Todas las formas de enamorarse de la manera equivocada y más (Breddy Meyva)

II. desamor ¿¿??

Siendo honesto, no fue inesperado, no fue sorprendente, no fue nada. Pero fue todo. Porque aunque fue predecible, un intenso sabor agrio inundó mi boca, una sensación ardiente intoxicó mis ojos, una desesperación incontrolable se apoderó de todo mi cuerpo.

Por qué fue él, por qué me enamoré de él, por qué él no se había enamorado de mí, por qu
Fui interrumpido.

—Freddy, ¿me estás escuchando?

—Oh lo siento, estaba pensando,— fui interrumpido.

—Sí, sí, esa cabecita tuya y tus pensamientos que al parecer son más importantes que yo y lo que tengo que decir.— su voz sonaba juguetona pero en sus ojos no había más que seriedad.

Estaba equivocado. Yo no creía eso. Nadie sería capaz de creer eso. Él era lo más importante en toda mi vida. La verdad se me era un misterio el que él no pudiera ver, sentir, percibir, percatarse de mi amor por él. Qué acaso mi sentimientos no eran lo suficientemente fuertes o dignos para poder llegar a él, para poder moverlo. Nada era más importante que él. Nada que no fuera él le daba sentido a mi vida. Sólo era él. Siempre él.

—¿Cómo van las cosas con Esmeralda, Bry?

Indignado era forzado a decir el nombre de aquella chica. La odiaba pero no la odiaba porque no tenía motivo alguno... o lo tenía pero no era así, porque en realidad sólo seguía siendo inmaduro.

—Bien,— sonreía, se reía, sus mejillas tomaban color mientras hablaba sobre ella.

Anteriormente. Antes. Antes de que él la hubiera conocido solía perderme en su mirada, en sus labios, en su cualquier parte, en todo. Esto causaba que cualquier sonido se bloqueara. Todo se mutaba. Ahora. Ahora todo se muta. Pero no sé por qué. Mi corazón palpita fuertemente, quizás él lo pueda escuchar, quizás todos en la escuela lo puedan escuchar. Pero es un diferente tipo de latido que al de antes. Todo está paralizado y no escucho nada pero lo veo y él está contento y él habla sobre ella. Y yo trato de escucharlo, trató de regresar pero estoy perdido. Pero no como antes. No estoy perdido en su gloriosidad. O lo estoy, porque siempre estoy admirando su belleza. Pero estoy perdido en algo más intenso. Aunque suene irreal, ya que mi amor por él es lo más intenso que he sentido en toda mi vida pero lo que siento ahora es demasiado. Es mucho. Estoy perdido porque él tiene a alguien. Y es muy probable de que llegue amarla. No creo que pueda llegar a sentir algo como lo que yo siento por él. O eso espero, o quizás no porque eso suena muy egoísta y hasta este día he sido demasiado egoísta y debo dejar de serlo porque lo que yo anhelo es su felicidad y mis sentimientos oscuros sólo la opacaran y no puedo permitir eso. Pero es difícil cuando estoy perdido. Todo es difícil. Siempre ha sido así. O lo había sido. Hasta que lo conocí todo era difícil pero él cambió todo.

Todos los días, tantas personas en el mundo caminan por las calles y pasan por un número incontable de personas. Creo en pocas y tantas cosas porque a veces siempre pienso mucho. Así que no sé cómo me siento sobre el destino. No sé que creer porque en lo verdaderamente seguro que creo es en Bryan. Pero por qué, por qué él, por qué ella, por qué yo.

—...Así que es muy probable que pasemos toda la semana de descanso juntos.

—¿Oh? Qué genial, Bry. Espero que se diviertan.— sonreí.

O intenté de sonreír. Odiaba que mi sonrisa no era genuina. Odiaba que mis palabras tampoco lo fueran. Había mucho que no veía a Bryan tan feliz como estas últimas semanas. Y aún así, yo no podía llegar a expresar esa alegría que se suponía debería de sentir. Por qué no la siento.

—Lo haremos.— guiñó el ojo.

Me sonrojé. Porque soy patético. Sabía por qué había guiñado el ojo pero él tenía el efecto de destruirme. El tenía todo para acabarme.