I

834 82 24
                                    

Sentado frente a su escritorio y alumbrado por una pequeña lámpara se encuentra Shadow the Hedgehog. Su expresión es seria e indiferente como ya es habitual. Sin embargo, lo traiciona la mirada. Sus ojos se encuentran cristalizados como si no hace mucho hubiese roto en llanto. Lo que era evidente sobra decir.

"No quiero volver a verte."

Esas palabras no hacían más que taladrar una y otra vez su dolido corazón. Jala de sus púas con desesperación de que ese dolor termine de una vez por todas, pero es inútil.

-Soy un imbécil. - susurra para sí mismo.

Ya sin saber que hacer recuesta su cabeza contra la fria superficie del escritorio. Pero en ese momento sus ojos se cruzan con una imagen que se clava como una flecha en su pecho. Un portaretratos cualquiera figuraba como decoración a un lado del escritorio. Pero el mayor detalle no era ese, sino su contenido, una fotografía. En ella se mostraban: un erizo azabache de vetas rojas que abrazaba a una eriza de piel rosa y bellos ojos verdes cual jade. Ambos sonreían en aquella imagen, siendo eso lo que más lo lastimaba por dentro. Acercó el portaretrato a él para contemplarlo mejor.

-Realmente lo arruiné, ¿no es así Amy? - se dirijía a la foto como si con ella hablase - Pero me temo que después de todo no puedo rendirme contigo.

Dice con una media sonrisa de lado y coloca el portaretratos justo frente a él. Luego saca de uno de sus cajones un montón de hojas de papel y un bolígrafo.

-Pase lo que pase. - comienza a decir - Te lo prometí y voy a cumplir. No importa cuanto tiempo me tome, pero llegaré a tí de una u otra forma.

Entonces Shadow pone en contacto la punta de aquel bolígrafo negro con la fina superfície del blanco papel.

***

Querida Amy.

Antes de nada quiero disculparme por todo lo que pasó. Sé bien que te fallé y con una simple disculpa como esta no basta para compensarte. Debo confesarte que desde nuestra discusión el dolor en mi corazón no me ha dejado tranquilo y todo empeora al saber que no quieres verme ni en estampilla. Aunque me resultaría muy simple pegarme a tí como chicle he preferido respetar tus deseos. Así que no me queda más opción que comunicarme contigo por este medio (considerando que me bloqueaste de cualquier otro tipo de red social).
¿No te parece irónico? Recuerdo que cuando deje de colaborar con el Dr. Eggman y me uní temporalmente a ustedes... No soportabas verme, mi mera presencia te enfermaba. Por lo que tú no eras nada más que una quejosa molestia. Sin embargo, nunca me imaginé que por un pequeño accidente todo eso cambiaría.

¿Lo recuerdas Amy? Yo todavía tengo aquel día muy presente en mis recuerdos...

-¿¡Por qué no dejas de molestarme Rose!? - exclamé ya muy fastidiado.

-¡No hasta que te disculpes Shadow! -me respondiste con la cara roja de impotencia.

-Ya te dije que lo sentía - en realidad estaba satisfecho con mi fechoría (molestarte era muy divertido) - No tenía idea de que ese pastel lo preparaste para el Faker. Pensé que era de los que compró Tikal.

-A mí no me engañas. - me apuntaste con tu dedo índice de manera acusadora - Sabías muy bien que ese pastel no lo compró Tikal. Así que no intentes escudarte con eso.

-Acúsame cuanto quieras Rose, de todas formas eso no hará que recuperes tu pastel - recuerdo que evitaba tu mirada cuanto me era posible.

Pero cuando mi digné a mirarte me arrepentí de inmediato. Tus ojos jade estaban cristalizados, muestra de que te pondrías a llorar en cualquier momento. Por alguna razón que nunca llegue a comprender, cada vez que te veía en ese estado tan lamentable me sentía incómodo. Pero eso fue suficiente para que me arrepintiera y me acercara a tí.

-Lo siento - fue lo primero que dije para luego acariciar tu cabeza - Supongo que me pasé con esto. El Faker llegará mañana por la tarde y yo no sé nada de repostería. Pero mi casa queda cerca de aquí al igual que un supermercado. Así que podríamos...

-Te perdono Shadow. - me dijiste al entender a lo que quería llegar - Pero ahora no me alcanzaría el dinero ya que lo gasté con los ingredientes del anterior. De todas formas te lo agradezco.

Me dedicaste una sonrisa de satisfacción, lo cual no hizo más que molestarme. En ese momento no lo entendí, pero ahora comprendo que lo que buscabas era una disculpa sincera de mi parte. Pero yo era tan orgulloso que no me conformaba solo con eso. De modo que te impedì marcharte y te agarré de la mano para empezar a caminar.

-¿Shadow qué pretendes? - preguntabas mientras luchabas por que te suelte.

-Nos vamos para el supermercado - dije irritado - Me comí todo tu pastel. Por lo que todo corre por mi cuenta para que puedas reponerlo.

-G-gracias. - te limitaste a decir.

No hablamos en todo el camino. Yo seguía molesto por haberme arrepentido con tanta facilidad ante esa cara llorona tuya. Supongo que tú pensabas más en el sabor del nuevo pastel que hornearías. Incluso dentro del supermercado no cruzamos palabra por un buen tiempo... hasta que me hablaste.

-¿Shadow? - intentabas llamar mi atención - No puedo decidir el sabor que tendrá el pastel. ¿Cuál escogerías tú?

-Eso es lo último que deberías preguntarme Rose. - te respondí sin expresión alguna - Soy todo lo opuesto al Faker, no creo que una elección mía te sea de ayuda.

-Aún así quiero saber tu respuesta - inflabas las mejillas con insistencia.

-De chocolate - dije al final - Me gusta mucho el sabor del chocolate.

-Ya veo. - deviaste la mirada a los productos con una sonrisa plasmada - Entonces de chocolate será.

No dije nada. De todas formas no era asunto mío lo que hicieras. Solo quería cumplir mi parte y terminar con eso. Al terminar las compras nos dirijimos a mi casa que te quedaba mucho más cerca que la tuya propia. Apenas llegamos recuerdo que fuiste muy curiosa, por lo que casi llego a echarte. Pero terminaste disculpándote totalmente apenada y te concentraste en el pastel. Por mi parte me quedé sentado en el sofá leyendo un poco, pero el aroma de lo que estabas horneando me tentaba a devorarlo. Sin embargo, pude controlarme y concentrarme en mi lectura. Al menos fue así hasta que llegaste a interrumpirme.

-Pruébalo. - dijiste al acercarme una cuchara con alguna mezcla rara de un postre.

-¿Cómo sé que no esta envenenado? - traté de molestarte, pero tú ni siquiera te inmutaste - Puede que termine por enfermarme.

-Solo abre la boca erizo. - me acercaste todavía más la cuchara.

Yo te empujé levemente (bueno tal vez un poco más que leve) para alejarte. Lo que terminó haciéndote enojar y forzejear conmigo para que me metieras la cuchara en la boca. Pero resbalaste con parte de la mezcla que cayó al suelo y caíste accidentalmente sobre mí, que todavía permanecía en el sofá. Mis músculos se tensaron ante aquella acción. Jajaja todavía me causa gracia la expresión de horror que teníamos en ese instante. Ese fue el accidente que lo cambió todo...

...Un beso accidental que hasta el día de hoy agradezco que me pasara a mí.

Espero que al igual que yo todavía conserves ese recuerdo con alegría.

Siempre tuyo,

Shadow the Hedgehog.

***

Tras escribir todo aquello el azabache se dispuso a meterlo a un sobre y llevarlo al buzón que estaba a pocos pasos de su casa. Estaba dispuesto a todo, incluso a esperar una respuesta por el resto de su existencia.

-Ella lo vale. - se dijo a sí mismo mientras metía el sobre en aquel buzón azul.

..........................................................................

Holiwis mis sensuales lectoras/es.

Espero que esta primera parte haya sido de su agrado y pueda tener su apoyo a partir de ahora. De ser así porfa piquenle a la torpe y sensual estrella ☆ y dejenme sus comentarios.

De antemano les agradezco mucho por leerla y darle una oportunidad. Los amodoro 😍😍😍

Sin más que decir...

...Eve cambio y fuera :3

Pase Lo Que PaseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora