No, es que tu alegría me haga infeliz,
es sólo la nostalgia que abraza mi mente,
es ver tu sonrisa y saber que no es para mi... como en muchos otros días,
es el frío que cala a través de las prendas de tu recuerdo... de las que jamás me pude desprender,
es el calor que decide no abrazarme a mi,
son las sombras que no me cubren de este sol que quema,
es la apatía por esos suspiros que no existen más,
es la mudanza de un amor que yacía en mi nido y ahora se suspende en otro... distinto,
son las letras y palabras que ya no tienen vuelta,
es la fuente que ya no tiene más deseos,
es el sol que ya no tiene ese brillo,
es el canto de los pájaros que ya no suena a música,
es el río de tu cuerpo que se esparce sobre otro caudal,
es esa locura que ya no sabe sino a trastorno,
es el despojo de lo que éramos... y ya no somos...