Un viaje de amigos

1.Holanda o Alemania

En el ámbito de comunicación: Chelsea Denver, especializada en periodismo.

Podía observar a mis papas a lo lejos, en la quinta fila aplaudiendo y sonriendo de felicidad; al igual que Jaden y Ashley, que estaban al frente mío.

Mientras iba bajando las escaleras, podía escuchar la voz de Aarón felicitándome y diciendo que estaba orgulloso de mí, pero luego volví al mundo real y me di cuenta que solamente estaba lo estaba imaginando, él ya no estaba y jamás iba a volver.

El reloj marcó las 12:01 p.m. cuando ya teníamos nuestros títulos y estábamos oficialmente graduados de la Universidad Estatal de Washington; los tres ya éramos licenciados; Jaden en publicidad, Ashley en producción audiovisual y yo en periodismo. Por fin lo logramos y era momento de celebrar haciendo lo que siempre quisimos hacer, viajar juntos. Mis padres no podían contener su emoción, que incluso se pasaron tomándome fotos.

-Felicidades cariño, estamos muy orgullosos de ti.

-Gracias papá.

Me fui directamente para donde Jaden y Ashley, tanto para abrazarlos, como para felicitarlos.

Permanecimos alrededor de 2 horas más en la universidad después de la graduación para despedirnos de nuestros compañeros y de los profesores, ya que no sabíamos si los íbamos a volver a ver. Luego me fui para la casa con mis papas, me bañe y me aliste, porque en cualquier momento llegarían Ashley y Jaden por mí.

Estaba haciéndome lo último y viendo que no me faltara nada, cuando escuche un pito y unas voces.

-Vamos Chelsea- me asome por la ventana y les indique que ya iba.

Baje las escaleras y fui directamente para donde mi madre.

-Mamá, saldré a cenar con Ashley y Jaden, vendremos más tarde.

-Está bien, ellos se quedaran a dormir o vienen mañana en la mañana?

-Se van a quedar, nos vemos mamá-le dije mientras le daba un beso en la mejilla-te quiero.

Ahí estaban ellos, Jaden con su convertible en el lado del piloto y Ashley de copiloto. Jalé la puerta detrás de mí y camine rápido para que las regaderas no me mojaran.

-Chels, pero que linda te ves.

-Gracias amiga ustedes también están muy guapos- subí al auto y nos fuimos.

El restaurante se llamaba Sonoma Restaurant y estaba en Pennsylvania Avenue. Ya íbamos preparados psicológicamente en el sentido de que los precios eran un poco elevados, sin embargo no lo habían recomendado y debido a la ocasión podíamos darnos ese gusto.

Al entrar nos atendió una señorita que vestía muy elegante con su camisa de manga larga y una enagua llegando a las rodillas.

-Buenas noches y bienvenidos, para cuantas personas sería la mesa? - pregunto de una manera formal y delicada.

-Nosotros tres solamente- indico Jaden.

-Con gusto, síganme por aquí.

Mientras íbamos caminando, veíamos a las parejas, ya los grupos de amigos con sus vestimentas elegantes. Al lado de la mesa había una dama, de pie, recta y con una toalla sobre su brazo.

-Jóvenes, su mesa está servida y Carmen será su mesera por esta noche – nos dijo mostrando una sonrisa en su rostro.

Pedimos spaquettis en salsa blanca con camarones y vino blanco para acompañar.