero esto era suficiente para no rendirme y buscar hasta donde fuera necesario.

-hay algo más… -hablo nuevamente el hombre, lo mire incitándolo a seguir. –también encontramos esto, no estamos seguros que sea de ella. –deposito en mi mano las argollas de matrimonio que sin duda era de ella.

-lo son. –respondí con dificultad.

-en ese caso… lo sentimos mucho. - él se disculpó y se marchó.

-vamos a casa Eddy, en este estado mejor te llevo yo. –hablo mi amigo tomándome del brazo y arrastrándome hasta su coche, yo simplemente no estaba aquí, con mi amigo, estaba con ella… Muerto.

Mi vista estaba en la nada, fuera del coche viendo gente caminando de un lado a otro durante en el trayecto y me sentí tan vacío, hasta que una melena pelirroja llamo mi atención, era una que yo conocía a la perfección y estaba saliendo de un puesto de periódicos.

-para el auto. –ordene a mi amigo.

-¿Qué? ¿Qué pasa?

-¡eh dicho que pares el maldito auto! –grite, el piso el freno de golpe, sin decir nada Salí y corrí en busca de Kate, esquive a toda la gente que se cruzaba pero no la encontré. -¡Kate! –grite sin obtener respuesta alguna, mire y busque en todas las direcciones posibles sin encontrarla.

-uff… al fin te encuentro ¿Por qué saliste corriendo así? –pregunto Rodrigo.

-Vi a Kate. –respondí aun buscando con la mirada, pero después me resigne, tal vez solo era una mala jugada por parte de mente y solo era una ilusión.

-puedo imaginarme por la situación por la que estás pasando pero… es momento de superarlo, ella ya no está aquí.

-no, no tienes ni idea de lo que es perder a la mujer que amas, no tienes ni idea del dolor tan profundo que se puede llegar a sentir y que no se si algún día está herida podrá cerrar, es lo peor que te puede pasar. Ahora mismo me siento tan perdido, tan… vacío sin ella. La necesito, la necesito para seguir viviendo. –le respondí, el me miro con lastima tal vez, pero no me importaba, ya nada me importaba, ahora mismo era tan patético que yo mismo me tenía lastima.

 Al llegar a casa le pedí que me dejara solo y así lo hizo, vague por toda la casa hasta detenerme en unas fotografías que estaban en portarretratos sobre un mueble, en ellas vea a una Kate de 5 años con su familia biológica y desee que estuvieran aquí, que pudieran demostrarme que ella seguía viva y acabaran con esta incertidumbre, con este dolor… en otra ella estaba abrazada a sus padres adoptivos. Entre a la que era nuestra habitación, tome su almohada y hundí mi cara en ella, aún tenía su perfume impregnado ¡Dios, cuanto la extrañaba! ¿Ahora como seguiría mi vida sin ella? ¿Cómo?

Esa noche no pude dormir, mi mente se la vivió vagando en todos los recuerdo que tengo con ella, cuando los rayos del sol me avisaron que ya era de día me duche y desayune una taza de café, tome un taxi para ir a la empresa, en primera porque lo había dejado allá y en segunda no me sentía competente de poder manejar. Cuando llegue me encerré en mi oficina y me dispuse en ocupar mi mente en trabajo y solo eso, tenía que terminar este proyecto.

-¡dios! ¿Edward porque no te tomas el día libre? ¿Acaso no te has visto en un espejo? Pareces un muerto viviente. –hablo mi amigo, irrumpiendo la tranquilidad de mi oficina, lo mire con fastidio.

-si me tomo el día libre, no dejare de pensar en cosas dolorosas, necesito distraerme.

-entiendo pero si sigues así colapsaras ¿al menos has desayunado algo? –pregunto.

-deja de actuar como una madre, se cuidarme solo.

-tu aspecto no dice lo mismo.

-¿Qué no lo entiendes? ¡Quiero estar solo! –hable fastidiado, pero el pareció no entenderme, quiso volver a sermonearme pero el toque de mi puerta lo callo. -¡adelante! –grite, Melissa asomo su cabeza antes de pasar, la notaba un poco nerviosa. -¿Qué pasa?

-señor, cuando venía a la empresa y entre a recepción me eh encontrado con una mujer llamada Lara Blake y quiere el puesto que se anunciaba por periódico.

-¿eso que tiene que ver conmigo Melissa? Yo no hago las entrevistas y no estoy para eso.

-es que físicamente es idéntica a la Señora Katherine. –respondió. Tarde unos minutos en poder asimilar sus palabras.

-¿Qué? ¿Ella está aquí? – hable al fin, en mis labios se transformó una sonrisa, estaba a punto de salir a buscarla y abrazarla con fuerza pero alguien se interpuso en mi camino. -¿Qué te pasa? –le pregunte molesto a mi amigo.

-Melissa, espera unos 5 minutos y mándala con nosotros y pide a los empleados discreción, que no mencionen la existencia de la esposa de Edward. –dijo, ella asintió y salió.

-¿Qué demonios haces?

-piensa claramente, aun no has visto a esa mujer, tal vez sea un familiar con gran parecido o simplemente no sea ella, por otra parte dado el caso de que sea ella, se está presentando con otro nombre, lo que significa que no sabe quién es, no te recuerda, si haces algo estúpido la asustaras y saldrá corriendo y en vista de que esta con una identidad falsa nos sería difícil volver a encontrarla. –si lo pensaba, mi amigo tenía razón, necesitaba calmarme y controlar mis impulsos, no la quería volver a perder, esperaría a que ella me recordara y si no lo hacía que encargaría de que se volviera a enamorar.

-tienes razón. –le dije. Melissa volvió a tocar la puerta y la abrió.

-pasa. –murmuro ella, enseguida entro una mujer con la melena pelirroja atada en una coleta dejándome sin aliento, era ella, mi Katherine.

*****

chicas pido disculpas por la tardanza :( prometo intentar no volver a hacerlo pero eh estado concentrada en mi otra historia, sin contar el monton de cosas que me sucedieron... tratare de dedicarme tambien en esta.

una pregunta ¿quien sabe de Medicina? necesito ayuda para una historia que tengo en mente.

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⏰ Última actualización: Jan 06, 2014 ⏰

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