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Sonrisas sonoras.

Nos despedimos y me fui a mi casa.
Que a decir verdad, vivo en un pequeño apartamento de lujo justo delante de mi buffete de abogados. Es suficiente para mí.
De echo, estoy de maravilla aquí.

Siento no haberme presentado antes... Como ya sabéis, soy Judith.
Tengo dos hermanitos, Hernán y Diego.
También tengo a una mujer muy preciada en mi vida, prácticamente mi ejemplo a seguir, a la cual llamo mamá. Digo que a la cual llamo mamá, porque ella no es mi madre biológica.

Lo único que recuerdo de mi madre biológica, son sus lindos pies con esa pedicura rosa pálido que siempre llevaba. Sus lindos pies andando por la orilla del mar y las estrellas brillando más que nunca mientras me contaba que debía ser fuerte. Que debía aguantar y no rendirme jamás. Que si la vida me quitaba algo, siempre sería para mejor.
Que cuando no pudiera más o necesitara fuerzas, mirara a la Luna. La Luna sí que es mágica. Todo el mundo, vemos a la misma.
Imagínense, si la miramos y alguien en cualquier parte del mundo también está mirándola, de alguna manera ya hemos establecido contacto.

De allí debe venir mis ganas de siempre ir a la playa. Hasta cuando no quiero, sin darme cuenta, mis piernas ya cogen rumbo por si solas.

No sé porque me dieron en adopción. Era buena niña, lo prometo.
Supongo que fue por motivos económicos, o... Alomejor no estaba preparada para ser mamá.
No quiero juzgarla... No hay que juzgar las personas sin conocerlas o en este caso, sin apenas darme una pequeña explicación.

Hernán está en una agencia de modelos desde adolescente, sus perfectos rasgos siempre le ayudaron.
En cambio, Diego, es más introvertido. Que por desgracia, sufre una enfermedad muy poco común que lo hace estar muy débil de vez en cuando.

Y... Mi papá murió en un accidente de avión, aún que no lo creo, porque a veces a mi lado lo siento.

Los quiero mucho, a no ser por ellos no sabría en que consiste el calor de una familia.

Roxie también es mi familia, en los peores momentos siempre me arropé en sus brazos. Y en los mejores siempre compartimos sonrisas. Sonrisas sonoras.