Aunque ese día juro que cedería a las constantes peticiones de su hermana y se prometió a sí misma ir a la habitación de esta a disculparse, simplemente no pudo hacerlo. Era como si unas cadenas la mantuvieran presa en su escritorio, ataduras que solamente la fuerza de voluntad podía romper.
Era más que lógico que muy en su interior en realidad ella no quería hacer nada de lo propuesto, simplemente era el pequeño compromiso que sentía con su hermana menor.
¿Pero qué esta no podría hacer un sacrificio por primera vez en su vida? Ella no tenía que cargar con el peso de todo un reino, no tuvo que pasar por miles de lecciones para aprender a ser una buena gobernante, simplemente vivió a su manera libre.
Libre. La palabra se deslizaba entre sus labios como la seda, una sonrisa melancólica se formó en sus labios, Libertad se escuchaba como una oferta tentadora que cada mañana albergaba su mente. Era tan extraño su concepto de libertad, nunca había vivido en una prisión pero su habitación se volvió como una celda, era la máxima autoridad en Arendell pero aun así no podía hacer exactamente lo que quería. La única vez que realmente se sintió completamente libre fue en aquella ocasión en donde se propuso no volver atrás.
Podía escapar, si que podría. Nada ni nadie tenía la capacidad de detenerla, no había excusa para no hacerlo
El reino cruzó como estrella fugaz en su mente deteniendo su fantasía, el reino se suponía que era su obligación, eso era, esas eran las cadenas que tanto la tenían atada¿verdad?
Yo nunca pedí ser reina
Las responsabilidades cayeron en sus hombros desde el primero momento que había llegado a este mundo. Nadie le había preguntado tan solo una vez lo que ella quería. No importaba lo mucho que se había mentalizado para semejante cargo, simplemente a veces creía que esto de ser Reina no era lo suyo.
Si tan solo ella hubiera sido la segunda en nacer en el matrimonio de sus padres pudo haberse librado del cargo, tan fácilmente como lo hizo Anna.
Pero ella fue la primera en nacer y ella fue coronada y ¿porque estaba pensando en todo esto?
De todas formas, aquí estaba y lo más seguro es que permanecería en el trono por mucho tiempo más.
Tal vez nada haría que ella no fuera reina, pero ella podría evitar ese tonto viaje.
La mayor parte de su vida había estado rodeada de miedos e inseguridades, muchos de sus sueños habían sido matados por estos y desollados de su corazón de la manera más cruel posible,el deseo de viajar se había ido apagando cada vez más y más, que aunque ahora estando completamente libre y más segura de sus poderes, ir a un lugar a donde sabía bien que le tachaban de bruja y sobre todo le temían, no le animaba en lo absoluto.
¿Y si algo salía mal?¿Qué pasaría si por azares del destino ella cometió algún error y sus poderes se manifestaban? Tal vez no causaría otro invierno eterno, pero lo más mínimo podría causar un escándalo o alguna reacción hostil de parte de los ciudadanos.
Pasar semejante riesgo no valía la pena. Su imagen estaba bastante dañada ya.
Pero es tu obligación asistir.
Su consciencia volvió a insistir y con mucho fastidio ella trató de negarse otra vez.
No es ningún asunto crucial y además ya tengo bastante trabajo aquí. Anna podría fácilmente ir ...
Su hermana, era otro problema con el que tenía que lidiar. Aunque su relación iba de maravilla, últimamente el trabajo le había estado absorbiendo y cuando fueron invitadas a una fiesta que se llevaría a cabo en un país que estaba cruzando el océano, el corazón de su hermana se llenó de emoción mientras que el de ella de desánimo. Ya había decidido no asistir y planeado que Anna fuera en su lugar.
Si ese día ella no hubiera salido tan estresada y molesta de la junta que había tenido antes con su corte, tal vez su tono de voz no hubiera sido tan áspero y duro. Si tal vez Anna solo hubiera aceptado sin hacer tantas preguntas todo habría estado bien.
No recordaba a ciencia cierta cuando fue la última vez que había discutido con tanta intensidad con su hermana, probablemente hace unos ¿14 años? y tal vez fue porque Anna tenía una porción más grande de chocolate y eso no le parecía justo. Habían estado enojadas todo el día, pero no soportaron mucho y ambas se habían pedido disculpas en la noche.
Esa fue una discusión absurda y sin embargo, esta también se le hacía absurda. Ella tenía toda la razón, no tenía porque ir a disculparse en nada en lo absoluto. Era Ana la que se comportaba de manera ridícula al hacer un escándalo por todo eso, lo peor de todo, es que se excusaba bajo el lema "Lo mejor para ti". ¿Ella que sabía sobre lo que era "lo mejor"? Si había vivido fuera de responsabilidades y obligaciones, lejos de sacrificios y esfuerzos.
Era momento de que por una vez en su vida pudiera obedecer una orden. Después de todo, a nadie le importo su opinión cuando a ella la separaron del mundo exterior, todos le aseguraron que usar guantes era lo mejor y ella tuvo que aceptar. Todo por lo que pasó fue suficiente sufrimiento ya, se merecía por una vez decidir a ella que era lo mejor, y lo mejor ahora, es que ella se quedara en Arendell.
Ahora, ella no tenía el mínimo sentimiento de pedir perdón (pues no tenía por qué). Anna de seguro lo entendería, se olvidaría de la discusión cuando se encuentre en nuevas tierras y conozca mucho más al mundo. Nada tiene porque terminar en un drama. Le daría los viáticos suficientes para que compre toda la ropa que le guste, todos los zapatos que pueda y todas las golosinas que se le apetezcan.
Se lo agradecerá después, eso es seguro. Por la mañana el día cuando regrese a Arendell, estará tan contenta que le pedirá olvidar todo el tonto lío que tuvieron antes de marcharse.
Por eso, hasta el momento. No iría a la habitación de Anna.
N/A: ¡Si! ¡Finalmente! ! Sé que es corto y les he hecho esperar demasiado, pero necesitaba terminar el capítulo 1 hasta aquí. La siguiente parte será (según yo) más interesante, I promise that's gonna be better!
