Cap. 30

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Próximo día*

Me había despertado, gracias a la cantidad de luz que había. Escuchaba dos voces (la de Stefan y papá), estaban discutiendo.

-¿Cómo pudiste dejar que ocurriera eso? ¡Debía haber ido a esa fiesta! Podría haber protegido a Kate de ti y de todos los de tu clase. -gritaba papá

-Lo siento, pero Klaus me obligó. ¡Yo nunca lastimaría a Kate!

-¡Ouch! -grité abriendo mis ojos, mientras me alejaba del sol

Me fije que me encontraba en el cuarto de Stefan.

-Ya despertó. -dijo Stefan, acercándose a mí

-Aléjate de mi hija. -le advirtió papá a Stefan

-Papá, está bien. Él no me quizo hacer daño. ¿Podrías salir afuera un momento? Quiero hablar con Stefan, a solas.

-De acuerdo, pero me mantendré alerta por si pasa algo. Me llamas para cualquier cosa. -indicó él, dándome un beso en la frente y luego se fue

-Siento todo eso... -dije sacando un suspiro

-No te preocupes, yo debo ser el que me de-

-Stefan, basta. Tú no hiciste nada, no tienes ninguna razón por la que disculparte. -expliqué sacando una sonrisa

-No se qué haría sin ti. -respondió Stefan con una sonrisa, mientras tomaba mi mano.

-Yo tampoco.

-Entonces, ¿cómo te sientes? -preguntó él

-Me duele mucho la cabeza, ¿y podrías cerrar esa cortina? -pregunté, cerrando mis ojos

Ya que me molestaba la luz que provenía de afuera. Así que eso hizo Stefan, cerró la cortina.

-Mucho mejor... -dije acomodándome otra vez. -Entonces, ¿qué ocurrió, mientras estaba dormida? -pregunté

-Luego de lo que ya sabes, Klaus me dejó llevarte a casa.

-¿Así de fácil? -pregunté sorprendida

-Klaus sólo quería volverme a ver sufrir, más nada. Por lo tanto, si. Me dejó ir fácilmente. Cuando llegué a casa, vi que todos tus amigos estaban ahí. Parece que los hermanos de Klaus, los dejaron aquí. Me imagino que después de todo eso, Klaus volvió a revivir a todos sus hermanos. Ahora mismo, todos tus amigos están durmiendo, excepto tu papá.

-¿Cuánto tiempo llevaba muerta? -pregunté

-10 horas.

-¿10 horas? -grité. -¿Sabes? En mi vida, me imaginé que te haría ese pregunta. "¿Cuánto tiempo llevaba muerta?" ¿Quién dice eso? -seguía gritando, mientras me levantaba de la cama

-Estás en la transición. Tus emociones están al-

-¡No me importa! -grité deteniéndome

Después, me fije de lo que acababa de hacer. Le grité a Stefan, y sólo él me está tratando de ayudar.

-Stefan, yo-yo lo lamen- dije pero luego, comencé a llorar. -¿Por qué estoy llorando? ¿Qué me pasa? ¡Kate, basta! -gritaba, mientras me secaba las lágrimas

Sobrevivir o morirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora