Capítulo 37: Los amigos no se abandonan

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Silver: Es hora de irnos, jefe.

???: Mi sangre-Su voz tenía un tono que mostraba seriedad e indiferencia.

Diego: ¿Eh? ¿Sangre?

???: Mi sangre está dispersa, está dentro de otras personas, la quiero devuelta.

Silver: Es imposible, jefe, su sangre se mezclo con las de esos chicos.

???: Ya veo-Su pupila se vuelve blanca y grietas salen de sus ojos.

Wallas: ¿Eh?-De repente el rubio cae al piso mientras siente un fuerte dolor recorriendo su cuerpo, Diego va con él y vuelve a su forma normal mientras se arrodilla.

Diego: Wallas ¿Qué le pasa?-Voltea a ver a Anne-¿Qué le está haciendo?

Anne: No tengo idea-Preocupada la chica mira a Ernesto pero este también tenía cara de que no sabía lo que pasaba.

Diego: Wallas ¡Wallas!-El rubio agarra su mano y la apreta con fuerza.

Wallas: Los... amigos... no se... abandonan-Muestra una enorme sonrisa mientras que sus venas se vuelven visibles de un color amarillo y su piel se está volviendo negra.

Diego: ¡Anne! ¡Cúralo! ¡Haz algo! ¡Quítale esa sangre!

Anne: Ah... ¡Bien!-Cubre al rubio de una luz blanca pero esta no le hace nada-No funciona.

Diego: Intenta otra cosa ¡Rápido!-El chico estaba desesperado.

Anne: Es que...-La castaña estaba dudosa.

Diego: Anne, rápido ¿Qué esperas?

Anne: No tengo manera de sacarle esa sangre.

Diego: ¡Busca la manera!-De repente al pelinegro se le ocurre algo-Ya se.

Anne: ¿Qué harás?

El pelinegro se transforma en una criatura con dientes afilados y boca circular, su piel se vuelve verde moco con pequeñas manchas naranja amarillentos y también se vuelve húmedo y brillante, se vuelve mas delgado, volviéndose una sanguijuela humanoide que mide tan solo 1 metro.

Diego: Le quitare toda la sangre.

Anne: ¡No! ¿Sabes lo que eso te hará?-La joven estaba preocupada.

Diego: Tú tampoco lo sabes ¿No? Déjame hacerlo, es mi amigo.

Anne: Es muy peligroso.

Diego: ¡Tu lo dijiste!-Grito-Soy un miserable bueno para nada, no le hago ningún bien a nadie ¡Quiero cambiar eso! ¡Déjame ayudarlo!

Anne: No tienes que sacrificarte.

Diego: El es el único amigo que tuve, el único que estuvo conmigo sin importar lo malo que fuera ¡Por favor!-Suplicaba.

Anne: Lo siento-Su mirada era triste.

Diego: ¡Te dije que te movieras!-Su tono cambio a uno molesto y le da un golpe a la castaña haciendo que se golpeara con la pared.

El pelinegro se encoge un poco mas volviéndose del tamaño de un perro chiwawa y pone su boca en el pecho del rubio y empieza a tragarse la sangre negra.

Anne: ¡Detente!-Agarra su PSP y oprime un botón así controlando a Diego, hace que se aleje de Wallas y luego lo pausa-Estuvo cerca.

La piel de Wallas se vuelve totalmente negra, se pone de pie como si nada mientras sonríe de manera tétrica.

Wallas: ¡Ya estoy aquí!-Gritó con emoción.

???: Los tengo a todos.

Anne: ¿Todos?

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