Inocente Lujuria

Capítulo 9

Harley.

Mis ojos pesan demasiado, un dolor punzante llega a mi cabeza, escucho mucho ruido, pisadas, gritos y disparos, me levanto demasiado rápido lo que hace que me maree, veo todo borroso y mis ojos arden.

Estoy desorientada, no se donde estoy.

No puedo nisiquiera tratar de recordar, mi mente está en blanco. Los fuertes estruendos de los diparos son seguidos y hacen encogerme más sobre el sucio y mal oliente colchón.

Trato de esconderme de lo que sea que este sucediendo allá fuera pero antes de que eso sea posible la puerta que está frente a mi cae con fuerza y entran varios hombres disparando, me concentro en pensar en una idea para poder salir pero lo único que puedo hacer es retroceder silenciosamente.

Veo a varios hombres caer a causa de los disparos, sangre mancha el mugroso piso. Siento que la bibis está en mi garganta. Esto es espantoso.

Me encojo cuando veo una figura acercarse a mi, grito cuando sus manos cogen un puñado de mi cabello con demasiada fuerza haciendome poner de pie, trato  alejarlo pero me coje aún más fuerte y me sarandea.

Siento la punta de la caliente pistola en mi sien y jadeo ruidosamente  al darme cuenta que talvez será el día en el que muere y no me despedí de mi papá, no le dije lo mucho que lo amo.

Veo como otros hombres tambien me apunta a mi y al sujeto que me tiene, como si no se dieran cuenta que ya tengo un arma apuntandome, no necesito más.

Miro mi alrededor y no entiendo nada, de nuevo trato de recodar algo pero ningún recuerdo viene a mi mente, no se porque estoy aqui. El pánico esta en todo mi cuerpo cuando miro otra vez todas las armas que apuntan hacia mi, se que no hay esperanzas, cualquiera puede aplastar el gatillo y entonces estaré muerta.

Estoy llorando sin control. Pataleando aterrorizada mientras ojos frios miran en mi dirección.

Trato con todas mis fuerzas soltarme para poder correr, pero soy demasiado débil y no puedo zafarme.

Entonces todo sucede muy rápido. El hombre que me sostiene cae y yo con él, la cabeza me duele gracias al golpe y siento humedad impregnandose en mi ropa, paso los dedos por el lugar humedo y veo que lo que me está manchando es sangre del tipo que me sujetaba, siento terror al saber que el hombre sangra y posiblemente está muerto.

Intento ponerme de pie y ayudarlo por que aún que haya intentado matarme no puedo simplemente dejar que se muera, pero alguien más me toma de los brazos para ponerme de pie.

Trato de alejarme otra vez, pero el agarre es firme y me sorprende el hecho de que cuida en no hacerme daño, el toque es tan diferente al del sujeto de hace rato.

Giro mi rotro para mirarlo, es un hombre corpulento y tiene un pasamontañas permitiendome solo observar  sus ojos que se encuentran con los mios, y extrañamente miles de sensaciones pasan por mi cuerpo, yo reconozco esos  ojos. Todo a mi alrrededor muere, no escucho nada, no más diparos, gritos y pisadas solo él y su intensa mirada.

Aleck.

Él está aquí, y no se porque pero me siento segura por primera véz desde que desperté.

Oigo su voz cuando dice.

-Te sacaré de aquí-

Y le creo. Creo firmemente que me sacará de aquí y estaré a salvo. Es totalmente abrumador confiar tanto sin conocer.

Me coge a modo bebé como si no pesara nada, sus brazos me acogen con una delicadeza impresionante, casi como si temiera hacerme daño.

Me acurruca sobre su pecho.