8 Meses....Una Apuesta

Prólogo

Prólogo.

-Bueno chicos ¿que tenemos planeado para nuestro último año escolar?- preguntó Melinia a la parejita feliz que por desgracia eran sus mejores amigos, aunque en realidad los quería como si fueran sus hermanos, claro unos hermanos muy cariñosos entré si.

-Necesitamos que este años sea inolvidable, tengamos historias que cuando seamos viejos le contemos a nuestros nietos- respondió Zack con emoción.

-Tengo una idea- soltó Astrid chillando lo que causó que las personas cercanas a ellos los miraran debido al escandalo.
Melinia se encogió en su lugar con un poco de vergüenza debido a las miradas que se llevaron por culpa de su mejor amiga.

-Astrid no chilles llamas mucho la atención- la regañó Mels a lo que Astrid se encogió de hombros y le resto importancia retomando su camino como si nada hubiese pasado.
Justo cuando Astrid iba a empezar a hablar Melinia que iba detrás de ellos chocó con alguien perdiendo el equilibrio pero antes de caer fue atrapada por su cintura.
Levantó la mirada y se encontró con un rostro muy familiar.

-Podrías soltarme, imbecil- dijo disgustada Mels.

Y como no, si era West Carter un prostíbulo andante, guapo pero con el ego más grande que él, y una de las unicas tres personas que más odiaba Melinia.

-Pequeña bruja siempre tan educada- dijo con sarcasmos el chico que rodando los ojos la volvió a acomodar- te acabo de salvar y así me agradeces- dijo con un tono egocéntrico.

-ah bueno y como quiere que le agradezca su alteza- exclamó la chica con sarcasmo.

-Un beso no estaría mal- dijo pícaro mientras la tomaba de la cintura.
Melinia se separó rápido de él haciendo una mueca.

-Ni en tus mejores sueños West- dijo poniendo una distancia entre ellos.

-No. En ellos tu estas desnuda en mi cama - y con eso logró cabrearla al máximo.

-Cerdo Idiota- gritó furiosa mientra se alejaba de él mostrándole su dedo medio con orgullo.

Llegó con sus amigo todavía algo enojada pero dispuesta a reclamarles por dejarla sola sin acordarse de ella.

-Melinia ya se que podemos hacer para un último año inolvidable- comenzó a decir Astrid logrando borrar los anteriores pensamientos de su amiga y dejandola con curiosidad- es más para ti...bueno sabes mientras estabas con West me vino una gran idea y se la comenté a Zack y dijo que era genial así tu tendrías que contarles algún día a tus nietos....digo si es que tienes.....no digo que no puedas.....talvez no te llegue el chico indicado.....no es que piense que no te llegara o que eres fea...no..no...no, no pienso que eres fea eres hermosa...solo que no crees en enamorarte y eso desalienta.....no digo que tu...

-Al punto..- le cortó Mels a su amiga ya que se desesperaba cuando Astrid comenzaba a balbucear.

-¿Qué tal un juego?-dijo por fin Astrid.

-¿Juego como a que?- preguntó Melinia.

-Como citas virtuales-dijo Zack simple encogiéndose de hombros, pero Mels seguía sin comprender.

-El juego es simple tu tendrás que hablar con diez chicos anónimos si uno te enamora pierdes, pero si ninguno lo logra en el transcurso de ocho meses ganas-le explico más claro Zack.

-¿Y que gano?-curioseo Mels.

-Te compraremos los libros que quieras durante un mes- Mels sonrió al escuchar su premio - pero si pierdes tendrás que vestir durante una semana como ...zorra- y con eso su sonrisa se borro- Y, ¿aceptas?

¿Que podría salir mal?. pensó ella después de todo ella no se enamora.

-acepto- respondió con una sonrisa.

-Entonces que comience el juego y que la suerte este siempre de tu lado- dramatizó Astrid con eso llevándose carcajadas de sus amigos por su comentario.

Y así comenzaron los problemas para Melinia.

¿qué podría salir mal? Una mejor pregunta habría sido ¿qué no podría salir mal?