Capítulo 19

696 48 6
                                    

F- ¡Basta ya Marcia! Estoy haciendo todo el esfuerzo para no lastimarte más, pero no entiendes, ni yo se como paso.
M- No lo entiendo como pudiste cambiar tanto, hace unos meses me amabas Fernando ese sentimiento aún está, yo lo sé, soy la que te ha apoyado todos estos años, recuerdas todos esos momentos, por favor no me hagas esto.
F- Necesito estar sólo Marcia, vete por favor.
M- Al menos ¿me amaste?

Fernando dio unos pasos hacia ella, Marcia pensó que la besaría, pero en cambio sólo la abrazo fuerte y la volvió a mirar con una mirada sincera.

F- Hubo un tiempo en lo que eras todo para mi, me ayudaste, nuestra relación  era única, la pasábamos bien.
M- Hasta que llegó esa...
F- No, escúchame, yo pensé que te amaba pero sólo teníamos  una rutina de años, yo no cambiaba Marcia te lastime varias veces y aún seguías conmigo, yo no hubiera podido terminar lo nuestro, pero apareció Leticia con ella supe lo que en verdad era amar, con la que podía pasar el resto de mi vida, me di cuenta que yo sólo puedo quererte como una hermana.

Marcia rompió en llanto, alzo su brazo dándole una fuerte cachetada a Fernando.

M- ¡UNA HERMANA! Hasta cuando ibas a parar este juego, te ibas a casar conmigo y aún así tendrías a tu fea amante.
F- No por supuesto que no Marcia. No se, por dios todo se me vino encima.
M- Ya mejor cállate.

Marcia tomó su bolso y se marchó azotando fuerte la puerta principal. Fernando  un poco mareado por el alcohol se sentó en la silla roja de su recamara sin poder dormir los pensamientos lo invadían, aún fuerte por no romper en llanto.

La mañana siguiente, el calor en Acapulco era algo sofocante para Lety además de que su ropa no era la más apropiada, había pasado la noche sin casi dormir, después de darle vueltas y vueltas, no sólo le había contado toda su historia a un extraño sino que ahora ese extraño trabajaría con ella por el resto de las semanas, la situación era simplemente incómoda, pero Aldo era una luz en tanta oscuridad y eso al menos la alegraba un poco. Carolina llamó a su puerta avisándole que irían a desayunar con Aldo.

C- Vaya que calor y con sólo verte Lety me da aún más calor, después del desayuno vamos a comprar ropa adecuada para este clima, no es bueno para ti padecer tal infierno.

Riéndose, jalo a Lety fuera de la recámara.

C- Bien, ayer parecían ya conocerse.
L- ¿Con quién? o ¿qué?
C- Ay no te hagas, Aldo y tu, sus miradas fueron de sorpresa.
L- Emm lo conocí ayer mientas estuve en la playa.
C- Vaya, no te preocupes Aldo es un gran hombre, buen amigo además de un excelente chef, hablando del rey de Roma, allá esta.

Leticia se puso algo nerviosa ni ella entendía porque, sólo pensaba que las hormonas la iban a volver loca. Se acercó a la mesa, algo tímida.

C- Hola Aldo, vaya que puntual.
Al- Siempre, hola Leticia.
L- Hola.
C- Algo tímida.
Al- Si lo sé, pero te agradezco que ayer hayas compartido tu historia conmigo.
C- ¿Le contaste? ¿Qué le hiciste Aldo? Yo tuve que rogarle para que se desahogara conmigo.
L- El andaba de chismoso escuchando demás.

Ambos se rieron, sus miradas se cruzaron, Aldo sólo quedó sonriendo con su mirada intensa.

Al- Yo le dije que me contara para poder ayudarla, al final de todo  sólo sería un extraño que no volvería a ver.
C- Pero mira por azar del destino ahora trabajaremos todos juntos.
L- Si, por eso es algo incómodo para mi.
C- Somos tus amigos, te apoyaremos se que Aldo no diría que no.
Al- Estoy dispuesto ayudarte Leticia a que salgas de todo lo malo que te sucedió, bueno exepto por tu embarazo que eso es una alegría para tu vida claro.
C- ¿Hasta sabes eso?
L- Me escucho decirlo, yo estoy muy feliz por mi bebé, es mi fuerza, pero aún no se como se lo diré a mi familia.
Al- Se que te entenderán.

El desayuno término, Carolina y Leticia se despidieron de Aldo, para ir por el centro en busca de mejores prendas para Lety.

Entraron una tienda algo costosa, para Lety era hermoso lo que veía pero igual sabía que en ella no se verían así, si no todo lo contrario. Carolina tomó un par de prendas un vestido lila y otro blanco algo casual y el otro un poco mas formal, Lety dudo por un instante, además de que el blanco le recordaba mucho al que uso en cuerna vaca y de nuevo sus pensamientos negativos surgieron queriendo llorar, Carolina no entendió porque cambio su semblante pero la abrazo y le dio ánimos para que probase otros estilos sencillos para el tipo de clima.

L- Que pena con usted creo que mejor no llevar nada, no puedo pagar  por ellos.
C- Tranquila Lety tómalo como un regalo
L- No puedo aceptarlo ya hizo mucho por mi...
C- Está bien Lety si así prefieres me los vas pagando con el sueldo, pero la próxima vez si aceptas mis regalos, ya tengo planeado todo lo que voy a comprar a mi pequeño sobrino.
L- O sobrina jijiji

Nota: Disculpen la tardanza :'c es que estos días nada de inspiración, pero espero que les vaya gustando, tengo más ideas para este fic, no olviden darle fav o compartirlo uwu Felices fiestas ♡

FanFic  LFMB  "Mi vida eres tú"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora