¿Proyecto Comunitario?

1.Plan Destruye A Tu Ex.

No hay manera de que me despierte de buen humor un lunes, mucho menos a las 4:50am,pero hoy, hoy es diferente, hoy es el día de mi venganza.

Si realmente crees que puedes utilizarme, hacerme sentir en el cielo y después dejarme caer y no sufrir por eso, lo siento, es un sueño del que debes despertar. J Hollden, es mi ex novio, alto, esbelto, con dulces ojos verdes que pensaron que sería tan ingenua, que apostó a que sería suya— Que por cierto perdió, porque no quise acostarme con el— Ay JJ, eres un imbecil.

No soy conocida por mi buen comportamiento y hoy entenderán porque.

Me vestí con lo que había dejado preparado, camiseta negra, sudadera y unos vaqueros negros.Tome el auto de mama—Tuve que hacer una misión previa para robar las llaves—y me dirigí a casa de J.

Verifique que todas las luces estuvieran apagadas y saque el palo de golf del auto,además de todo lo mencionado anteriormente, J tiene un mercedes,algo no muy común entre los chicos de 18.Abrí el capo y corte los cables de la alarma, golpee el parabrisas hasta que el vidrio estalló,golpee las puertas y cada uno de los vidrios, el techo, y pinche las ruedas, por ultimo, en el capo, la única parte que deje intacta, escribí una llave:

Comprate un par de bolas-M.

Me monte en el auto, y a toda velocidad me dirigí a mi casa, me puse mi cómoda pijama de nuevo,y me acosté a dormir, seguro soñaria con la cara de J al ver su auto, sus lágrimas, que buena noche.

Miranda, miranda, miranda, DESPIERTA.

Me pare de golpe, mi padre me había estado sacudiendo, mi madre estaba en una esquina de la habitación tapándose la cara para que no la vieran llorar, mas de 20 policías rodeaban mi cama, y al fondo escuchaba las sirenas de las patrullas.

Mierda.

—Señorita Jones, usted queda arrestada por destrucción de propiedad privada.

Todo se volvió borroso, el ruido de las sirenas era desesperante, trataba de buscar a mis padres, rogarles que me ayudaran pero no me salían las palabras, alcancé a verlos salir de la habitación mientras dos policías se encargaban de ponerme las esposas.

—¿A donde me llevan? —Las lágrimas se acumulaban en mis ojos—Me están lastimando.

—Pasará la noche en la estación, mañana deberá asistir a juicio y decidirán su condena.

Mi mente daba vueltas, mi vista estaba nublada debido a las lágrimas, pero aun así podía ver la decepción en la mirada de mi padre, no pensé que llegaría tan lejos, pensé que todo quería como una broma pesada

Me metieron en una patrulla y al llegar a la estación me soltaron las esposas y me asignaron una celda.

Junto a mi se encontraban dos personas, una chica de cabello castaño y ojos oscuros y chico alto—Que me mira fijamente—Rubio, con la ropa rota y algunos moretones.

—Porque estas aquí?—La chica se giro, y me miró.

—Destruí el carro de mi ex novio, y tu?

—Tuve una pelea en un bar, y por posesión de armas y sustancias ilegales, es decir, drogas—Se deslizo hasta quedas sentado en el piso, apoyado a las rejas de la celda. —Y tu? —Señalo a la chica.

Por alguna razón no me siento asustada,mis piernas ya no tiemblan, y ya puedo respirar con normalidad, pero no puedo dejar de pensar en el juicio, no consideré que podría ir a la carcel, me da miedo, no se si a estas alturas, mi padre pueda ayudarme.

—Exhibicionismo y prostitución—

—Que edad tienes? —Pensó un rato antes de responder.

—17,y  antes de que piensen mal, mi familia lo necesita, tengo dos hermanos pequeños, no los puedo dejar morir.

—Y cómo harás si te toca ir presa? —

—Es la primera vez, me dejaran salir por fianza, llamare a uno de mis clientes y vendrá a sacarme.

Me apoye por completo en el piso y puse mis brazos atrás de mi cabeza, el piso frío puso mi piel de gallina, traté de relajarme y cerrar mi ojos un rato, de concentrarme en que todo estaría bien

—Que te hizo?—Abrí mis ojos.

—Después de 4meses de relación, me envió un mensaje diciéndome que todo era mentira y que era una maldita porque lo hice perder 200 dolares en una apuesta, ya que no me acosté con el, quizás no llegue a enamorarme por completo, pero lo quería, le confié cosas de mi que nadie sabe, y pensé que él también confiaba en mi, ya veo que no.

—Oh, los hombres podemos llegar a ser unos malditos.

—Y tu, no tienes novia o esposa?—Cerro los ojos, y una sonrisa fue apareciendo en su rostro.—Tomaré esa sonrisa como un sí.

—Esposa, y es la mujer perfecta, pelee por ella, un maldito la estaba insultando y yo, no podía permitirlo.Que estos policías no entiendan que no puedo solo sentarme a ver como insultan a la mujer de mi vida es una idiotez, nadie va a lastimarla mientras yo viva.—

—Es muy lindo lo que dices, pero el hecho de poseer un arma y de drogas terminarán haciendo que la pierdas, puedes volver a terminar aquí, incluso, en la carcel, y ella no te esperara por siempre, quizás muere mientras tu cumples condena, creo que si en realidad la amas, deberías cambiar tu estilo de vida.—Su sonrisa se esfumó y ahora no había expresión en su rostro—Supongo que has pensado en la idea de una familia con ella, y para eso, necesitas dejar esa vida, necesitas un buen trabajo, ganar un buen sueldo, y pasar tiempo con ella.

Si, podría dar clases de psicología en prisión,no creo que me hagan pasar mas de 10años ahí, cuando salga aun seré joven. Podre estudiar y ser alguien igual.

Ninguno de los tres se atrevió a decir algo, mire el reloj de la pared, 8:19am según el cartel afuera de la estación, los juicios comenzaban a las 9,mis nervios llegaron de nuevo.

—No te asustes, es la primera vez, y eres menor aún no iras a la cárcel.—Sus palabras me tranquilizaron, cerré los ojos y decidí dormir un rato.

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¡Soy ana!