Se hacia tarde, los gemelos se iban ya, Dani y Eli se dedicaron una ultima mirada y ellos se fueron.
Yo: Enana...
Eli: Vámonos a casa...porfavor.
(Narr Eli)
Me monte en el Mini azul junto con mi hermano y mi mejor amiga, hablamos por el camino un rato sobre lo que ella le dijo a Dani y sobre lo que Dani le ha dicho a ella. Llegamos a casa y me despedí de ella, entre y al ver a mis padres, corrí hacia ellos y les abrace llorando.
Mama: Hija, ¿Qué ha pasado?
Raúl: Una historia muy larga...
Les conto todo lo que había pasado, yo no tenia fuerzas ni ánimos para hacerlo. Cada vez que lo recordaba lloraba mas.
Papa: Ay hija...lo siento mucho...pero no te preocupes...seguro se arregla.
Yo: No quiero saber nada de el...
Mama: No digas eso...anda vete a la cama, mañana tienes que madrugar.
Raúl: ¡Es verdad! Tengo que llevarte al aeropuerto.
Papa: ¿Tienes todo preparado?
Yo: Si, llevo la maleta y una mochila.
Mama: Vale cielo, descansa.
Me dieron un beso en la frente cada uno y yo uno en la mejilla. Mire a Raúl que sonreía ,me cogio a caballito y me llevo a mi cuarto.
Raúl: ¿Estarás bien?
Yo: Supongo...sigo algo dolida...
Raúl: Entonces...toma esto.
Me entrega una caja, la cojo y lo miro mal, ya esta con los regalos, le odio.
Yo: ¿Qué te dije?
Raúl: No te lo he comprado yo, me lo ha dado Jesús.
Yo: ¿¡QUE!? ¿En serio?
Raúl: Sii, ábrelo.
Desenvolví la caja y me encontré con un montón de fundas para mi nuevo Iphone, no me lo podía creer, eran todas preciosas, había como 20 o mas.
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