Mi Chica (Liam Payne)

capitulo 32: amar y perdonar

(liam)

-ya no te preocupes liam, ella estará bien- dijo zayn subiéndose a su auto.

-si sabes algo de ella llámame por favor- el asintió y se fue, niall ya había salido de mi casa desde hace mucho, jessica lo llamó y el acudió inmediatamente.

-tal vez si voy a su casa…- me dije a mi mismo, entonces sin mucho que pensar, conduje hasta su casa, ahí afuera estaban los padres de _________.

-¡con toda la razón del mundo se fue!, sabía que no era buena idea dejarla ir contigo, solo la lastimas, esto no le hace bien a su tratamiento- ¿escuché bien?, George dijo tratamiento si, ______ ¿estaba enferma?

-yo sé que no soy una buena madre, pero la amo, me muero si le pasa algo a mi niña, me muero- dijo la madre de _______ llorando desconsoladamente, yo me acerqué a los dos un tanto avergonzado por escuchar conversaciones ajenas.

-liam… ¿Qué haces aquí?- la señora me examino unos segundos, yo le ofrecí mi mano.

-liam payne- ella dudó en tomarla pero de todos modos lo hizo, toda ella temblaba.

-Sarah Farrelly, tu ¿eres novio de mi hija?- bueno fuera, ¿ella le habrá dicho que éramos novios?

-no, solo, soy su amigo, me quedé preocupado por su llamada- le dije a George.

-perdón por preocuparte liam, pero _________ ayer se fue del hotel en parís y hasta ahora no ha regresado, ni contesta el celular, no sabemos dónde esté- mi corazón se estrujó, ella no podía andar sola por la calle, menos de noche, ¿Qué tal si algo le pasó?, tengo que encontrarla.

-¡George!, el doctor fletcher al teléfono- dijo anne quien era seguida por danielle, ambas tenían la misma cara de preocupación que todos.

-¿hola?, si… ¿de verdad?, claro que si, su madre está conmigo, vamos para allá- el colgó y le entregó el teléfono a anne.

-¿Qué pasa?- preguntó Sarah.

-ella se encuentra en el consultorio del doctor fletcher-

-entonces vamos hacia allá- los dos corrieron hasta el auto de George y se fueron, no entiendo nada, ¿Qué rayos pasa?

(_______)

-lo siento- le susurré al doctor, él me regaló una sonrisa de medio lado.

-¿Por qué?, ¿por destrozar mi oficina?, no importa, otros pacientes lo han dejado peor, ven acá, Lucy te curará la mano- no me levanté, no quería hacerlo, me sentía débil.

-estoy bien- le dije en voz baja con la mirada perdida al frente.

-no no lo estás, llevas tres horas y media llorando desconsoladamente, eso no es de alguien que está bien- se sentó enseguida de mí y pasó un brazo por mis hombros.

-me quiero morir, me quiero morir- dije otra vez rompiendo en llanto y con un nudo en la garganta, cada vez que repetía “me quiero morir”, se me iba la voz.

-no digas eso, nada puede ser lo suficientemente malo como para querer morir, NADA, la vida es lo más hermoso que dios nos da- ¬¬ si claro, eso dice él porque no vive lo que yo.

-tu vida será bella, porque la mía es una mier*da, mi madre no me quiere, se avergüenza de mí, porque soy gorda y fea, y liam…el se burló de mí todo este tiempo, él y danielle son novios a mis espaldas, me dijiste que confiara, pero soy muy ton*ta, e ingenua y…- el doctor tapó mi boca.

-deja de menospreciarte, la mente es muy poderosa, y si te repites lo mismo una y otra vez terminaras por creértelo, tú no eres gorda ni fea, tampoco eres ton*ta, y tu madre no se avergüenza de ti…-

-claro que no lo hago, yo siempre te he amado mi niña- gire mi rostro, en la puerta estaba mi mamá llorando, traía la misma ropa de ayer y se veía cansada, con los ojos muy hinchados, papá estaba detrás de ella.

-vete…no quiero volver a verte nunca- le dije pero no me salía la voz, al parecer me había desgarrado la garganta, seguía sintiéndome débil porque no había comido nada desde ayer en la noche.

-escúchame hija, por favor- comencé a llorar de nuevo, como si las lagrimas nunca se fueran a acabar.

-¿puedo sentarme?- dijo señalando el suelo a mi lado, yo asentí sin mirarla, ella se sentó con sumo cuidado, escuché sus sollozos, el dolor en mi pecho se acrecentó.

-seis de diciembre, nació la persona más hermosa del mundo, jamás había visto una bebita tan bonita, era tan pequeñita, recuerdo que si le cantaba “isn’t she lovely” dejaba de llorar, después creció, y yo solo quería que fuera feliz, que los chicos la aceptaran, que no sufriera lo que yo en la escuela, y en mi intento de protegerla, yo misma le hice daño…perdóname, por no ser una buena madre- sollocé tan fuerte que yo misma me sorprendí, abracé a mi mamá, ¿Por qué por más que queremos odiar a una persona que queremos no podemos?

-mami… yo no quería ir a parís, ni que me compraras ropa cara, ni un auto ni  ser flaca ni nada, solo quería que me abrazaras y me dijeras te quiero, quería que me creyeras a mí y no a Carla- ella me abrazó más fuerte.

-jessica me dijo como te trataban cuando eran niñas, y escuché lo que Carla te dijo en el pasillo, luego Paul me dijo que era mejor que hubieras desaparecido de nuestras vidas, ¿Por qué no te escuché?, ¿Cómo no me di cuenta antes?- así que ella ya sabía todo, por fin mi mamá se había dado cuenta de con quienes habíamos estado viviendo todo este tiempo.

-eso ya no importa, lo que importa ahora es que ya lo sabes- dije tomándole el rostro.

-lo dejé… un hombre que no quiere a mi hija no puede ser mi esposo- ¿esto es real?, por dios, algo o alguien al fin le había iluminado a mi mamá la cabeza, creo que dejar a ese cretino había sido lo más inteligente que pudo haber hecho en toda su vida.

-pero…¿Cómo…-

-yo también estaba harta de él, claramente esta que no me ama ni un poco, y un hombre que trata mal a mi hija y no la quiere, no merece formar parte de mi vida- todo esto que estaba escuchando parecía de locos, estuve los últimos cinco años de mi vida esperando a que mi madre abriera los ojos, hoy todo era como un milagro.

-me alegro por ti…aunque sé que de todos modos lo querías- ella me regalo una pequeña sonrisa.

-sobreviviré, solo quiero estar contigo ahora, que me perdones, quiero recuperar a mi preciosa pequeña- ella estaba dejando todo por mí, mi mamá me ama, muy en el fondo siempre lo supe, le di un fuerte abrazo que ella me correspondió enseguida.

-cielo santo, mírate la mano, cariño, hay que llevarte a un hospital, tienes también algunas cortadas en la cara- supongo que porque le pegue a una mesa de vidrio con mi puño y además me aruñe la cara a mi misma a propósito.

-estoy bien…solo quiero que  me abraces, y me lleves lejos de aquí- mamá y papá me miraron sorprendidos, supongo que no esperaban que yo quisiera irme de Londres.