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Llegué al colegio, era nueva, por lo cual no conocía mucho de este lugar. Viví siempre en Galicia, pero mi padre consiguió una buena oferta de trabajo en Madrid, por lo que tuvimos que mudarnos aquí, a pesar de todos mis ruegos por quedarme en mi ciudad natal y terminar mi último año con mis amigos.

Caminé a paso lento por los pasillos, estaba bastante nerviosa a decir verdad. Yo no aparentaba ser de esas chicas que se ponían nerviosas de nada, pero mi exterior no muestra mi interior.

Tomé aire y toqué la puerta que daba a mi clase. El profesor me abre la puerta y me presento, él lo hace de igual forma, para indicarme un lugar en el aula. Tuve que sentarme junto a un chico bastante... ¿Cómo decirlo para que no suene mal? No era muy común ver un muchacho así, al menos no en mi ciudad.

—Soy Pablo, tu eres Celina, ¿Verdad? —habla, le sonrío y asiento.

—Si, soy yo...

—¿De dónde vienes? —inquiere.

—De Galicia, tuve que mudarme por el trabajo de mi padre. —contesté sin problemas.

—Yo tengo familia allí, es muy bello lugar. —asiente. —Finalizando con el cuestionario, ¿De qué trabaja tu padre?

—Oh, es tatuador... Un amigo puso un gran local aquí y le está yendo mejor de lo que esperaba y necesitaba ayuda. —me encojo de hombros.

—Asombroso...

Comenzamos a prestar atención al profesor, el cual empezó con la clase: matemática. La verdad que era un hombre bastante simpático, por lo que la clase se hizo más amena. Aunque, no es por alardear, pero se me dan mejor la práctica que la teoría.

Al tocar la campana del primer receso, me levanto algo tímida, ya que no sé que hacer o a donde dirigirme.

—Hey Cel, ¿Quieres venir conmigo y mis amigos a pasar el receso? —pregunta Pablo, tomando su mochila.

Asentí aliviada. Al menos no andaría rondando como alma en pena por el establecimiento.

Salimos del aula y caminamos hasta el patio trasero, nos escabullimos hacia un lugar en donde nadie nos veía.
Puedo ver a tres chicos sentados, fumando cigarros. Creo.

—Chicos, ella es Celina. —me presenta. —Él es Javier. —señaló a un muchacho de rizos y ojos mieles, atractivo la verdad, pero no de mi estilo. —Y él es Rubén. —presenta al último el cual tenía pelo rubio y lacio, sus ojos parecían mieles pero con verde, o al revés.

—Hola chicos. —saludo simpática.

Nos sentamos y comenzaron a hacerme preguntas. Ya entendí por qué eran amigos.

—¿Fumas? —pregunta Javi.

Asentí mientras sacaba mi caja de cigarros, puse uno en mis labios y lo prendí.

Comenzamos a hablar de temas al azar mientras fumábamos. Estos chicos eran de verdad divertidos.

—¿Tienes novio? —preguntó Pablo.

—No... ¿Ustedes? —contesto.

—Yo sí. —contesta con orgullo. —Soy gay...

—Después ambos estamos solteros bebé. —responde Rubén, con un tono bastante gracioso.

—¿Y como es tu novio Pab? —cuestiono, interesada.

—Es hermoso, si tan sólo lo vieras hasta quedarías enamorada... Pero no te conviene. —habla soñador, para luego apuntarme con su dedo en forma de amenaza.

Levanté mis manos con inocencia, haciéndolos reír.

El receso terminó y nos levantamos, para irnos a nuestra próxima clase. Ésta vez tuve que ir con Rubén, ya que nos tocaba la misma clase. Nos sentamos juntos sin dudarlo. Yo no tenía a nadie más... Y él tampoco.

N/A: bueno, primero que nada, ¡Feliz año! Espero que tengan un gran 2017.

La novela se va a basar en la relación de Rubén y Celina, antes de lo sucedido en el OS.

Espero les guste♥

Cande♥


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⏰ Última actualización: Jan 01, 2017 ⏰

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Perfect; One-shot, r.d.gDonde viven las historias. Descúbrelo ahora