Epílogo

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Maratón (12/12)

Carta de Joaquín a Caro

Hola, Caro donde quiera que estés, te escribo esto para contarte todo lo que ha pasado en tu ausencia, para que estés enterada.

Cuando te fuiste de este mundo, yo estaba mal. Sentía que los días pasaban tan lentamente que pensé que eran eternos, quería que este dolor en mi corazón se acabara de una vez por todas.

Cuando era pequeño, mi mamá me leía cuentos de princesas y príncipes que terminaban felices. Siempre era así: "Vivieron felices para siempre".

Un gran engaño. Una mierda.

Cuando falleciste, yo estuve en mi habitación por meses.

Bueno... sólo 3 meses.

No salía, no hablaba con nadie. Estaba mal... o eso decían algunos. En el colegio era igual, bajé en las calificaciones, me iba muy mal. Pero sólo extrañaba al amor de mi vida.

Cuando me gradué estaba feliz por enorgullecer a mi familia, pero también triste por no estar contigo.
Pero no todo fue malo.

Estuve soñando con vos, no hablabas conmigo, sólo sonreías. Te veías hermosa. A pesar de no escucharte sabía que estabas allí, conmigo.

Al poco tiempo, conocí a alguien.
"Valentina" era su nombre. No era igual que vos, más bien era totalmente lo contrario, pero era genial estar con ella.

A Valentina, no le gustaban los chocolates. No le gustaba el color negro, era morena, cabello castaño oscuro y ojos color miel, grandes y bellos.

Cuando la conocí, pasé todo el tiempo comparándola contigo. Que Caro esto, que Caro lo otro. Que le gustaba esto, pero a ella no le gustaba lo otro.

Valentina me dijo que era irritante que estuviera hablando de ti todo el tiempo. Tenía razón.

A los 2 años de conocernos con Valen le pedí ser mi novia. Estudiábamos juntos en la universidad.

Todos los días iba al apartamento de Valen, porque vivía sola. La pasábamos súper bien, pero los viernes eran la excepción, después de la facultad iba al cementerio donde el cuerpo de mi mejor amiga se encontraba sin vida.

No le había contado a Valen sobre ti, hasta que una vez fui como siempre al cementerio. Como todos los viernes hago, le avisé a Valen que iría a hacer un mandado y ella me preguntaba "¿quieres que te acompañe?" A lo que yo le respondía siempre: "No gracias, voy solo."

En uno de esos viernes donde la pasaba bien hablándote a ti, contándote como estaba, lo que sentía, cuanto te extrañaba entre otras cosas más, Valen me siguió, no me había dado cuenta de que ella estaba detrás de mí todo el tiempo.

Cuando comencé a llorar por vos, Valen me abrazó y me dijo: "¿te encuentras bien, cariño? ¿Qué te pasa?". Yo no estaba bien, era la persona más rara del mundo, hablándote a ti sabiendo que no me escuchabas. Nos fuimos del cementerio y Valen me llevó a casa. Subí a mi habitación y vi a la pequeña Lara en mi cama, le dije que se fuera y rápidamente se bajó. Amaba a esa pequeña niña.

Tomé la carta que dejaste aquella vez debajo de tu almohada... cuanto te extrañaba.

No podía dejar de repetir lo último que dijiste: "Te amo, Joaquín Ochoa", al parecer eso me destrozaba. Leía y leía la carta, donde decía que fuera feliz, que conociera personas... no podía, no podía hacerle esto al amor de mi vida.

Tenía que dejar a Valen.

Pero...

Al final no lo hice. Soy un indeciso.

Valen es una gran persona, es genial. Y creo que la amo, no tanto como te amo a ti, pero la amo. Ha estado ahí siempre. Va conmigo al cementerio, me abraza. Habla contigo también. Y siento que estás feliz por mí, no has venido a jalarme los pies.

A los 5 años de noviazgo que tenía con Valen, le pedí que se casara conmigo. Quiero confesar que no tuve relaciones con ella fuera del matrimonio, porque al parecer es muy católica y eso es bueno.

Nos casamos un 8 Junio, invitamos a nuestros amigos y familiares. A los 2 meses de casados lo hicimos, fue genial, pero no quiero decirte como pasó todo.

Cuando me enteré que iba a ser papá me dio miedo, sentí terror. ¿Será que podría ser un buen padre? Me hacia esa pregunta siempre.

Un 27 de mayo nació nuestra pequeña hija. Valen me dijo que escogiera un nombre. Nuestra hija fue llamada: "Andrea Carolina". Es hermosa, cabello castaño claro, ojos verdes igual que los míos, pero más intensos.

Parece una gatita, dije cuando la veía jugar con su amiguito llamado Santiago.

Era hermosa.

Creo que al final, si voy a vivir feliz para siempre al lado de mi esposa y mi pequeña hija Carolina.

Te agradezco por tu cariño y amor, me enseñaste muchas cosas. Te amo.

PD: No me extrañes tanto, wey.

Tuyo siempre ☺
-Joaquín ♥


Gracias por los votos, comentarios y por añadirlo a tu lista ♥ 

TE LO AGRADEZCO MUCHOOOOO :v

Se que esto no lo van a leer pero que más da. Escribí una pequeña historia, pero no es Jarolina. La pueden encontrar en mi ¿muro? En fin... Les agradecería mucho si la leen. Gracias.

Hey! ¿Me regalas un chocolate?   -Joaquín ❤ || JAROLINA || TERMINADA || Donde viven las historias. Descúbrelo ahora