Inocente amor (en edición)

Tribunal de salas ordenadas

Y fue ahí cuando justamente sonó la campana para poder salir como chivas locas esperando el fin de semana. Sin embargo ese no seria mi caso.

- hermanita, en verdad perdóname, no sé que me paso, se me olvido por completo, pero llegando a la casa te lo recompensaré, es más si quieres te compro otra tabla (patineta), que de hecho también te la debo, pero por favor no te enojes- dijo Alan muy arrepentido.

-descuida, no pasa nada, y no tienes por que "recompensármelo" *de hecho si* -*callate estúpidamente mente* mejor juntamos dinero para comprar modificar las tablas de freddy, Israel y la tuya.

-hermanita júrame que no estas molesta conmigo- Alan.

-te lo juro.

-____, en verdad lo siento, si quieres mejor Alan se va contigo y nosotros nos vemos mas tarde, o mañana.

-descuida Cassandra, no hay problema, digo, ustedes ya tiene sus planes y no solo por un capricho se los voy a hacer a perder.

-¿juras que todo esta bien? -Alan.

-por décima vez Alan, si, todo esta bien.

-¿tendrá cuidado al irte? Sabes que si alguien se persigue o intenta hacerte algo tu grata a todo pulmón y alguien te debe de ayudar, y si eso no funciona, usas tu gas pimienta.

-si papá Alan.

Después de tanto estar pidiendo perdón y Alan dándome casi una clase de primeros auxilios para poder regresar a casa, al fin, me dejaron salir de la escuela. La verdad es que quería mis m&m ,muero tenía tanta flojera el ir a comprarlos que decidí quedarme con el antojo de mis m&m.
Iba caminando de los más normal, ya me encontraba un poco lejos de la escuela cuando presiento je una persona caminaba cerca de donde estaba, trate de actuar lo más normal ya que a lo mejor yo me ponía toda paranoica tratándose de una ardilla tanque buscaba nueces. Hasta que escucho mi nombre.

-¡______!

Me detuve y voltee atrás para saber de quien se trataba. Y se trataba de la persona que menos me esperaba.

-¿Jos?

-Ah, si, quería alcanzarte, pero caminas muy rápido.

-solo un poco. ¿Sete ofrece algo?

-si, bueno, en realidad no. Pero te vi sola, y eh, bueno... Solo quería platicar contigo, si se podía.

-Claro, pero... Tengo que llegar temprano a casa, si no el paranoico de mi hermano se infanta si tardo un minuto en llegar a casa... Así que tendrá que caminar Canela - dije mientras avanzaba- ¿De qué quieres hablar?- rayos, este hombre si que me pone nerviosa.

-bueno, más que nada sobre ti, digo, tanto tiempo sin vernos, y la otra vez no tuvimos mucha oportunidad para hacerlo. No sé, tus gustos, hobbies, cualquier cosa; ya tu sabe- dijo tratando de imitar a pitbull.

-bueno, pero no se me hace justo.

-esta bien, ¿jugamos a las 25 preguntas?

-¿que no se suponen que eras 10?-dije.

-buenos, el numerito que sea, aunque no creo que pueda saber muchas cosas de ti con tan solo 10 preguntas.

-¿hobbie?-pregunte.

-¿que no se supone que yo te iba a preguntar?-dijo riendo un poco.

-se supone, pero ¿quieres saber cosas de mi?, entonces contesta.

-esta bien, mmm... Patinar y... Ver series. ¿Tu?

-ammm... Comer ensaladas después de 3 horas de haber ido al gym.

-¿enserio?- dijo Jos dudando un poco.

-ja, su hiciera eso, no estuviera toda obesa Jajajaja, no la verdad es que me da flojera hacer ejercicio, así que mi hobbie seria comer, dormir y patinar.

-¿te gusta?-dijo sorprendido.

-¿dormir?, claro, ¿a quien no?

-jajaja, no, bueno si, todos aman dormir- dijo divertido por mi estúpidamente respuesta - me refiero a patinar.

-pues si, Alan me enseño, e hizo que me gustara; a pasar de que mi madre esta en contra de que practique.

-¿porque?

-¿te das cuanta que estamos malgastando nuestras preguntas solo por la primera que te hice?, bueno porque dice que "eso no es de toda una señorita" -dije tratando de imitar la voz de mi mamá- tanto así que hizo a que Alan vendiera mi patineta.

Seguimos hablando sobre nuestros gustos, "fechas importantes", y cosas por el estilo. La verdad es que me la pase muy bien con el, digo, es "el amor de mi vida", como aveces lo denomina mi primo Freddy. Llegamos a mi casa,muero estaba pasando un rato increíble con el que le ofrecí pasar a mi casa.

-¡mamá, llegue, ah, también Jos!- dije muy educadamente al llegar a mi morada, como lo haría toda una dama; noten el sarcasmo.

-creí que era el único en gritar al llegar a mi casa- Jos se rió por mi hermosa entrada triunfal a mi casa.

-¿cuando será el día que no grites?, Jos que gusto en verte, disculpa el desorden; todavía estamos acomodando un poco la casa y ayer unos mocos se apoderaron de la sala y hay un desorden- dijo mi mamá al salir de la cocina para aparecer en la entrada de la casa, donde nos encontramos trabamos Jos y yo.

-puf, esos mocosos, le diré a Freddy e Isra que estaban vetados de la casa por hacer todo un desorden en la sala, serán llevados al tribunal de salas ordenadas, por romper con varias leyes- dije tratando de hacerme la inocente ante el desorden de ayer.

-sabes que no me refiero específicamente a ellos- dijo seria mi mamá - bienvenido a la casa Jos- finalizó mi mamá para desaparecer por las escaleras.

-  gracias señora - le respondió Jos - ¿tribunal de salas ordenadas? -preguntó divertido.