simplemente nosotros

12.Hawai

Narra Caci:

-todos listos?

Estaba tan emocionada por el viaje, Evan de había estado comportando raro desde su cumple pero me hizo bien cuando entro a mi cuarto para animarme, siempre sabía como ser un gran apoyo

-SI!

Todos empezaron a aplaudir, Emma, Gian y Cati abuan conseguido permiso para viajar con nosotros, lo cual hacía mucho más divertido el viaje. Todos dejaron las vajilas en embarcación y nos empezamos a dirigir a nuestro vuelo

-la llevo señorita?

Gian se había comportado todo tierno, me hice la alagada y le sonreí

-claro que si caballero

Salte a su espalda y me llevo a cocochito hasta que entramos al vuelo, con quien comparti asiento de vuelo; era extraño por que entre más se acercaba Gian más se alejaba Derek y cuando Derek de acercaba Gian desaparecía, no se que les pasaba pero ya me estaba empezando a molestar.

-que le paso a Emma?

Derek y Fran la traían uno de cada brazo y la sentaron en su asiento al las de Cati, quien le abrocho el cinturón, Gian sonrió y le sacó una foto

-le da miedo volar, asi que se tomó unos tranquilizantes pero creo que se le paso mano
-pobre Emma
-por que? Esta tranquila y en su mundo

Rode los ojos y sonreí, me incline un poco hacia la ventana y vi que estaba nublado y empezando a llover

-espero que no llueva arriba, si no voy a tener que tomar una dosis más grande que la que tomó Emma

Gian apretó mi mano

-todo va a estar bien, los aviones están bien equipados

Asenti algo nerviosa, el avión despegó y el clima no mejoró, si no todo lo contrario, había turbulencia, truenos constantemente y la llovia como si fuera una inundación, me había tomado 2 sedantes de Emma y no hacían efecto

-Caci respira, es sólo una tormenta
-cierra la boca Gian

Estaba en mi estado agresivo, cerre los ojos con fuerza

-lo siento Gian, estoy muy nerviosa
-lo entiendo, de verdad no se que hacer para calmarte
-estoy bien

Un trueno paso cerca del avión haciendo que gritara y abrazara mis piernas

-Caci tranquila no va a pasar nada

Gian sacó el apoya brazo que estaba entre nosotros y me abrazo, apoye mi cabeza en su pecho, haciéndome bolita, Gian me abrazo con fuerza cubirnedo la mayor parte de mi torso y cara

-ya tranquila, estoy aquí

Respire ondo varias veces su olor y apreté su remera con la mano

-pronto llegaremos
-faltan como 4 horas
-pero el clima seguro mejorará
-o nos caeremos al mar y seremos el banquete navideño del agua salada y tirburones
-también hay delfines
-y que con eso? No comen carne
-pero ayudan a los humanos
-bien punto

Gian acarició mi cabeza y luego apoyo su mentón en ella

-estas temblando
-es por el miedo
-segura?

Asenti, Gian me tapo con la manta que te dan en el avión

-estar cubierta con una manta ayuda a relajarse, por que no vemos una peli? Va a ser bueno te pones los auriculares y te olvidas de todo
-no creo que sea buena idea
-yo creo que si

Suspire rendida, Gian estaba intentando todo y yo sólo ponía trabas

-esta bien, iré a buscar mis auriculares que los tiene Derek
-querés que vaya yo ?
-si me quedo sola me puede dar un infarto

Me saque el cinturón y empecé a caminar por el pasillo, 4 ileras después encontré a Derek dormido junto con Evan

-Derek ... Derek

Moví su brazo pero seguía dormido

-Derek vamos despierta no me estas ayudando

El avión se movió un poco, contuve la respiración y clave nos uñas en el brazo de Derek

-Caci me estas dejando sin circulación

Solté el brazo de Derek y luego lo acaricie para ver si mejoraba en color rojo que le había provocado 

-lo siento de verdad
-que tienes? Estas algo alterada

Derek acomodo mi cabello

-estoy bien sólo necesito mis auriculares
-segura? Es por el clima no? Te aseguro que no pasará nada y si llega a pasar yo te cuido

Me dio mis auriculares y beso mi frente

-todo está bien pequeña

Abracé a Derek por el cuello y besé su mejilla

-te quiero
-y yo a ti

Volví a mi asiento y conecte los auriculares, al parecer el beso y abrazo de Derek ( y los tranquilizantes) me tranquilizaron por que me dormí hasta llegar a Hawai.
Cuando aterrizamos fuimos por nuestras valijas y luego al hotel

-Hola reservación para 8 a nombre de Salas Francisco
-Hola buenas tardes y Bienvenidos a Hawai, aquí tienen sus llaves y les informo de la fiesta de Navidad que festaja nuestro hotel en la playa
-fiesta? Tenemos que ir si o si será divertidisimo

Emma se había emocionado apenas escucho la palabra fiesta

-nos pondremos monisimas así tendremos muchos chicos para elegir y tomaremos alcohol hasta no dar más, oficialmente será la mejor Navidad

Emma tomo una llave del mostrador y empezó a camianr hacia el ascensor mientras seguía hablando sola

-bueno, Emma ya se adelantó pero hay una habiatacion para cada uno, excepto para Evan y Cati ya que eligieron compartir, el resto tome una llave y vamos así descansamos un poco por que no nos vamos a safar de la fiesta ya que Emma está enterada

Todos nos reímos por el comentario de Fran y sabíamos que tenía razón, asi que tomamos nuestros equipajes y caminamos hacia el ascensor

-Caci subis?

Gian se corrió un poco dentro del ascensor para dejarme un espacio, Derek tomo mi mano entrelazandolas

-no hay espacio, esperaremos el próximo, gracias igual Gian

Derek hablo por mi mientras me rodeaba por la cinura y besaba mi mejilla, la cara de Gian se transformó y antes que pudiera decir algo las puertas se cerraron

-por que pelean tanto ?
-no se de que hablas
-si claro como no

Rode los ojos

-lo digo en serio Caci
-siempre se están provocando y no se por que, cuando uno de acerca a mi él otro se va y es bastante incómodo
-lo siento no sabía que te molestaba
-pues si, la verdad es que ya me está molestando
-no lo are más lo prometo

Me sonrió, era imposible no seder a esa sonrisa

-esta bien sólo olvidemoslo
-okey, ya sabes que te vas a poner?
-traje varios vestidos, liego veré cual uso

Derek asintió, tiro de mi mano para meterme al ascensor junto con nuestros bolsos

-vos ? Como te vestiras?
-igual de sexy que siempre

Me reí por su comentario, igual de egocentrico que siempre

-pero tranquila Caci sólo tengo ojos para ti
-es bueno saber eso

Abracé su brazo y apoye mi mentón en su codo mientras le sonreía y por supuesto nuestras manos nunca se soltaron, nisiquiera cuando salimos del ascensor.