Reconquistarte (Percival Graves y tu) 2a. Temporada

Competencia

Aclaración: El capítulo comienza después del prólogo de Mi Jefe.
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- ¿Qué demonios haces tu aquí?-respondo incrédulo, esto no puede ser.

- Vaya, no me ves en dos meses y así me recibes.-responde sarcástico mientras me regala una sonrisa burlona. Camino hasta el y le suelto una cachetada. Frunce el ceño y me toma del brazo, trato de forcejear con él pero su fuerza es mayor.- No armes un escándalo aquí, no hablaría bien de ti, vamos a tu oficina.-susurra en mi oído, admito que tiene razón, no quiero que las personas me vean matarlo, porque juro que es lo que quiero hacer, lo guio hasta mi oficina, con Atala siguiendonos el paso sin saber que pasa, al entrar le pido a Atala que nos deje a solas y lo hace.

Graves sin verguenza camina hasta mi escritorio y se sienta en mi silla despreocupadamente.

- ¡¿Qué haces aquí?!-vuelvo a preguntar furiosa.

- Ya sabes, nuestro querido amigo Grindelwald es un verdadero dolor de cabeza-responde con el ceño fruncido.

- Igual que tu-respondo entre dientes.

- Oh vamos amor, no actues como niña malcriada.

- No soy una niña malcriada y deja de llamarme amor.-digo de forma amenazante, Graves simplemente sonríe con burla.- De todas formas no tienes nada que hacer aquí, cualquier asunto relacionado con Grindelwald lo discutiremos en la sala de reuniones con los demás, asi que ahora largate de mi oficina.-aclaro corriendolo de mi oficina, Percival esta por decir algo cuando Atala entra.

- Amm señorita Mondragón disculpe que la interrumpa pero el señor Escárcega esta aquí.-informa apenada. Sin duda alguna hoy no es mi día, los dos se juntaron aquí, Percival y Alejandro, ¿ahora que hago?, pues enfrentarlo, ya que.- ¿lo dejo pasar?

- ¡No!.-respondo inmediatamente, Alejandro sabe lo que paso entre Percival y yo y si lo ve, no quiero saber lo que pasaria.- Dile que ahora salgo.

- Como ordene.-responde antes de salir.

- ¿Quién es el?.-pregunta Percival serio.

- Nadie importante.-trato de restarle importancia para no causar su curiosidad, pero al parecer no lo logro.

- ¿Enserio? Bueno entonces salgamos, quiero conocerlo.-dice firme antes de salir.

- ¡Percival espera!- trato de detenerlo pero es tarde. Sale y camina hasta Alejandro que lo mira confundido.

- ¿Usted es el señor Escárcega?.-pregunta Graves con tono amenazante.

- Si, yo soy.-responde Alejandro nervioso bajo el escrutinio de Percival.

- Percival Graves.-dice este ofreciendole la mano en saludo. Alejandro habre mucho los ojos pero dura solo un segundo antes de ponerse serio y estrecharle la mano.

- ¿Usted es Percival Graves?-pregunta.

- Asi es, ¿_________ le ha hablado de mí?.-pregunta Percival burlón, esto terminará mal.

- Un poco

- ¿Y usted...trabaja aquí?-pregunta Graves como un cazador que acecha a su presa, lo sabe o al menos sospecha sobre nuestra relación.

- Eh..no yo..solo vengo por mi novia para ir a comer.-responde nervioso Alejandro.

- ¿Usted es novio de Atala?-pregunta Percival cada vez más enojado.

- No, __________ es mi novia.-responde con la cabeza agachada, tratando de escapar de la mirada de él.

- ¿De verdad? Pues mis condolencias señor Escárcega, esta mujer es un verdadero dolor en el..-dice Graves pero lo interrumpo.

- Percival basta-trato de decir lo más tranquila que puedo, aunque en realidad estoy a poco de soltarle otra cachetada a Graves, este me mira con la sonrisa del gato de Alicia.- Alejandro tengo mucho trabajo, tal vez mañana.-me excuso con él, se que lo entiende.

- Esta bién, no te preocupes, lo entiendo. Nos vemos mi amor.-dice y se acerca a darme un largo beso en los labios, trata de "marcar su territorio" igual que Graves.

Una vez que se ha ido, me encierro en mi oficina pero Percival haciendo gala de sus buenos modales entra.

- Vaya, al menos te hubieras conseguido uno que no se orine en los pantalones ante mi presencia. El pobre chico parecía un animal asustado.- se burla.

- ¿Enserio? ¿Y que hay de tí? ¿Con qué derecho vienes a intimidar a mi novio?-pregunto acercandome a Graves amenazante, pero el se acerca más y en un movimiento rápido me toma de la cintura.

- Solo quería ver la competencia, y admito que estoy decepcionado, a ese niño no mágico lo tumbo de un empujón.-dice riendose en mi cara, trato de soltarme pero me pega más a él.- Y lo hago con el derecho de que tu eres mía.-dice antes de besarme, al principio me rehuso pero el contacto con sus labios me nubla los pensamientos y nos besamos apasionadamente. Se siente tan bien.

Al separarnos veo Percival con una sonrisa triunfante, soy una tonta, caí en su juego. Vine aquí para olvidarlo y el repentinamente viene y me besa y vuelvo a caer, me dan ganas de abofetearme a mí misma por estupida.

- Ves, eso esta mejor.- dice antes de salir.

- ¿A donde vas?.-pregunto con la respiración aún acelerada por el beso.

- Lo siento amor, quedé de reunirme con el Ministro y ya voy tarde- dice y se va. Si, sin duda soy una idiota, que alguien me golpee.