Los Secretos Del Corazon

Capítulo 3 (2da parte)

*Mientras en otra parte...*

- Y qué tal le fue princesa? – Dijo uno de los guardias con cierta picaría en sus palabras.

- Aaahh... – Dijo ilusionada – Es mejor de lo que creía...

- Al parecer no solo desea una amistad con el joven Cai, princesa – Dijo el otro guardia con cierto interés y preocupación.

- Rió juguetonamente – Primero la amistad, luego la conquista y al final... me casaré con el – Dijo juntando sus manos y con un rubor en sus mejillas.

- Oh princesa... – Dijo este en un suspiro pesado

- Hay algún problema caballero Scott? – Dijo fastidiada

- Yo creo que Scott oculta algo, princesa – Dijo pícaro el guardia que estaba escuchando todo.

- C-Cállate Salvador, n-no le haga caso princesa, el s-sólo está aquí para molestar – Dijo desviando la mirada y... un poco rojito

- Jeje, pobre de Scott, anda Salvador déjalo en paz – Dijo abrazando al guardia con un notorio rubor – No te preocupes Scott, yo te defenderé del malvado Salvador que te quiere molestar jeje – Dijo como una pequeña criatura.

- N-No se preocupe p-princesa... t-todo está bien – Dijo ruborizándose más hasta no poder.

En ese momento sólo se escuchaba risas por parte de Salvador, los tres han sido amigos desde que tienen memoria, siempre fueron juguetones entre sí, siempre se apoyaban entre si y a más cosas, ellos son de esos pocos grupos de amigos que, a pesar de sufrir cambios físicos y mentales, permanecen unidos en el paso del tiempo; Salvador the dog, un joven perro con un gran sentido del humor pero con un alto temperamento, con un pelaje azul marino con el pelo alborotado, con ojos grises y un degradado blanco en los brazos y piernas, cubiertas por unos guantes con una cobertura abierta junto con el tímido Scott the echidna caracterizado por, además de su pelaje anaranjado rojizo y sus ojos de color verde pantanoso, ser un joven ordenado y limpio a comparación de Salvador, y donde al final está Izary, una gata que no sufrió cambios "notorios" desde hace 3 años. Los 3 siguen siendo amigos, pero Scott se ha comportado raro últimamente, pues tiene claro que... se ha sentido atraído por una bella dama de ojos dorados y brillantes como el sol...

- Bueno! Vallamos al castillo, que la reina Blaze se puede molestar por tardar tanto, recuerde princesa que hoy tenía algo pendiente – Dijo Salvador dando pase a la voz de Izary

- Exacto, esta tarde saldré, así que estaré fuera hasta noche, no se preocupen que mi madre ya está enterada de todo.

- Bueno... que esperamos? – Dijo Scott apresurando el paso

*Una vez en el castillo*

- Izary, al fin vuelves, como te fue con el príncipe Cai? – Decía Blaze al ver a su hija con una sonrisa en su cara

- Oh madre... él es taaaan lindo y cortés~ – Decía recordando cada uno de los detalles de su amado

- Y que tal les fue? – Dijo curiosa

- Genial; mira! Hasta me dio su número! – Dijo casi gritando

- Él te lo dio o tú se lo pediste?

- É-Él me lo dio

- Tú se lo pediste verdad? – Dijo "seria" y con una sonrisa en su rostro

- Okey si – Dijo agachando su cabeza

- Bueno, será mejor alistarte para hoy en la tarde – Dijo mientras ambas iban a su cuarto