Las lemonísticas adventuritas de Fem Argentina-hetalia

Estados Unidos x Argentina

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A casi todo el mundo le gusta la fiesta, hay diferentes tipos de fiestas y Estados Unidos hace de esas a la que está invitado hasta el perro de la vecina que nadie quiere, son grandes y llenas de música y diversión, a esa mayoría de gente no le gustaría perderse una fiesta así.

Aunque odien al anfitrión...

Estados Unidos pareciera que nunca va a aprender que hay personas que no son villanos a las que simplemente no les cae bien "el héroe". Bueno, hasta lo odian, pero a veces no puede darse cuenta, por mas evidente que sea, por tantas veces que se lo digan él no va a estar escuchando, simplemente va a seguir feliz su vida pensando que en algún punto todos son sus amigos. Por eso se presenta de esta forma en casa de uno de los 10 países mas "antiamericanos" que existe.

-ARGIE!!!!- Alfred gritaba desde la entrada de la casa de Argentina, tirando piedras contra la ventana de su habitación- GET UP LADY!!!

En eso agarra una piedra algo mas grande que las demás y accidentalmente rompe la ventana.

-LA CONCHA DE TU HERMANA HIJO DE LA LIBERTAD!!- se escuchó el grito desde la habitación, al rato Argentina había bajado hasta la entrada en bombacha, desprolija, con un tajo sangrando por el vidrio roto sobre la frente y con el perro encadenado de la correa ladrando como loco- QUE NO SABES QUE ME DESPIERTO 3 HORAS DESPUÉS QUE VOS??!! HIJO DE PUTA INTERRUMPISTE MI SUEÑO DE BELLEZA!!

-CALM DOWN!!OKEY IM SORRY- exclamó él alejándose asustado, ella suspiró tratando de calmarse y le afiló la mirada.

-A que viniste?- preguntó ella soltando al perro, que para suerte del yankee volvió tranquilo a la casa.

-A invitarte personalmente a una fiesta en casa!!- dijo él acercándole una invitación- seguro que no quieres una vendita?

-lo que necesito son 3 puntos pelotudo- dijo ella alzando las cejas, abrió la invitación llena de colores, con decoración excesiva y con palabras en varias fuentes diferentes- te falto ponerle música- dijo sarcástica.

-Si tiene, si tiras de esa pestañita de abajo- dijo señalando la tarjeta- la próxima vez podría hacer que brille en la oscuridad

-sos un idiota- dijo Argentina caminando de nuevo a su casa.

-Ni un beso de despedida?- preguntó él viéndola irse.

-Ah sí, acá lo tengo- dijo ella sacando una mano haciendo "fuck you" de su espalda. Cerró con un portazo y tiró la invitación a la basura.

Una semana después...

Martina estaba llevando papeleo de la oficina para el ministro de relaciones exteriores, estaba apurada porque si terminaba con esto iba a tener el resto de la semana libre. Cuando estuvo a punto de llegar le sonó el celular, chasqueo la lengua y entregó los papeles al ministro, atendió lo mas rápido que pudo.

-Hola?- dijo un poco irritada.

-HELLO, IT'S ME, THE HERO- se escuchó del otro lado la insoportable voz, lo que la irritó aún mas.

-Por qué mierda gritas cada vez que te atiendo?- preguntó ella masajeandose la frente.

-Oh, es que pensé que no se escucharía bien porque estas muy abajo...hahahahaha *munch munch* nom, ñom, yummi

-Estas comiendo mientras me llamas?- dijo ella dirigiéndose a su auto.

-Si, un poco- dijo él masticando, también se escuchó el ruido del vaso de gaseosa con la bombilla siendo aspirada, ella alejó un poco el oído del teléfono y se subió al auto.