Capítulo 4: Encuentros no deseados.

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Aún tenía los nervios por comenzar mi primer día de clases, Hoy ¡OSEA HOY!. Hunter tranquilizate, actúa con normalidad como tu sueles hacerlo.

Chris no paraba de tararear en el coche, una canción de Ed Sheeran. Claro, como el no es un estudiante, no esta nervioso. Me molestan aveces los adultos. El tan tranquilo mientras yo me estaba comiendo las uñas, poco faltaba para arrancarme los dedos.

-¿Contento de empezar tu primer día? -embozó  una sonrisa que me dio en ese momento ganas de matarlo.

-Claro, feliz...-dije irónico volviendome a comer las uñas a lo que Chris río divertido.

-Todo ira bien-acarició mi cabeza suavemente- eres mi sobrino, sabras arreglartelas.

¿A eso le llama ánimos? Si el fuera un general en un ejercito, y les dijera a sus soldados "Os la arreglais solos ", ya pueden darse por muertos.

-Aquí estamos- dijo.

No me había dado cuenta y ya estabamos en mi nuevo instituto.
Estaba pensando otras cosas, que no me había percartado de lo corto, que había sido el viaje.

Me baje del coche apretando la correa de mi mochila, vaya nervios. Ahora desearía que Jules estubiera aquí para darme ánimos .
Cada vez que la angustia se apodera de mi, el siempre esta para darme unas palabras de aliento.

-Vendre a recogerte, ya te avisare-se despidió y su coche se alejó del centro.

Gire mi cabeza y vi un edificio grande y amplio, la entrada estaba cubierta de arboles, y habia arbustos bien cortados y cuidados. Parece que el insti tiene bastantes ingresos. Algunas chicas repartian folletos a los recien llegados, seguramente nuevos, como yo.

El instituto se llamaba "REGALÍA SIMMONS". Aparte del edificio grande, había otros tres más pequeños que seguramente eran los pabellones y los gimnasios.

Oh, vaya corazón, por favor.... deja de latir.
Me encogi y tube las ganas de hacerme bolita.

Pero antes de eso, una cara conocida paso por mi lado, junto a otro chico, él  que no paraba de regañarle y quejarse de algo.

Nuestras miradas se cruzaron y valgame Dios que no sentí  todo el peso del mundo sobre mis hombros. No pude disimular mi cara de impactado al verle de nuevo y encima, ¡EN EL MISMO INSTITUTO!

-Oh enano....-dijo adormecido analizandome por unos segundos y siguió su camino con su amigo, entrando en el instituto.

-No puede ser....-me llevé las manos a la frente y un dolor de cabeza me empezó a marear.

Esto es un mal augurio.

○○○

-Hunter Lee verdad-La secretaria revisó unos papeles de mi matrícula y sonrió de lado muy amablente. Una señora delgada, rubia y con unas gafas redondas, que vestia un vestido rosa claro, me dio la bienvenida, entregandome mi horario y un mapa del instituto con el número de las aulas puestas.

-Gracias.

-De nada, espero que te agrade estudiar aquí y te adptes rápido - se cruzó de brazos, aún con una sonrisa en los labios.

- Eso espero -le di un apretón de manos y salí del despacho.

Revise el horario y me tocaba Matemáticas en el aula 4-B. Odio las matematicas, sobre todo por qué nunca, y digo nunca, se me han dado especialmente bien. Simplemente, las odio.

Pregunte a un profesor que encontre en el pasillo y me ofreció a llevarme, ya que le dije que era nuevo. Cruzamos los pasillos de la primera planta y vaya la gente aun estaba fuera de las clases hablando con otros de otras clases, algunos hasta pateaban un balón , sin que ningún profesor les viera.

Solo Tú (Yaoi/Bl) [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora