Capítulo 2

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Abrir los ojos y volver a la realidad no era completamente de su agrado, el primer sonido que percibía era el de su despertador sonando para que se levantara y fuera a la Universidad. Seguir la misma rutina de siempre, por lo menos hoy iría con Jonghyun. Quitó las sábanas que lo cubrían y entró al baño para tomar su ducha matutina de todos los días, el agua ayudaba a que el sueño se desvaneciera. Una vez que salió de la ducha y se puso su ropa, salió de su adorada casa y fue directo a la estación del tren, cinco minutos antes de que el vagón pasara, Minho ya estaba en la línea para abordarlo. Subió cuando las puertas se abrieron y a pesar de que había lugares disponibles, él decidió irse parado, no llevaba ningún libro en la mano ni audífonos para escuchar música, prefería dormir despierto en el transcurso. Respirar con calma y tratar de desarrollar más su oído, si se concentraba bien podía escuchar todo lo que quisiera, la plática de las chicas que estaban sentadas tres bancas atrás de él, la señora que regañaba a su hijo por no haber metido su almuerzo a la mochila y alguien poniéndose lápiz labial al mismo tiempo que hacía retumbar sus tacones contra el piso del vagón, una mujer que se dirigía a su trabajo tal vez. El tren se detuvo y las personas empezaron a bajar, Minho espero un momento para salir, odiaba cuando las personas se empujaban, a la distancia logró escuchar esos tacones retumbando en el piso aunque cuando trato ver a la dueña, ésta ya había desaparecido entre la multitud.

Minho acomodo bien su mochila en el hombro y fue directo a la escuela, Jonghyun estaba rodeado de chicas cuando lo encontró, todas y cada una de ellas riendo como estúpidas.

-¡Hey, Minho! ¡No olvides nuestra cita de hoy! Oh, no se preocupen niñas, estaremos jugando videojuegos y viendo películas, tal vez pasemos por alguna de ustedes en la noche.

Todas se emocionaron por una simple mentira. Patéticas.

-En lugar de estar con esa actitud tuya de galán deberías aprovechar tu Universidad -Minho se dirigió a Jonghyun que iba de camino a su clase de Literatura.

-La oportunidad se presenta y no debes de malgastarla, eso también aplica para ti, a ver si un día de estos empiezas a divertirte.

-La diferencia es que yo sé qué oportunidades debería de aprovechar, a diferencia de ti que coges todo sin importar lo que sea. -Minho colgó su mochila en su brazo izquierdo y empezó a caminar a la tienda para comprar las sodas. -Además, ¿Quién dice que no me divierto? Con sólo escucharte decir tantas tonterías es suficiente para mí.

Ambos muchachos empezaron a reír.

-¡Te espero en la salida de mi aula, no llegues tarde que me iré sin ti!

-¿Y perderme toda una noche de estupideces contigo? ¡Ni loco!

Minho caminó hasta el supermercado más cercano a la escuela que estaba a tres cuadras, compró toda la chatarra que creyó sería necesaria para la ocasión. Pagó y guardó las cosas dentro de su mochila, ese día sólo tenía tres materias y llevaba únicamente sus libretas, así que el espacio era lo suficiente como para guardar todo y no tener que estar cargando con ello en la mano. Sus cálculos no habían fallado y el tiempo iba a la perfección, el camino de regreso a la escuela le tomaría simplemente unos quince minutos y llegaría exactamente a las seis en punto, la hora en que terminaba la clase de Jonghyun.

Empezaba a hacer algo de frío y las personas empezaban a entrar a sus casas dejando las calles un tanto solitarias, la poca basura que estaba en la acera era movida por la ligera brisa, Minho se abrochó la gabardina y siguió caminando como si nada.

Todo estaba yendo según lo planeado y esa noche sería tan divertida cómo lo habían sido las anteriores, al dar un paso con el pie izquierdo y de pura casualidad que bajó la mirada, pudo percatarse de que la agujeta de su tenis estaba desamarrada. Un pequeño contratiempo que no significaba nada, cuando se estaba levantando para seguir con el trayecto, sintió el jalón más fuerte de su vida y una patada en la espalda, Minho se estrelló contra el piso, por suerte metió las manos antes de que su rostro terminara impactándose.

Sin salida. - MinKeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora