INDULGENTE (ItaSaku)

Capitulo 2.

Desperté escuchando un ruido en mi cocina que no me dejaba descansar, me levante con pereza arrastrando los pies y me mire rápidamente en un espejo de la sala, estaba un asco. Mi cabello corto revuelto, maquillaje corrido, ¡Dios parecía un payaso!, sin mas seguí mi camino a donde escuche el ruido y encontré a mis padres platicando en la mesa para cocinar.

- Estas hecha un desastre.- Dijo mi madre con seño fruncido.- Uno se lava la cara antes de dormir jovencita.- Criticando.

Mi padre me sonrió de lado mostrando su carisma, seguramente a mi edad seguramente fue muy codiciado por las chicas y quizás fue popular en la escuela. Que bueno que no se dejo llevar y se caso hasta terminar su universidad al igual que mi madre, pero ella estudio moda y ahora es dueña de una tienda donde vende parte de su mercancía.

- Ya lo se, madre.- Rodé los ojos, me dirigí a el lavado y moje mi rostro hasta asegurarme de deshacerme de todo el maquillaje.

- Dejala, seguramente esta agotada.- Paso a mi lado y revolvió mas mi cabello.- Regresare al hospital, hubiéramos comido contigo pero dormiste por horas.- Se disculpo.

- Yo iré al despacho, tengo que hacer atuendos adecuados para la temporada Primavera-Verano.- Siempre lo mismo...

- Esta bien, no se preocupen.- Sonreí.

Subí a mi habitación junto con mi mochila dejando atrás a mis padres, saque el teléfono para mirar las notificaciones que tenia en cada red social. Lo deje en mi buró y encontré una foto de hace años donde estoy de excursión con unos compañeros, aun recuerdo ese día, era en la primaria.

- Tal vez debería salir.- Murmure tomando una mochila de acampar; La llene de comida, una cantimplora, cuerdas, algo de ropa y mantas, fuí a la cocina ya vacía y agarre cuchillos de carnicero.

Fui impulsiva pero no quería ver la cara de Gaara hasta calmarme, porque si no seria capaz de gritarle y llorar.

Deje una nota a mis padres donde explicaba que necesitó distraerme, y así tome la decisión de ir al bosque en la otra ciudad mas cercana ya que en Los Ángeles, no hay.
Tome mi camioneta para que nadie me molestara, no imaginarían verme en un lugar asi, miro la ventana el paisaje olvidando el dolor que sentí alguna vez.

(...)

Minutos de llegar note a mi lado a una joven de pelo tan negro que parecía un cuervo, tenia sus rasgos bien marcados y vestía de cuero, junto con unas botas militar, al parecer también venía a acampar; Su automóvil de lujo daba a entender otra cosa.
Su atractivo rudo hizo por un momento dudar de mi heterosexualidad, pero luego borre ese pensamiento de mi loca cabeza rosada.

Note en mi también estructurandome con la mirada, no era una persona que se intimidara al ser observada, gracias al cielo. Cuando termino de hacerlo me sonrió de repente, por un momento me sorprendí y luego le devolví la sonrisa, se acercó a mi camioneta en aquel camino de tierra.

- Soy Hinata, ¿Cual es tu nombre?.

- Sakura, pero puedes llamarme Saku.- Aun sonriendo, esa chica me padecía agradable. El letrero de inicio del bosque más los altos pinos dan un aspecto lúgubre.

- Bien Saku, ¿Viajas por algo en especial?.- Se recargo igualmente en la parte de frente de mi auto.

- No en realidad....- Tratando de ocultar.-Bueno si, termine una relación.- Admito.- Vengo a relajarme un poco.

- Acampando supongo.- Señalo mi mochila bajo mis pies.

- Supones bien, Hinata.- La miro mejor con su ropa de marca no parece encajar en el lugar.- ¿Tu te perdiste?.