Especial: Cumpleaños Takano-san

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N/a: Hola mis bellos lectores, perdonen la tardanza, me desperte tarde y no tuve que viajar además de que tenia otro fic que actualizar. Espero que se le hayan pasado bien y que hayan tenido una Feliz Navidad. Un abrazo y mis mejores deseos. Feliz cumpleaños a Takano-san :3 disfruten del capitulo aunque siento que me falto mucha emoción además de que hice un salto temporal, se daran cuenta mientras lo leen. Sin más, los quiero ♡ Gracias a esas personitas que leen mi fic, me hacen feliz.




Faltaban tan solo dos dias para la vispera de navidad y todos los de Marukawa se encontraban bajo una gran presión. Las fechas de entrega fueron adelantadas como se hace normalmente en cada año. El departamente de Emerald transmitía un aura de estrés, Hattori cargaba con unas ojeras mas grandes de la usuales, el mal humor de Kisa empeoraba, Mino se le veia más cansado al punto de pensar que se moriría en esos momentos. 

- ¡Ahh!  Maldiga sea, ¡¿Donde rayos esta Onodera?! Hace mas de hora y media que fue por los manuscritos y no llega - Takano lucia más pálido, a través de sus lentes se podian observar sus ojeras.

- ¡Disculpen la tardanza! -

- Al fin Ricchan...-

No querian perder mas tiempo asi que comenzaron a trabajar lo más rápido posible.

5 horas despues...

- ¡Lo conseguismos! - gritaron al unisono.

Ni ellos mismos sabia como lograron acabar en 5 horas o si fue obra de algun pacto satanico, lo importante fue que lograron concluir su trabajo. Al cabo de unos cuantos minutos empezaron a recoger sus cosas excepto una persona, Takano, seguia en su si silla mirando en algun punto en especial, como.si quisiese que alguien entrara por ahi. Onodera se percato de ello, tenia tantas dudas por saber a quien esperaba o porque seguia ahi pero tambien queria irse, tenia programada una cita con Usagi.

¿Que es lo que debo hacer?...

- Mmm Takano-san, ¿No tiene planes para hoy? - por mas que quizo ocultar el nerviosismo en su voz, no lo logró.

-Nada importante, saldre a cenar con un amigo, es todo- dijo en tono desinteresado

- ¿Saldras con Yokozawa? - se acercl a él.

- No - recogió sus cosas y se retiro, dejando a un Onodera lleno de duda.

Onodera quedo cabizbajo, se sentía un tonto pero no podia hacer nada para remediarlo o por lo menos eso pensaba.

Misaki estaba cenando con Usagi-san despues de haber tenido unas rondas de sexo, estaba al tanto de la hora ya que saldría un rato con Takano, hace tiempo que habia iniciado esta relacion de amantes con el. Un sentimiento de culpa se adueñaba de él pero con el hecho de pensar que Usagi-san le hacia lo mismo, lo motivaba a seguir con ello.

- Usagi-san, voy a salir un rato con mis amigos -

-Mmm - lo miro con su cigarro en su boca -no llegues tarde.

- Si esta bien - levanto su plato y se dispuso a irse.

Takano-san estaba en el lugae acordado, llevaba una media hora ahí pero era lo menos importante. Busco un cigarillo en su bolsillo para matar el tiempo y olvidarse de aquella pequeña escena. Estaba demasiado confundido. ¿Acaso Onodera ya no lo quería? Hace meses, 4 para ser exactos que habia descubierto con quien salia Onodera y porque lo evitaba. Ese día tomo como nunca, se encerro en su departamento mientras lloraba y lamentaba. Amaba y sigue amando Onodera pero eso le partió el corazón, dos veces ñe han roto el corazón y por la misma persona. Su cigarillo se consumió más rápido de lo que esperaba, di un suspiro largo y miro al cielo.

- Onodera - su pecho se oprimió. Queria estar con él, volver a sentir sus labios, ver sus ataques de celos, sus sonrojos, extrañaba todo él.

- Takano-san -

Volteo rapidamente esperando ver a Onodera pero a quien vio era alguien completamente distinto, tal vez tenian un parecido en el color de sus ojos y su cabello pero en lo demás, no sentía lo mismo que estando con Onodera.

- Misaki, ¿Como estas? - pregunto sin más. ¿Como habian llegado a esto?

- Bien, ¿Y tú?, ah cierto - comenzó a ahitar sus manod con una gran rapidez - perdón por la tardanza, estaba un poco ocupado.

- ¿Problemas con Akihiko? - se volteo a ver a otro lado.

- No en realidad -

- Ummm, oye... - tomó aire y se acercó a él - solo por hoy, quisiera platicar en este lugar, no tengo demasiados animos para eso.

- ¿Eh? Ah si, no hay problema-  dijo un tanto confundido.

Fue una hora lo que estuvieron platicando y como acordaron, solo platicaron y no hicieron nada más. El primero en irse fue Misaki, no queria preocupar a Usagi-san. Mientras Takano se quedo ahí pensando en lo que habia pasado y lo que platicaron los dos. Busco otro cigarillo en su bolsillo pero hallo ninguno, suspiro de nuevo, hace tiempo que perdió la cuenta de los suspiros que llevaba.

- Onodera - repetia una y otra vez.

- ¿Por qué? ¿Por que me haces esto? -

Se quedo ahi por una hora más, repitiendo lo mismo una y otra vez. Camino hasta su departamento pero eso le tomo otra hora. Llego a su destino, oprimió con dificultad el botón del ascensor, sus sentimientos estaban a punto se estallar. Queria llegar lo más rápido posible a su departamento y dormir un rato, necesitaba despejarse de todo. La puerta del elevadlr se abrió, alzo su vista y se encontro con él.

- Oye, deja de tocar con insistencia el timbre - fingió estar enojado.

- Ah, Takano-san, p-perdón - bajo su cabeza - queria darte algo.

- Mmm, ¿A mí? Al fin admitiras que me amas - sonrió con burla aunque en su interior esperaba eso.

- ¡Eh! No, es otra cosa -

- Esta bien y deja de mirar al piso, das lástima - paso a su lado tocando el cabello.

-¡Takano-san! -

Ingresaron al departamento e hicieron la misma rutina de siempre. Ya dentro, se quito su chaqueta y busco en el refrigerador una bebida. Miraba atentamente a los movimientos de Onodera, moría de curiosidad aunque no lo notora.

- Eh, yo, Takano-san queria decirte... - se puso cabizbajo de nuevo.

- Arg, habla de una vez - bebió un gran sorbo de su bebida.

- Feliz cumpleaños Takano-san - levanto un pastel en su dirección, tenía una foto de Takano en medio y las velas estaban en la parte superior de la foto.

- Se que hace falta todavía un día para eso pero quería ser el primero y como no estaré, decidí dartelo hoy -

No hubo la necesidad de palabras, corrió a abrazarlo. Se sentía tan feliz que su corazón guardo un poco de esperanza. Esos pequeños detalles le hacian seguir adelante por él.

- Mm Takano-san, esta asfixiandome... -

- Gracias Ritsu - lo miro se frente y lo besó.

Sus labios comenzaron a moverse coordinadamente. La sensación de volver a unir sus labios era única. Poco a poco el beso se fue intesificando hasta llegar a las caricias. El pastel quedó en el olvido, lo unico que importaba en ese momento era la conexión que sentía entre ellos, los besos que compartian, los sentimientos que creían desaparecidos, el amor entre ellos.

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⏰ Última actualización: Dec 26, 2016 ⏰

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